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No existirá nadie como Taylor Hawkins

Taylor era una auténtica estrella de rock, no solo por su capacidad para mover al mundo con su batería, sino por su manera de ser él mismo en cada momento

Por  PABLO MONROY

marzo 29, 2022

Neumanvision

“Mi hermano de otra madre, mi mejor amigo, alguien por quien recibiría una bala”, así describió Dave Grohl a Taylor Hawkins en su libro The Storyteller. “Desde la primera vez que lo conocí, nuestro lazo fue inmediato y nos acercamos más cada día, con cada canción, con cada nota que tocamos juntos”. La conexión y amistad que forjaron fue innegable para quien la presenciaba, incluso Alanis Morissette preguntó a Hawkins cuando tocaba la batería para ella durante sus giras: “¿Qué vas a hacer cuando Dave Grohl te invite a unirte a Foo Fighters?”.

“Estábamos como enamorados”, decía Grohl durante una entrevista. “La primera vez que nos tomamos una cerveza pensamos, ‘vamos a ser amigos por el resto de nuestras vidas’”. Cuando llegó el momento de unirse a Foo Fighters, Hawkins no lo dudó ni un segundo.

Taylor era una auténtica estrella de rock, pero esa autenticidad no solo radicaba en su enorme talento para tocar su instrumento, sino en su manera de ser él mismo en cada momento; nunca mostró ni un rasgo de soberbia, a pesar de formar parte de una de las bandas más importantes del rock actualmente.

“Honestamente, lo que ves públicamente de Taylor, su personalidad pública, es simplemente quien es. Simplemente es feliz, es hermoso”, mencionó Dave Navarro durante una entrevista reciente para ROLLING STONE.

Nació en Texas, y a los 5 años se mudó a Laguna Beach, California. “Nunca había sido bueno en nada cuando tenía 10 años. No era particularmente bueno en la escuela, ni los deportes. No había encontrado algo todavía”, recordaba Hawkins en una entrevista. A sus 10 años tuvo su primer encuentro con una batería que tenía su vecino, y encontró eso que le hacía falta. “Quería tocar la guitarra pero era mucho trabajo. Él me dijo, ‘solo siéntate en la batería, inténtalo’. Me enseñó un ritmo básico y cuando lo toqué me dijo, ‘eres un baterista’”. Así nació uno de los rockeros más feroces sobre el escenario. Taylor se entregaba con pasión en cada presentación, en cada ritmo. “Es mi responsabilidad mantener unida a la banda”, decía.

Además de su legado con Foo Fighters, Taylor creó una interesante carrera en solitario y formó el proyecto alterno Taylor Hawkins and The Coattail Raiders, además, tenía su banda de covers llamada Chevy Metal, con la que se mantenía en forma mientras no giraba con los Foos. Hawkins también trabajó con innumerables artistas importantes. Toda una generación recuerda haberlo visto por primera vez en el videoclip de ‘You Oughta Know’, de Alanis Morissette, aunque él no haya grabado el álbum Jagged Little Pill.

No pudo ser fácil entrar como baterista a una banda fundada por uno de los bateristas más reconocidos de las últimas décadas. “Me tomó un rato encontrar mi lugar”, dijo Taylor sobre estar en el “nuevo grupo de Dave Grohl”, después de la disolución de Nirvana, sin embargo, Grohl siempre reconoció su talento. “No extraño ser un baterista, porque tengo al mejor baterista del mundo”, dijo el líder de Foo Fighters en una entrevista para 60 Minutes. “Taylor es un baterista mucho más técnico que yo. Creo que él hace a la banda funcionar como funciona”. Para Taylor, había una manera simple de decirlo: “Si él es discípulo de John Bonham [Led Zeppelin], yo soy discípulo de Stewart Copeland [The Police]”.

La partida de Taylor nos deja con el corazón roto porque, además de ser un virtuoso baterista y el corazón de Foo Fighters, él era un fan más. “Quería ser Roger Taylor, estar en Queen. Quería tocar en estadios cuando tenía 10 años”. Era un apasionado de la música, y su gran talento y carisma lo llevaron a trabajar con sus más grandes ídolos. Durante una entrevista con ROLLING STONE en Español, en la que Taylor promocionaba el décimo álbum de estudio de Foo Fighters, Medicine At Midnight, el baterista nos platicó sobre los privilegios de haber colaborado con las figuras que lo influenciaron. “Siempre que puedo tocar con alguien que admiro es increíble, pude tocar con Rush: increíble; pude tocar con Queen: increíble; pude conocer a Stewart Copeland: increíble; Perry Farrell: increíble; Dave Grohl: increíble… todas esas personas… Mick Jagger… putamente increíble… Es una de mis cosas favoritas de estar en Foo Fighters, que puedo conocer —y a veces trabajar— con mis héroes”.

Hawkins tenía el poder de bajar de la batería y tomar el centro del escenario para interpretar ‘Somebody To Love’ con una fuerza y voz similares a las del icónico Freddie Mercury. Durante cada concierto de Foo Fighters aprovechaba la oportunidad para hacer ese homenaje a la banda que fue tan importante para él. Otro momento icónico se dio en Wembley, cuando cantó ‘Rock And Roll’ de Led Zeppelin con Jimmy Page en la guitarra, John Paul Jones en el bajo y Dave Grohl en la batería. Sin duda un instante histórico.

