“Lo lamento mucho si estás viviendo y tienes 17 años”, entona Matty Healy sobre el piano que abre el álbum más reciente de su banda, The 1975. El cuarteto británico inició cuando el cantante y sus secuaces eran adolescentes, y desde entonces han crecido bajo el ojo público entre la presión de ser la próxima sensación, las redes sociales y los imprevistos naturales que llegan con la edad. Aunque en este corte –titulado ‘The 1975’, como todos los intros de sus discos– hace rimas graciosas y lanza pullas, el músico manifiesta su desespero por el mundo que le estamos dejando a las próximas generaciones.
Aquella dualidad fue la que ayudó a hacer de The 1975 uno de los actos de rock más alucinantes de la década pasada, tanto con sus trabajos discográficos como en sus entrevistas. Con Being Funny In A Foreign Language, la agrupación vuelve a tomar la delantera en el pop rock de los 2020, fusionando las texturas e ideas musicales del soft rock de hace 30 años con una visión moderna que suena tan familiar, pero que a la vez está a la vanguardia. El LP continúa usando la angustia como impulso, pero aquí lo hace más sutilmente. La euforia de canciones como ‘Sex’ y ‘Love It If We Made It’ es reemplazada por deleites musicales más finos, al tiempo que las letras de Healy conservan cierta gentileza aun cuando juzgan la atmósfera sombría de 2022.
Funny, su quinto LP, fue grabado con el reconocido productor Jack Antonoff entre Londres y Nueva York mientras los cuatro miembros del grupo ensayaban música nueva, espontaneidad que logró ser plasmada en el disco. La balada sentimental ‘All I Need to Hear’ parece haber surgido en una sesión de improvisación y, por otro lado, el extenso breakdown de ‘Happiness’ insinúa que los músicos (y el saxofón) estaban esperando que el vocalista alcanzara su nota más alta para poder desenvolverse. El saxofón predomina a lo largo del disco, un instrumento que es clave para evocar los picos de ansiedad de la banda.
El resto del LP es enérgico a pesar del conocimiento que tiene Healy sobre el funcionamiento interno del mundo, llevando el pilar de “sonido alegre, letra reflexiva” del pop a otros niveles. La vibrante ‘Looking For Somebody to Love’ contrasta su título con una reflexión sobre cómo la soledad puede llevar a las personas a la locura; ‘Part of the Band’ hace un balance entre el énfasis en la viola, los versos repletos de referencias y el toque psicodélico que hay en su coro. ‘Wintering’ lleva a The 1975 de visita a la casa de su familia, entretanto, un ritmo intenso enmarca la letra de Healy, la cual resulta ser una versión cómica de aquellas conversaciones para “ponerse al día” que predominan en las reuniones familiares.
Funny alcanza el clímax con ‘About You’, un lamento de soulgaze en el que el cantante usa su registro de voz más bajo para recordar un amor del pasado. En ella, su voz se entrelaza con las cuerdas, las guitarras delicadas y los saxofones arrulladores, así como con la voz de la esposa del guitarrista Adam Hann, Carly Holt. La revelación llega cuando ella se adueña del estribillo, haciéndole saber al músico que también ha estado pensando en él. De este modo no solo saca la canción de la cabeza de Healy, sino que el tono soprano de Holt apacigua tanto el caos que le da vida a los recuerdos que lo han estado atormentando. Le da un nuevo aire al sonido de The 1975, diciéndole al público que todavía queda esperanza, aún cuando solo se trata de una sorpresa incrustada en una canción de pop.
