El ambiente es clásico. la guitarra de Marley sobresale del resto de la melodía. Is this Love suena en el estéreo. Amplificadores y bocinas vintage definen el espacio. El sonido es casi perfecto. Lewis Hamilton, de 32 años, está recostado en una butaca antigua de Oswalds Mill Audio —un showroom de sistemas de audio en Brooklyn—. Mueve las manos al ritmo de la música: un reggae de los Wailers. Lo acompañan varias personas de su equipo, pero él camina por el lugar, solitario. Está disfrutando la música. La siente, la conoce.
Luego de algunos intentos logramos reunirnos en Nueva York. Y es que pareciera que Hamilton vive a una velocidad de 400 km por hora, ya sea en aviones o en monoplazas, siempre está en un lugar diferente. La agenda de la temporada es implacable, y pasa la mayor parte del tiempo viajando y compitiendo.
Un mes atrás nos veríamos con el triple campeón de la Fórmula 1 —la competición de deporte a motor más importante del mundo— en una de sus ciudades preferidas, Ciudad de México. En ese momento solo quedaban tres carreras para el fin de temporada y Hamilton aún tenía posibilidades de remontar. La ciudad azteca pareció el escenario ideal para poder retratar a Lewis en un ambiente diferente, lejos de la sofisticación y elegancia que rodea la máxima categoría.
Pero 30 minutos antes de la hora acordada recibimos una llamada. Era su publicista: “Lewis no podrá llegar, no se siente bien”. Quedé desconcertado. Habíamos estado coordinando por varios meses esta entrevista. Además, unas horas más tarde recibí un correo electrónico donde me decían que Lewis quería estar en absoluta concentración para la carrera, pues su único objetivo era ganar las tres carreras faltantes. Lo entendí. Hamilton atravesaba por días de mucha presión, había perdido el liderazgo unos meses antes, y su rival más fuerte, su compañero de equipo, Nico Rosberg, se veía con la confianza suficiente para no mirar por el retrovisor.
Lewis Hamilton nació en Stevenage, Inglaterra, muy cerca de la capital. Creció en un barrio de clase trabajadora en Londres mientras sus padres se divorciaban. Repartía su tiempo entre ambos: entre semana estaba con su madre, proveniente de Birmingham, y los fines de semana los pasaba con su padre, quien emigró al Reino Unido desde Granada. Junto a él nació su afición por las carreras de autos. Desde los cinco años Ayrton Senna ya se perfilaba como su héroe: “Quizá por el color de su casco asumo yo… y mi sueño era ser Superman o Senna. Manejaba carros a control remoto y era muy bueno, le ganaba a gente de nuestra edad”.
Desde muy temprano, con la ayuda de su padre logró incursionar en el karting, y allí mostró un talento excepcional al volante. Una vez dio inicio a la pasión por la velocidad y la competición, el joven piloto ya tenía decidido cuál sería su futuro: ser piloto de la Fórmula 1.
Hamilton ha estado ligado a las carreras desde muy niño. Lleva más de 25 años compitiendo en coches supersónicos, y su paso por las diferentes categorías, lo han convertido en un experto a su relativa corta edad. Es un gran conocedor de los aspectos técnicos, de la estrategia, la táctica, e incluso de la política que rodea al gigante corporativo que es este deporte. Se ha sabido llevar por el camino de la no confrontación y jamás ha caído en las absurdas polémicas ni en los enredos de la prensa europea.
Hamilton tiene una opinión clara y crítica sobre la Fórmula 1 actual. No desconoce el comportamiento elitista en el que se encuentra sumergido el deporte y no quiere tapar el sol con un dedo. Reconoce las pocas oportunidades que tienen pilotos de todo el mundo para llegar allí, y además es muy consciente de que ha sido el único piloto negro que ha pisado el paddock. Pero al mismo tiempo, es un apasionado acérrimo del deporte a motor, y ha sabido enfrentar estas circunstancias adversas.
“Solo un hombre que sabe lo que se siente al ser derrotado puede llegar hasta el fondo de su alma y sacar lo que le queda de energía para ganar un combate que está igualado”.