El 25 de marzo pasó a la historia como un día oscuro para la música. Foo Fighters venía de una gira por Latinoamérica que había pasado por México, Chile y Argentina. Ese día, la banda se iba a presentar en el Festival Estéreo Picnic de Colombia. Momentos antes de su presentación, mientras admiradores llegaban al escenario y esperaban con ansias a la banda estadounidense, Black Pumas salió a dar la trágica noticia: “Como la mayoría saben, Foo Fighters tuvo que cancelar su presentación, algunos saben que la razón es que su baterista, Taylor Hawkins, acaba de fallecer. Black Pumas está aquí para honrar a Taylor y a Foo Fighters. Quisiéramos pedir un momento de silencio, y cuando termine, quiero que hagan todo el ruido que puedan por Taylor Hawkins”, dijo el vocalista de Black Pumas al público colombiano. “Qué descanse en paz Taylor Hawkins”, agregó. El público que esperaba a Foo Fighters quedó atónito, algunos se quedaron a corear canciones como ‘My Hero’ mientras se prendían velas en el escenario.

Tato Ramírez

Días antes del deceso de Taylor, la banda se encontraba en Paraguay. Emma Sofía, una niña de 9 años de Asunción, llevó su batería a las afueras del hotel donde se hospedaba Hawkins y tocó hasta que el baterista salió a conocerla para tomarse fotos con ella. La presentación de la banda en Paraguay se canceló debido a las condiciones climatológicas.

Hawkins ya había tenido un roce con la muerte. En 2001 sufrió una sobredosis que provocó que cayera en coma por dos semanas. Dave Grohl nunca se movió de su lado. “Fue muy raro, no había muerto pero había tenido una sobredosis. Y me sentí totalmente indefenso, ¿sabes? Entonces me senté con él hasta que despertara. Cuando despertó le dije ‘todo va a estar bien’, y me miró y me dijo ‘vete a la mierda’, ahí es cuando supe que todo iba a estar bien”, relata el músico.

“Dave es mi mejor amigo, más que eso, es como un hermano, realmente lo es”, dijo Taylor en el documental Foo Fighters: Back and Forth. “Él estuvo a mi lado como yo estaría a su lado si algo lo pusiera al borde de la muerte. Estaría perdiendo la cabeza”.

No podemos dejar de pensar en el dolor que la noticia provoca para Dave, quien había vivido algo similar en 1994 con la muerte de Kurt Cobain. El músico había utilizado ese sufrimiento para convertirse en uno de los artistas más prolíficos y productivos de los últimos años.  “Lo que me lleva a no parar es el deseo de seguir moviéndome, el deseo de seguir viviendo”, dijo Grohl para ROLLING STONE en Español. “Una gran parte de mi vida es sobrevivir, y así ha sido por un tiempo. He perdido a muchos de mis amigos, y eso me hace apreciar la vida cuando veo lo frágil que es, y lo rápido que puede irse todo. Todos los días despierto y pienso en todo lo que quiero hacer, y eso me da algo que esperar. Así siento que he hecho algo de mi vida, porque no tenemos mucho tiempo. Además, soy muy afortunado porque estoy rodeado de gente que se siente igual”, agregó Grohl.

Otro gran amigo e ídolo de Taylor Hawkins era Perry Farrell, fundador de Jane’s Addiction y del festival Lollapalooza, quien después del deceso de Hawkins compartió un emotivo homenaje. “Era mi mejor amigo. Amado en mi hogar por mi esposa, mis hijos y hasta mis perros”, dice Farrell en el video. “Siempre que venía creábamos música. Mi perro Cloud siempre se sentaba junto a él. Uno de los bateristas más apasionados que he visto en mi vida. Cuando pienso en él, lo resumo en una palabra: velocidad. El don de mantener una velocidad confidente e impactante. Una gran parte de mi corazón la tenía reservada para él. Lo acepté en mi corazón cuando nos hicimos amigos porque él era un hombre puro, muy puro de corazón.  Pura vida… Recibía fragmentos de música tan seguido como recibía mensajes de ‘Te quiero’. Estaba obsesionado con la música y las grandes canciones. Nuestra pasión por la música era la base de nuestra amistad. Así nos conocimos. Me contaba historias de cuando iba a conciertos de Jane’s Addiction en los 80, que eran muy underground. Aunque no nos conocíamos en esos momentos, compartíamos una historia. Éramos jóvenes tratando de ser grandes músicos. Quién iba a saber que en esa noche fatal, Taylor se cimentaría como una de las leyendas de la música de todos los tiempos”, confesó Farrell. 

Etty Lau Farrelll, esposa de Perry y también amiga de Hawkins, concluye el video con una emotiva nota de voz que grabó el baterista desde el hotel en el que falleció horas después. “Esto es algo muy personal y preciado para mí. Es el último mensaje de audio que recibí la noche del jueves. Fue enviado desde el hotel, dice Etty. Las últimas palabras de Taylor Hawkins retratan su espíritu de paz y amor: ‘Cuídense entre ustedes y yo cuidaré de mí mismo. Y los veré en Sao Paulo. Los amo. Duerman bien’”.

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Su partida deja un vacío inmenso en el mundo de la música y en el corazón de los admiradores que utilizaron a Foo Fighters y el espíritu de Taylor como una fuerza para salir adelante en momentos difíciles. Nunca existirá alguien como Taylor. Su virtuosismo, ferocidad, velocidad, carisma y autenticidad, lo cimentan como una verdadera leyenda de la música.