La disputa legal en torno a la icónica portada del álbum Nevermind de Nirvana ha dado un nuevo giro. Una vez más, Spencer Elden, el niño que aparecía en la portada del álbum, ha vuelto a presentar su demanda por pornografía infantil contra los miembros supervivientes de Nirvana, desatando una nueva polémica y reavivando los debates sobre la expresión artística y los derechos personales.
La demanda se presentó por primera vez en agosto de 2021, alegando que la portada del álbum, que muestra una fotografía suya desnudo cuando tenía cuatro meses, constituía pornografía infantil. Después de que el caso fuera desestimado en septiembre de 2022 por un juez de distrito de EE.UU. en Los Ángeles, Elden se opuso a la decisión, argumentando que el juez se había equivocado al vincular la demanda a un plazo de prescripción.
El 21 de diciembre de 2022, el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito dictó una sentencia decisiva, reinstaurando la demanda de Elden. La decisión del tribunal se basó en la noción de que cada reedición de la portada del álbum podía considerarse un nuevo daño personal, eludiendo así la prescripción. La sentencia aclara que la cuestión de si la portada del álbum Nevermind constituye pornografía infantil no es objeto de examen en este recurso.
Elden, quien ahora tiene 32 años, solicita una indemnización monetaria por lo que describe como “daño psíquico o emocional extremo y continuo”. Sus representantes legales sostienen que la sentencia anterior del juez sobre la prescripción era incorrecta. Los abogados de Elden también alegaron que Kurt Cobain, el fallecido líder de la banda, había documentado una “visión retorcida” para la portada del álbum en anotaciones de su diario, alegando que su fijación por las imágenes pornográficas comenzó en la infancia.
Sin inmutarse por el restablecimiento de la demanda, el equipo legal de Nirvana sostiene que Elden conoce bien los hechos que rodean el caso. Dave Grohl, uno de los miembros supervivientes de la banda, señaló que Elden incluso tiene un tatuaje inspirado en la portada en cuestión. El abogado que representa a la banda calificó la demanda de “infundada” y expresó su confianza en prevalecer contra el desafío legal.
Al reanudarse la disputa, las demandas de Elden van más allá de la compensación monetaria. Además de pedir una indemnización por daños y perjuicios, quiere que Nirvana elimine la portada original de Nevermind de cualquier posible reedición. Elden ya había intentado censurar la portada para la edición del 30 aniversario del álbum, pero sus esfuerzos no tuvieron éxito.
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