Muhammad Ali.
Los campeones tienen cosas en común. Es una serie de características y comportamientos que se forjan con años de entrenamiento. El espíritu competitivo no es una característica con la que todos nacemos. Algunos seres humanos hacen de la competitividad su mecanismo de supervivencia, incluso en entornos donde no hay lugar para los débiles. Pero los campeones también son derrotados. Y para Hamilton, su última derrota será la mejor fuente de energía en la búsqueda de su propia perfección, para retomar lo más alto del podio.
Lewis Hamilton es un purasangre. El tres veces campeón del mundo proviene de la familia de los guepardos. Hambriento y siempre listo. Su velocidad, su inteligencia y poder mental, su visión y su espíritu de competencia lo hacen inalcanzable. Su naturaleza obedece a otras leyes. El piloto inglés pertenece a otra especie, a otra clase. Viene de un lugar en donde perder no es permitido.
Dices que te gustaba Ayrton Senna, probablemente por el color de su casco. ¿Qué más te inspiraba de él como persona o como corredor?
Tenía cinco años… creo que en ese entonces solo se trataba de ver autos geniales. Pero a medida que comencé a crecer empecé a investigarlo… pienso que me gustaba la forma como manejaba, su carácter, la manera como se comportaba y hablaba acerca de las competencias, la familiaridad y la unidad que sentía con el carro; pienso que con el tiempo se volvió un sueño para mí. De niño pensaba: “Sería increíble poder sentir eso y hacer lo que él hace”. Nunca pensé que pudiera tener la oportunidad, pero luego comencé a correr y sabía que Ayrton había hecho lo mismo y que yo tendría que ser el mejor para ser como él.
¿Cómo fue el camino para convertirte en piloto? Se entiende que como fan quisieras hacerlo. ¿Fue muy difícil imaginarte en esa posición? Parece ser un mundo muy cerrado…
Realmente no, es fácil imaginarse en un lugar, la mente es increíble. La imaginación es algo con lo que todos jugamos. Podemos imaginar que somos pilotos o estrellas de cine, o lo que queramos, pero lograrlo supone un reto grande y desconocido. Me enfocaba en manejar lo mejor posible y en disfrutarlo. Mi padre era feliz mientras yo manejaba y cuando triunfaba.
“Los deportes a motor tienen que empezar a crear oportunidades para que el mejor piloto logre estar aquí y no el más rico”.
Entonces tu padre te apoyó mucho en tu carrera…
Sí, no estaría compitiendo si no fuera por él.
¿El hecho de ser afrodescendiente hizo que tu carrera fuera más difícil?
Los deportes de motor son, en general, dominados por blancos. En 24 años no me he topado con otra familia negra… creo que hasta ahora estoy comenzando a ver niños de diferentes razas corriendo.
Debe ser gratificante ver este cambio…
Es algo hermoso. Esto es más caro de lo que la gente piensa; a mi papá le tocó hacer de todo. Tenía su trabajo normal y tan pronto terminaba tenía que ir a otro; trabajaba con máquinas dispensadoras, y hubo un momento en el que tuvo cuatro trabajos para que yo pudiera correr. Es muy loco que un padre se sacrifique así por un sueño desconocido, pero él creía tanto en mí que lo hizo posible, y cada vez que me monto en un carro hoy en día soy consciente de eso, de todo el esfuerzo que hizo, porque mucha gente quisiera tener la oportunidad que yo tengo ahora. Mi familia trabajó tan duro que cada vez que me monto a un carro lo agradezco. Trato de manejar por mi padre.
Eso debe ser un impulso muy grande para ganar todas las carreras. ¿Te consideras adicto a la victoria? ¿Es algo que te domina?
No, la victoria no lo es todo. Lo que importa es el recorrido. Desde luego, la victoria es como la cereza del pastel, pero el trabajo, la diversión, el camino que recorres con tanta gente, tu familia, tus amigos, los fans: eso es lo importante.
