“Para mí, Buenos Aires es una ciudad mágica”, dice Sara Socas. En su segunda visita a la ciudad, la cantante española ha llevado una vida intensa, que coronará esta noche, con un concierto en La Trastienda, Balcarce 460, en el barrio porteño de San Telmo. “Además, en estos poquitos días que llevo aquí, me he visto otros otros artistas, con otros freestylers y como que me explota la cabeza de pensar que estoy a miles y miles y miles de kilómetros de mi casa, pero igualmente siento esa conexión musical y personal con tanta gente de aquí que estoy re manija”.
Es su regreso a la ciudad luego de la batalla de exhibición que hicieron con G Sony en el marco de la FMS. “Fue buenísima. La disfrutamos un montón, y el público también: nos lo demostró con tantos gritos y aplausos, que parecía que había el triple de gente de la que había en la sala, así que vamos por eso”.
Rapera, compositora y cantante, Sara es oriunda de Tenerife, Islas Canarias. En 2015 se mudó a Madrid para cursar el Doble Grado en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III. Allí se metió en el mundo del rap y el freestyle, y un par de años más tardes empezó a participar de batallas callejeras en parques de Madrid, Tenerife, Barcelona y otras ciudades de España. Eso que parecía un hobby, pronto la propulsaría al podio del circuito del freestyle hispano. Su primer disco como solista se llama TFN-MAD e incluye colaboraciones con el dúo de rap español SFDK.
Hace un par de semanas, lanzó “Fockit”, una colaboración con Marilina Bertoldi. “Trabajar con Marilina fue increíble porque no solo es una gran compositora, una show-woman y una rockera y una persona espectacular, sino también una música increíble”, se entusiasma. “O sea, con ella no es solo componer letra, sino que ya arma bastante todo lo que tiene que ver con la instrumentación, con la atmósfera del tema. Es increíble lo que es capaz de crear en todos los sentidos. Y además, bueno, creo que ideológicamente tenemos mucho en común: en nuestras formas de vivir y de presentarnos ante el mundo, y de representar también a quienes se sientan identificados. Y creo que eso nos unió mucho. Disfrutamos muchísimo, tanto la grabación de la canción como el rodaje del videoclip. Fue todo muy rápido: de hecho, para grabar la canción no fuimos a ningún estudio, sino que lo hicimos en su casa. Ella cuenta con un buen micrófono y una buena tarjeta de sonido. Luchamos para que fuera el mejor sonido posible y poder grabar ahí, aun con el ruido de la ciudad. Fue hermoso”.
Antes del show de esta noche, Sara se toma un rato para responder el Cuestionario RS.
1. ¿Cuándo fue la última vez que fuiste a una disquería? ¿Qué disco te llevaste? ¿En qué formato?
El año pasado, no recuerdo el mes exacto, pasé por una tienda de discos y vinilos de segunda mano de Madrid. Me llevé 3 CD’s: 2 colecciones de grandes éxitos de Jimmy Cliff y George Benson, y el álbum Blue is my middle name, de Ray Charles.
2. ¿Te acordás de los sueños habitualmente? ¿Tenés algún sueño recurrente?
Mis sueños siempre mezclan preocupaciones que me rondan la cabeza y sucesos muy recientes (del mismo día inclusive) que se desarrollan en mundos absolutamente random, que cambian todo el tiempo. A veces son una pasada y otras una verdadera angustia, de lo reales que se sienten. Pero no diría que se repitan nunca. Podríamos decir que mis sueños hacen freestyle, rescatan e inventan algo a partir del subconsciente, pero no parecen querer caer en lo mismo.
Sí que creo que hay algo de mágico en ellos. Una vez soñé que alguien me tocaba por la espalda y, al girarme, a quien veía era a mí misma. Creo que no es muy común verse a uno mismo, además a partir de ahí mi concepto de mí cambió mucho… Podría estar horas hablando sobre mis experiencias oníricas.
3. ¿Sos buena cocinera? ¿Cuál es tu especialidad?
No. Es una de mis tareas pendientes, aunque mucha importancia no debo estar dándole si llevo 26 años procrastinándola. Encima no sé por qué lo que mejor me sale con diferencia, y casi lo único que sé hacer, es el risotto. Me encanta el arroz y creo que intentaba impresionar a alguien cuando aprendí a hacerlo. Así que por otros aprendo, pero por vocación no ha sucedido.
