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La nueva esencia de Emmanuel Horvilleur

Con un espíritu libre, el cantautor argentino habla sobre Aqua di Emma, su nuevo material discográfico, y los cambios que acompañan su nueva etapa musical.

Por  KARLA LEÓN

diciembre 18, 2023

Cortesía Sony Music

Yo soy la disco y amo que vengas a bailar acá”, canta Emmanuel Horvilleur, ante las primeras notas que nos introducen a Aqua di Emma, su séptimo material discográfico. La creatividad espontánea y la virtuosidad musical del argentino lo llevaron a componer y producir un material que celebra múltiples aspectos de la vida personal y colectiva, bajo una perspectiva amena y madura, por lo tanto, luego de veinte años de trayectoria, se muestra más libre que nunca.

Aqua di Emma es honestidad y reúne un montón de ingredientes. Siempre me gustó lo lúdico, pero también el misterio, lo sensual, lo rítmico, me gustan las imágenes en la música y todo eso está plasmado”, detalla Emmanuel a Rolling Stone en Español, desde su residencia en Argentina, previo a su llegada a México, donde ofreció un par de shows íntimos y acompañó a Siddhartha en el Foro Sol, para interpretar “Acapulco”.

Emmanuel comenzó a trazar los cimientos de este álbum en marzo de 2020, pero el caos de la pandemia lo alejó del estudio. Ante las circunstancias, y en medio de una nueva búsqueda musical, surgió Pitada, un álbum que le permitió reunir, de manera acústica, algunos éxitos de su carrera como solista. “Este disco nos vino muy bien, pero cuando pudimos retomar el estudio seguimos trabajando. Aqua di Emma es un poco el resultado de eso y de todos estos años de música. De hecho, está medio latente una segunda parte, un nuevo material que continúe con el sonido que inició en esta etapa”, revela.

La mirada musical de Horvilleur resulta fascinante; mientras desglosa una balada electro-pop que nos remonta a la época dance de la década de los años setenta, cambia el rumbo y nos somete en un trance con los sonidos aterciopelados del soul y el R&B. Así, tal y como lo describe, cada canción se transforma en un viaje distinto. “Siempre trato de sentirme libre y dejo que la música fluya. Mi música no es tan pensada, solo nace. En este disco le hice bastante caso a eso, a lo que me iba vibrando”, recuerda.

Cortesía Sony Music

Cuando apareció el título del álbum, Emmanuel supo que todo partiría de la experimentación. Junto a Marco Otranto, también conocido como Cítrico, se sometió a largas jornadas creativas para encontrar los sonidos, los ritmos y las secuencias que evocaran su nueva esencia musical. “Fue un momento que me allanó bastante. Probamos acordes y ritmos, y cuando encontrábamos algo que nos entusiasmaba nos poníamos a jugar; muchas canciones nacieron así.

Eso me divirtió, porque yo soy un compositor que toma inspiración de la guitarra acústica y la voz. Así que me gustó la idea de entrar a las canciones desde otros lados: con riffs o con el grupo buscando por ahí. Son procesos diferentes, pero todos, en definitiva, nos llevaron a una canción. Algunas melodías debí haberlas tenido por ahí desde hace tiempo, como “Prendan Ese Mic””.

Prendan ese mic, tengo algo que decirles / Bajen un poco la luz y abre esa botella que hoy / Hoy me pienso emborrachar de tu historia personal”, recita el músico, junto a Carlota Urdiales, en una fusión de jazz y blues, a la que sumaron arreglos de vientos y una letra íntima. “Tomamos la canción para completarla. Muchas veces, uno tiene pequeñas ideas y terminarlas implica trabajo; con Aqua di Emma decidí llevarlas a un buen lugar. Por ejemplo, para “Espíritu del Lugar” grabé bastantes cosas en México, junto a Pablo Cantú. La escribí hace un montón, creo que para el disco anterior, y no la metí porque sabía que me iba a llevar mucho tiempo y, finalmente, está dentro”.

Cortesía Sony Music

Horvilleur lleva el disco a su punto más alto con tres colaboraciones, dos de ellas, junto a Francisca Valenzuela y Miranda!. “Un día, mientras caminaba por las calles de la Ciudad de México, me encontré a Fran, así que la invité al estudio y le hablé de “Boca”; le gustó la canción y ese mismo día grabó su participación. Buscábamos algún paso más en las canciones y sucedió. Luego, con los Miranda! quise devolver la invitación que me hicieron para Hotel Miranda!. Inicialmente, la canción se llamaba “Muñeco”, pero Juliana me dijo: “Ponele “G.I. Joe””; me encanta lo que hicieron”, narra divertido.

Durante la exhaustiva búsqueda de una voz femenina para “Prendan ese Mic”, el cantautor encontró a Carlota Urdiales en Instagram. “Le escribí a algunas cantantes, pero un día me salió un video suyo cantando una canción, creo que de Amy Winehouse. La contacté, le conté que buscaba una cantante y aceptó. Nos encantó cómo quedó su voz, su registro y su personalidad en este track. Dos días después grabamos la voz definitiva, todo fue muy rápido”.

A lo largo de diez temas, el músico nos traslada por distintas historias y atmósferas, sin recurrir a las metáforas o a las fórmulas líricas complejas, en su lugar, elige la complicidad y la cercanía con el público. “Es como de la “vieja escuela”. Hay una cierta intimidad en el disco, porque decido hablarle al otro, pero no en términos de una multitud, sino a una sola persona. Es una sensación cara a cara y eso es algo nuevo”, medita.

Desde el lanzamiento de Música y Delirio, Emmanuel ha revelado múltiples caras de su proyecto, pero es con este nuevo material, que plantea una nueva etapa de su carrera para disfrutar, a conciencia, de su andar en la música. “Me mueve bailar, el funk, el groove, la música que te pone el espíritu bien arriba, pero también sé que cuando termino de tocar en algún lugar, y hubo euforia y alegría, me gusta bajar, y es lo que relata el álbum.

Cortesía Sony Music

Aqua di Emma es una noche larga. “Yo Soy la Disco” es ese momento en el que ves a la gente lista y vestida para salir a bailar y, después, los ves cansados en el bus o en el tren de regreso a casa. Eso es la vida. Esta nueva etapa trata sobre sentir mucho lo que estoy haciendo, de sentir lo lindo, de disfrutar los formatos amplios que tiene mi música, es decir, quiero sentir las distintas perspectivas que tiene esto”.

La fiesta terminó hace un par de horas”, se escucha en “Fin de Fiesta”, la última canción de Aqua di Emma. En un abrir y cerrar de ojos, el músico plasma, además, una declaración sobre el momento artístico en el que se encuentra. “La música te da mucho, no solamente la paga para mantener a tu familia, sino también la parte espiritual, los amigos que haces, los lugares que conocés.

Cortesía Sony Music

Hasta ahora, mi lugar en la música ha tenido diferentes etapas, es decir, soy un Kuryaki, esa fue mi escuela, pero también soy solo yo y he conseguido que la gente cante mis canciones. Sigo en la búsqueda de una canción que tenga historia, que se pueda cantar y se pueda hacer propia, que la gente la pueda hacer propia”, finaliza Emmanuel.

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