Es algo que no envejece. Siempre es como la primera vez; tal vez gane la misma carrera, pero son dos días diferentes y en cada uno de ellos tengo distintas emociones. Todos los días son únicos, cada victoria es algo diferente; tal vez haya tenido que hacer algo distinto ese día para conseguirla.
¿Qué pasa cuando estás manejando y no vas ganando? ¿Qué tipo de emociones tienes? ¿Es frustrante?
Eso depende. La meta siempre es ir adelante. Hay carreras en las que no he ganado, pero es doloroso si miras atrás, no es que sea frustrante, es doloroso porque uno se ha preparado. Puede que tropiece un poco, pero siempre vuelvo porque nunca me rindo…
Teniendo en cuenta que tu padre hizo enormes sacrificios por tu carrera, supongo que el no rendirse fue una parte muy importante de eso. ¿Es ese un rasgo importante de tu personalidad?
Sí, definitivamente. Me hicieron bullying en el colegio cuando tenía como cuatro o cinco años, y a los seis le pedí a mi papá que me metiera en clases de karate. Él me inscribió a las clases y empecé una disciplina para defenderme. Cuando empecé a correr autos me metió a clases de boxeo. No sé cuánto tiempo llevaba boxeando, pero me subieron a un ring con un chico mayor que yo. Era más grande, más agresivo. Yo estaba petrificado. Y recuerdo que me bajé del ring con la nariz rota y mi papá me dijo que volviera. Y me instó a superar mis miedos, a no darme por vencido. Así que volví al ring y derroté al chico. Y no me rendí. Eso ha sido un símbolo, un modelo a seguir porque cada vez que he tenido esa sensación en mi vida me digo: “Vuelve a intentarlo. Tú puedes”.
¿Crees que esto del bullying está cambiando? ¿Qué piensas del bullying en este momento?
No lo sé… sigue ocurriendo alrededor del mundo y mucha gente lo sigue sufriendo. Creo que es muy negativo, algo terrible y cobarde. Y espero que la gente busque ayuda. Y que la gente que vea que esté sucediendo haga algo, que tome medidas.
¿Cuál es la mejor manera de superar el bullying?
No sé. No tengo todas las respuestas para eso. Solo hablo por mí. Yo me metí a clases de karate los lunes y los jueves para defenderme de los bullies, y que no me molestaran más. Aunque eso no significa que todos tengan que hacer lo mismo. Creo que los profesores podrían hacer un buen trabajo ayudando a los niños. Los niños les dicen a los profesores, y los profesores les dicen algo a los otros chicos, pero ellos no se lo toman en serio y continúan haciendo lo mismo. Hace poco vi algo en los EE. UU. en donde a un niño le estaban haciendo bullying y nadie estaba haciendo nada. Así que llevó un cuchillo al colegio. El otro le dijo que se reunieran en el patio. Y cuando empezaron a molestarlo, este chico sacó un cuchillo y le dispararon. Es terrible.
Volviendo a tu carrera, uno imagina que la F1 debe consumir una gran parte de tu energía, tu concentración, tu tiempo. ¿Ha afectado tu vida personal?
Hay sacrificios y beneficios. Cuando chico corría los fines de semana mientras todos mis amigos hacían lo que hacen los muchachos. Yo estaba compitiendo. Me iba del colegio los jueves y corría de viernes a domingo. Me perdí de mucho del colegio y de la relación con los chicos, y ahora viajo como loco; y siempre estoy en mi teléfono para mantenerme en contacto con mis amigos. Es difícil mantener una amistad o una relación. Uno no puede estar presente todo el tiempo. Mis mejores amigos se reúnen a comer y me mandan fotos o hablamos por FaceTime. Pero casi nunca estoy presente, porque estoy en China, en Rusia o corriendo en algún lugar. Es difícil, pero por otro lado me doy un descanso en invierno, viajo por el mundo, conozco gente y comparto con los fans. Tengo un gran trabajo y hago cosas increíbles.