4. ¿Tenés mascotas?
Sí. Soy una loca de los perros. A los 8 años mi carta a los Reyes Magos decía: “Queridos Reyes Magos: Este año no quiero nada, porque lo único que quiero en esta vida es un perro. Atentamente: Sara”. Claro, eso a Melchor, que era mi padre, lo partió, y Baltasar (con la caligrafía de mi madre) me respondió en una carta de vuelta diciéndome que fuera a adoptar uno, que no lo podían comprar ni elegir ellos. Terrible chantaje el que les hice pero linda lección que me enseñaron sobre la responsabilidad y la empatía con los perritos callejeros. Así tuvimos a Perla hasta que falleció en 2019.
Hace casi 1 año adopté a otro Firulais: Mango. El tipo tiene barba, se sienta de lado, llora cuando otro perro no le saluda… me cae demasiado bien, y afortunadamente yo a él también. Siempre vamos en pack, parecemos sacados de una serie.
5. ¿Cómo armarías el line up de tu festival ideal?
Escenario 1: Lía Kali, Cruz Cafuné, Orishas, Little Simz, Snoop Dogg.
Escenario 2: KAYTRANADA, Aminé, Brockhampton, Tash Sultana, The Blaze.
Escenario 3: Jorja Smith, Danileigh, Anderson Paak, Rihanna, Drake.
6. ¿Cuál es el instrumento más raro que tenés en tu casa?
No creo tener nada raro básicamente porque con los instrumentos tonteo, no tengo una relación seria, ¿se entiende? Tengo dos ukeleles regalados, dos guitarras y creo que lo más “raro” es una armónica, en la que solo sé hacer el cumpleaños feliz.
7. ¿Cuál era tu dibujito animado favorito cuando eras chica? ¿Y ahora?
Varios: Doraemon, Agallas el perro cobarde (creo que en Latinoamérica es “Coraje”), Dragon Ball y El Detective Conan. En la pandemia por aburrimiento empecé Naruto. Imagina si me gustó que 3 años después lo llevo tatuado.
8. ¿Tuviste alguna experiencia sobrenatural?
Tengo algunos recuerdos confusos en la infancia con estos temas, pero una nunca sabe si era la imaginación propia de ser niña, recuerdos que se entremezclan… así que diría que no. Nada concreto. Creo nuevamente que lo más paranoico lo vivo en los sueños. Y en la vida real, he pasado de ser escéptica 100% a creer en las energías, en las casualidades no tan casuales… eso ya para otra ocasión porque me aburro hasta yo de pensar en lo largo que sería.
9. ¿Cuál es el último libro que leíste?
La caída, de Albert Camus. Ahora voy a empezar otro título suyo: La peste.
10. ¿A qué celebridad te gustaría tener entre tu público?
Little Simz o Young Miko.
11. ¿Cuál es el objeto más viejo que atesorás?
Me encantan los pendientes, y algunos de mis favoritos son de cuando mi madre tenía mi edad, incluso menos. Incluso unos de mis jeans favoritos fueron de ella.
12. ¿Qué actriz podría protagonizar la serie sobre tu vida?
Florence Pugh. Ni en broma me veo así pero soñar es hermoso.
13. ¿Cuál es tu deporte favorito?
Fútbol, y fue el único que no practiqué.
14. ¿Cuándo fue la última vez que pediste un autógrafo?
Con 15 años al cantautor Andrés Suárez. Años después me invitó a cantar con él. Debería recordarlo más a menudo cuando me vengo abajo.
15. ¿Cuál fue tu primer recital?
Canté en la graduación del instituto con una de mis mejores amigas. ¿Quién da más?
16. ¿En qué creés?
En el cambio, la evolución, el perdonar, sobre todo a uno mismo… he sido la mayor piedra de todo mi camino. Ahora creo que la motivación es una elección, del mismo modo que vivir en modo víctima también lo es. Siempre voy a tener mis demonios al costado pero yo elijo a quién escuchar y qué ver.
Unas veces somos verdugos, otras salvadores, otras nada… todo cambia constantemente: nada es terriblemente importante, pero tampoco absolutamente banal, y que coexista esa dualidad siendo opuesta me parece precioso.
Creo en vivir lo más armoniosamente que se pueda, y en luchar constantemente por estar presente, con nosotros, el resto y el mundo. Ahora respondiendo esto soy una, cuando lea la nota soy otra y mañana quién sabe.
