La energía, las voces, los instrumentos, los setlist y la puesta en escena son una parte de los factores que hacen que un concierto o un festival quede marcado en la memoria de una persona. En este punto de la historia de la música en vivo, los artistas o agrupaciones han dejado de depender únicamente de su interpretación musical para gestar shows que dejen en su público una sensación de satisfacción, o incluso ganas de repetirlos. De este modo, el arte de crear las visuales que acompañan el performance cada vez es más y más apreciado al ser capaz de elevar las experiencias a niveles inimaginados.
Alejandra González Casallas o VJ Alejandra –como bautizó a su proyecto profesional– es una artista visual y Video Jockey colombiana que entendió que lo que se proyecta en las grandes pantallas de los escenarios es igual de importante que la música por sí sola. “Ahora los espacios están muy llenos de imágenes y si tú no tienes un show llamativo, de pronto no va a tener el mismo impacto”, opina.
Antes de decidirse por la producción de medios audiovisuales estudió unos cuantos semestres de artes visuales, pero al sentir que la carrera no le ofrecía lo que necesitaba, optó por un camino que le permitiera construir un proyecto a largo plazo. En aquel momento pensó, “Tengo un concepto, pero necesito herramientas para hacer algo más tangible que performático”, y con esto en mente fue construyendo su camino.
En sus primeros años de vida universitaria comenzó a asistir a fiestas de música electrónica, espacios que por décadas han ofrecido experiencias sensoriales únicas de la mano de imágenes en movimiento. En una ocasión, se fijó en el arte que se estaba proyectando y tras conversar con la persona encargada, esta le pasó el software que utilizaba. A partir de entonces fue abriéndose paso en la creación de visuales para espectáculos en vivo.
A medida que iba adentrándose más y más en el medio, comenzó a darse cuenta de que muchas veces lo que se mostraba en pantalla tenía poco o nada que ver con la música, y llegó a la conclusión de que detrás de todo debía existir algo más trascendental que unificara la vista con la audición. “Dije, ‘Esto necesita un poco más de concepto. No puede ser simplemente tirar imágenes locas y ya está. Tiene que haber un hilo conductor’”, cuenta. En cuestión de meses, ya estaba desarrollando proyectos de mayor peso en la industria, y ahora suma alrededor de 12 años dedicándose a diseñar visuales como Vj Alejandra.
Según ella misma, le gusta reconocerse como Video Jockey ya que al tratarse de un término que en ocasiones es menospreciado en su gremio, es “contracultural” y genera un conflicto con la creencia popular de que un Vj no puede crear cosas más grandes. “Es en honor a como empecé”, afirma. “Hoy en día ser Vj es interpretar la música en función del proyecto. En conjunto interpretamos qué es lo que va a pasar ahí”.
De trabajar en fiestas de electrónica, pasó a diseñar visuales para artistas de talla mundial como Karol G, Ozuna, Feid, Sebastián Yatra y más. Actualmente, es parte del equipo que diseña y produce los shows de Eladio Carrión, siendo su presentación en Coachella 2023 uno de sus más grandes logros hasta ahora. Para aquella presentación, Alejandra propuso utilizar una pantalla volumétrica para proyectar hologramas y aunque esto significaba un nuevo reto, sus colegas –y ella misma– sabían que ella era la persona idónea para manejarla. “Fue consolidarme en ese momento”, dice. “Recoger los frutos de muchos años de trabajo”.
Con los años, ha creado un grupo de trabajo sólido con el que puede materializar las visiones que los y las artistas tienen en mente para sus giras, logrando que su música pueda sentirse en más de una dimensión. Esto sumado a su constante aprendizaje de nuevas tecnologías y técnicas, así como a su deseo de innovar, ha permitido que ahora goce de cierto reconocimiento en la industria.
“No hay ningún artista mío que se parezca a otro en el tema de las visuales. Cuando hago algo, intento que sea totalmente nuevo y eso es gracias a la versatilidad que tengo cuando cambio de crew”, explica. “Un show no se parece al otro, cada uno tiene su identidad. Me gusta sentarme con el artista y si no sabe qué es lo que quiere visualmente, me siento a buscar de qué forma hacer auténtico ese show para ese artista”.
Llegar hasta aquí no ha sido un camino fácil, pues además de la presión y explotación que se vive en el mundo del diseño, el ser mujer en un campo ocupado en su mayoría por hombres la han llevado a demostrar que los espacios se los ha ganado a pulso. “Siempre he sentido que para mí muchas cosas han sido el doble de difíciles, pero eso también lo hace más interesante y valioso”, sostiene. Pero su trabajo habla por sí solo: animación 3D, producción audiovisual, SFX y realidad aumentada son tan solo algunas de las habilidades que tiene para ofrecer a la hora de crear shows que se roben el aliento detrás y frente al escenario.
Más allá de apoyar artistas en sus presentaciones, Vj Alejandra ha comprendido que sus creaciones también hacen parte de los mejores recuerdos de cada una de las personas que asisten a un concierto, así estas no lo sepan. “Todo lo que hacemos en conjunto es tan importante para miles de personas al mismo tiempo”, resalta. “Esa euforia colectiva es la que me hace olvidar todo el trasnocho, no comer, no bañarme. Eso es lo que me hace olvidar de todo eso que arriesgo en este trabajo”.