Sabemos que en tus ratos libres practicas deportes extremos, viajas, te gustan las emociones fuertes… ¿Prefieres mantenerte activo o descansar de vez en cuando?
Generalmente el único momento en el que descanso es a final de año, cuando me desconecto… Pero de resto soy muy activo, siempre estoy haciendo algo. Así soy.
La F1 ha evolucionado mucho en los últimos años y tiene nuevas reglas. ¿Cómo te ha parecido? ¿Crees que los cambios han sido buenos o ha sido difícil adaptarse?
No ha sido tan malo. Ha sido un trabajo duro. Se ha necesitado mucha gente para ayudar a adaptar las cosas. Antes de ir a la F1 corría en otras categorías, así que uno pasaba uno o dos años en una categoría y luego iba a otra. Entonces, cuando crecí y llegué la F1 dije: “Bueno, ya no hay más etapas, esto es la F1”. No sabía si me aburriría después de un par de años, pero siempre está evolucionando, cambiando, hay nuevos sistemas, nuevos programas, nuevas llantas, hay nuevos motores, así que la meta siempre está cambiando a través de los años. Es bueno que las reglas cambien, eso la refresca; eso pone a prueba tu mente, tus habilidades, tu cuerpo y tu equipo. Nos gustan esos retos.
Hay muchos factores que inciden en los resultados de la F1 (el carro, el equipo, etc.). ¿Qué crees le da la ventaja al piloto para ganar hoy en día?
Es un trabajo de equipo. Ellos son los que preparan el carro. Es una gran parte del proceso de victoria. Si ese equipo no rinde, no importa qué tan bueno sea yo, nunca ganaremos. Y si yo no soy bueno y no tengo un buen desempeño, no importa qué tan duro trabajen ellos. Es un esfuerzo de equipo. En últimas, para ganar, un piloto debe tener el equipo correcto y la gente correcta alrededor. Finalmente el mejor piloto es el que ganará. Siempre y cuando tenga la misma oportunidad que los demás.
¿Qué piensas del retiro? Debe ser difícil dejar esa vida de emoción y victorias. ¿Has pensado en la forma como tomarás la decisión de retirarte?
Sí. Pienso en el retiro de vez en cuando. He pensado en eso, he pensado en cómo tomaría la decisión, en cuál sería el momento correcto… tengo una especie de plan acerca de lo que quiero hacer o lograr antes de tomar esa decisión. Para ser honesto, he trabajado bastante por tener una vida por fuera de las pistas durante los últimos años, para que cuando pare no sea una diferencia tan grande. Y es algo en lo que voy a seguir trabajando. Así que el día que pare no será el fin.
¿Qué te gustaría decirnos acerca de tu equipo y la tecnología de Mercedes? ¿Crees que es un factor importante en tu éxito? ¿Estás contento con el equipo?
Sí, me encanta el equipo, me siento muy orgulloso de ser parte de él. He estado con Mercedes Benz desde que tenía 13 años, pero he estado corriendo con este equipo por cerca de seis años. Ha sido un recorrido increíble, y estoy agradecido con cada uno de sus miembros y sus contribuciones con el equipo para ayudarlo a conseguir los tres títulos y para ayudarme a conseguir mis campeonatos mundiales. Son impresionantes.
En cuanto a la tecnología, Mercedes no sabe fallar. En sus autos, en sus motores. En este momento tenemos el mejor motor de la F1. Tenemos la mejor tecnología y estoy contento con lo que hemos logrado. Me siento muy confiado de contar con los mejores hombres para hacer este trabajo.
“La única presión que cuenta es la que yo me pongo. Todo lo que hay alrededor es humo. No me importa. Nadie tiene el poder de afectarme”.
¿Trabajan mucho de la mano de los pilotos? ¿El piloto es muy importante en la forma como ellos configuran el carro?
