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Moda y Orgullo LGBTIQ+: más que una prenda de vestir

Las colecciones de Pride de la plataforma FARFETCH llegan para celebrar la diversidad de las identidades y expresiones de género

Por  ROLLING STONE

julio 1, 2022

FARFETCH

Cada primero de junio las redes sociales de cientos de miles de marcas y organizaciones se visten de arcoíris para conmemorar el mes del Orgullo LGBTIQ+, una época del año destinada a celebrar la diversidad de las personas queer y a su vez recordar que aún queda mucho camino por recorrer hacia la reivindicación de sus derechos. Esta lucha tiene muchos lados por los que mirarle, pero indiscutiblemente la moda ha sido fundamental al entenderse como una herramienta que ha ayudado a muchas, muchos y muches a expresar su identidad de género más allá de las reglas impuestas.

Aunque la revuelta de Stonewall en 1969 fue el suceso histórico que dio origen a esta conmemoración,  la lucha de la comunidad LGBTIQ+ se remonta a décadas más atrás. Desde entonces, la forma de vestir ha sido utilizada para que personas o grupos del mismo colectivo se identifiquen entre sí en espacios en los que no pueden expresarse libremente. Los códigos de vestimenta han variado con el paso del tiempo, siendo tan sutiles como una pañoleta o un mosquetón, o tan explícitos como el arte de travestirse. Pero los millennials y/o la generación z tienen cada vez menos miedo de mostrar su identidad, razón por la que ahora vemos que las camisetas, los zapatos y los maletines de las diferentes banderas LGBTIQ+ son más fáciles de encontrar.

En un mundo que avanza rápidamente y pide que nos adaptemos a su ritmo de cambio, marcas como Balenciaga, Adidas, Karl Lagerfeld, Versace Jeans Couture, Diesel, Vans y muchas más, convergen en Farfetch, una plataforma inclusiva, inspiradora y única que busca potenciar la originalidad e individualidad de una comunidad de creadores, curadores y consumidores a través del amor por la moda, presentando colecciones del Pride cada año.

La plataforma se enfoca en el consumidor,  por medio de una curaduría impecable, exclusividad y un sistema logístico que permite la entrega en 3 a 7 días en cualquier parte del mundo, permitiendo un rápido acceso a más de 3 mil marcas y 400 mil productos.En este sentido, FARFETCH garantiza una experiencia verdaderamente única, con la posibilidad de comprar la más amplia selección de moda de lujo en una sola plataforma.

Desde 2008, año en el que fue lanzada la plataforma, se ha establecido como un e-commerce que conecta clientes de más de 190 países con más de 1300 marcas, boutiques y tiendas departamentales del mundo cuya selección de lujo ha sido curada cuidadosamente para brindar una experiencia excepcional de compra. Para gustos los colores, de modo que allí se encuentran prendas minimalistas como hoodies con un pequeño detalle de la bandera creada por el artista Gilbert Baker (que por motivos prácticos fue modificada años después), sudaderas con la palabra “gay” en el pecho, camisetas con el arcoíris en todo su esplendor, ropa interior e incluso velas.

Excluyendo el postureo y la falsa inclusión de ciertas marcas, es necesario destacar la existencia de muchas otras que no se toman el Pride como una estrategia más de marketing, sino como una misión de responsabilidad social que va más allá de los arcoíris y el trillado “love is love” durante 30 días al año. En el caso de FARFETCH, una buena parte de las colecciones del Orgullo que presenta tienen el sello Positively Conscious de la iniciativa Good On You, que las certifica como éticas a nivel ambiental y social. En la misma línea, es firmante de la Carta de la Industria de la Moda para la Acción Climática y es miembro del Fashion Pact, la coalición global de compañías dentro de la industria de la moda y los textiles comprometidas con causas como combatir el calentamiento global, restaurar la biodiversidad y proteger los océanos.

También es valioso reconocer que, en este caso, la moda ha servido como catarsis a nivel personal y colectivo, al tiempo que ha sido un foco de visibilidad de identidades diversas en el mainstream y lo comercial en la última década. Así que hechos como que la modelo y actriz trans y afro Dominique Jackson, reconocida popularmente por su papel de Elektra en Pose, sea uno de los rostros de las pasarelas y campañas de Mugler (también presente en Farfetch) es un gran avance en materia de representación queer.

Pero aunque la moda sea cíclica, también es cambiante y está en constante transformación, por lo cual las nuevas generaciones han querido romper con los estereotipos impuestos por la sociedad en general y los creados dentro de la misma comunidad LGBTIQ+. La necesidad de hallar prendas de vestir neutras dio origen a la ropa genderless, categoría que pretende romper con las etiquetas y las clasificaciones absurdas que dictan que un retazo de tela es para un género u otro. Esto, sumado al reconocimiento de las personas no binarias –ubicadas bajo el espectro trans–, ha contribuido a que la ropa neutra vaya creciendo en popularidad. Por ahora es un concepto al que le falta mejorar en la práctica, no obstante, atrás han quedado los tiempos en los que los trajes eran para los hombres y los vestidos para las mujeres.

El Pride no solo es una ocasión para celebrar el amor, sino para tener presente la diversidad de las expresiones de género y ser conscientes de que aún en 2022 los derechos de las personas de la comunidad siguen en juego en diferentes lugares del mundo. No es inclusión forzada, como dirían muchos por ahí, es reconocer que la historia se ha encargado de violentar aquellas identidades que “desafían” lo establecido, con el propósito de darles el lugar que les ha sido negado.