No pueden configurar el auto sin el piloto, así que sí. El piloto es crucial. El nuevo carro va a salir en un mes. El equipo no sabe qué tan rápido será hasta que yo me monte en él. No saben cómo se sentirá
el carro, ni el desempeño que tendrá, y entonces el piloto entra a desempeñar su papel. Yo tengo que darles un informe y traducir las emociones y los sentimientos que percibo del carro a las velocidades en las que andamos, y dárselo a los ingenieros en un formato en el que ellos lo puedan entender y ponerlo en cálculos. Por lo tanto, el piloto es clave para el desarrollo. En este momento están construyendo un carro, y no hay nada que yo pueda hacer para acelerar el proceso. Yo desempeño mi papel cuando me monto al auto.
Me gustaría hablar de Michael Schumacher porque él fue importante para Mercedes. ¿Crees que fue importante la forma como los carros estaban configurados? ¿Qué piensas de él y su legado?
Michael es el piloto más exitoso de todos los tiempos. Tuvo una carrera increíble, tiene una familia maravillosa. He tenido la oportunidad de compartir con su hijo, que también es un excelente piloto. Michael tiene unos récords impresionantes y logró mucho con su equipo. Deja un legado de lo que los pilotos aspiran ser algún día.
¿Cómo te sientes con las distracciones, la vida pública, la prensa, los chismes o los tabloides? ¿Te molesta o te complica la vida?
Para mí no marca ninguna diferencia. Creo que al comienzo de mi carrera me preocupaba por esas cosas y me afectaban, pero ya no les pongo cuidado. No leo lo que dicen y me concentro en dar lo mejor de mí, en el positivismo, en mi entrenamiento, en mi familia y mis amigos, en vivir cada día como si fuera el último, y la única presión que cuenta es la que yo me pongo. Todo lo que hay alrededor es humo. No importa. Lo que importa es lo que sé que puedo hacer y los logros que quiero obtener. Nadie más tiene el poder de afectarme. Finalmente yo soy quien tiene el control en lo que planeo y en lo que quiero hacer.
Eres muy conocido por fuera del mundo del automovilismo también, así que cuando sales de la pista, tienes interacción con el showbusiness. ¿Te gusta eso?
Es parte de lo que estaba discutiendo anteriormente. Algunos pilotos se enfocan solo en el automovilismo, y cuando dejan de competir no hay nada más para ellos. Por eso soy muy consciente de que estoy construyendo mi marca. No todo lo que hago es correr, así que viajo mucho, trabajo mucho por fuera de la F1, voy a shows de TV. Es una preparación para cuando me retire.
Cuéntanos acerca de esas otras pasiones y talentos que tienes aparte de competir
Me gusta todo, me gusta la música. Por eso es un privilegio hablar para rolling stone. La música siempre ha sido una gran parte de mi vida desde que me acuerdo. Es algo a lo que dedico tiempo personal. Me gustan los deportes, me gusta el ciclomontañismo, los deportes acuáticos. Voy a París al Fashion Week porque me gusta la moda. Saco parte de mi tiempo para estar aquí y ver las novedades de los diseñadores de modas. Es un mundo completamente distinto.
También he hecho algunos cameos en películas y TV y he participado en películas animadas. Doy lo mejor de mí. Hago todo lo que sea posible. Es algo muy loco para mucha gente, porque muchos se cierran y dicen: “No puedo hacerlo”. Deberían intentarlo, con más fuerza.
Ya que mencionas la música, nos damos cuenta de que usas audífonos todo el tiempo. ¿Oyes música mientras te preparas para las carreras?
Sí, oigo música todo el tiempo, cuando estoy trotando, cuando estoy viajando. No pasa un día en el que no oiga música. Es una gran forma de reducir el ruido de toda la mierda que sucede alrededor. Siempre hay cámaras tomando fotos, fans, ruidos de carros, mecánica, gente hablando. Así que lo más importante es tener la mente serena, y creo que la música es una buena manera de lograrlo. Me encanta la música. Es mejor tener un sonido que miles de sonidos al tiempo.
¿Qué tienes en tu playlist?
Realmente no tengo una lista, simplemente dejo lo que esté sonando o voy a Apple Music y pongo hot tracks. Me gusta descubrir nueva música. Todos los días sale algo nuevo. Así que oigo todo lo que suene. Mucho hip hop, R&B y reggae. A veces al poner random sale rock & roll o jazz. Me gusta estar al día por si sale algo nuevo.
¿Cuáles son tus artistas favoritos?
Bob Marley, Prince, Tupac, Jay-Z, Whitney, James Brown, Marvin Gaye, Michael Jackson…
Parece que sientes preferencia por las leyendas. ¿Te sientes inspirado por ellos y por lo que lograron?
Sí, crecí oyendo a Michael Jackson. Para mí son individuos únicos, grandes por derecho propio. Fueron inmensos y crearon música que trascendió, música que lo lleva a uno a otro lugar. Incluso muchos de ellos no están con nosotros hoy, pero su música nunca pasará. Recuerdo haber oído mucho a Michael y a Prince. Y creo que cuando sea viejo siempre oiré esa música.
Volviendo a la F1: uno tiene la sensación de que es un mundo lleno de lujos. ¿Qué tan fácil es entrar a la F1? ¿Ha cambiado algo desde que tú entraste?
Entrar a la F1 es prácticamente imposible en este momento para alguien que venga de donde yo vengo. Bueno, no es imposible, pero casi. Es mucho más fácil para los niños ricos. Si tienes dinero y un hijo que pueda manejar, tal vez él consiga un puesto. Si eres muy talentoso y vienes de un ambiente
humilde con poco dinero, o eres de clase media trabajadora, es muy difícil que entres.
¿Y por qué ocurrió esto? ¿Por qué es más difícil hoy?
Por la cantidad de dinero. Si eres rico puedes pagar tu acceso a la F1 con facilidad, de lo contrario no hay manera de progresar. Es muy difícil porque todo es cada día más caro y la F1 seguirá avanzando en las siguientes décadas. Mi padre me dijo que yo era el último de una generación. Y creo que solo Jenson [Button] y yo venimos de familias humildes, aunque no conozco el origen de todos. Así que ha sido más fácil para otros tener oportunidades. Pero hay gente increíblemente talentosa que no ha tenido oportunidades porque no tiene los medios. Es probable que haya un niño que gane todas las carreras, pero si hay otro que es rico, ese será el que progrese.
Eso es triste…
Lo es, y creo que la F1 tiene que tomar medidas, y los deportes a motor tienen que empezar a crear oportunidades. O no sé lo que tengan que hacer para que el mejor piloto, y no el más rico, logre estar aquí.
¿Hay algo que crees que pudieras hacer para cambiar eso?
No sé, pero lo voy a intentar. Puedes contar con eso. Definitivamente no me retiraré sin haberlo intentado.
¿Cuál es tu opinión acerca de Nico Rosberg?
No pienso nada de él. Éramos compañeros de equipo, trabajamos juntos por algunos años y él se retiró. Le deseo lo mejor.
¿Cómo te sentiste en la última carrera de la temporada anterior con el hecho de que él hubiera ganado el campeonato, a pesar de que tuviste un desempeño impecable?
Me sentí de maravilla, gané las últimas cuatro carreras; gané más carreras que él. Me sentí muy orgulloso de mí mismo por no rendirme, lo cual ha sido mi lema desde niño. Me sentí muy orgulloso por lo que logré.
¿Recuerdas algo de Juan Pablo Montoya?
Lo conocí, tiene una familia hermosa. Los mejores recuerdos son de su etapa en Williams, cuando los carros tenían una parte delantera horrible. En esa época había unas carreras increíbles, y es una lástima que no hubiera ganado un campeonato. Fue una buena época para Williams. Él es un piloto maravilloso y era grandioso verlo competir.
Finalmente, ¿cuál es tu meta para esta temporada?
Quiero que este año sea épico. Tiene que haber crecimiento y nuevos retos. Voy a tener un nuevo compañero de equipo, y quiero volver más fuerte. Quiero hacer un jonrón todos los fines de semana. Por fuera de mi deporte también quiero subir el estándar en todos los aspectos y llevar las cosas a otro nivel.
