El poder transformador de la música y la fuerza de las experiencias personales se entrelazan en la historia de Yadam, un artista venezolano que con 24 años ha atravesado continentes en búsqueda de una nueva vida acompañado de la música. A través de su estilo, que él mismo define como “pop alternativo”, Yadam teje sus memorias y emociones en cada verso, haciendo de la música un refugio y su herramienta predilecta para enfrentar cada obstáculo de la vida.
Yadam creció rodeado de música. En su familia algunos cantaban, otros componían, pero nunca lo consideraron una profesión. A los cuatro años, se mudó a Estados Unidos, pero su camino no fue una línea recta. A los 14, fue deportado y regresó a Venezuela en un momento en que el país enfrentaba desafíos políticos y sociales significativos. Sin embargo, a los 18 años, se le presentó la oportunidad de viajar a París tras salir victorioso en un concurso de canto.
“La música llegó a mi vida un poco de sorpresa”, recuerda. “Yo llegué a Europa buscando una mejor vida, pero resulta que esa mejor vida la encontré en la música”. El destino supo hacer sus jugadas y el cantautor hizo de la música su herramienta para poder quedarse legalmente en el continente. En un nuevo concurso, al estilo American Idol, Yadam llegó hasta los finalistas, suponiendo su primer acercamiento con un público, como también la posibilidad de agilizar los procesos legales para su estadía. “Para mí fue el inicio de toda una nueva vida de inmigrante”.
Mientras se acoplaba al idioma y se formaba como músico, Yadam aún tenía un gran asunto pendiente: su orientación sexual. Ser parte de la comunidad LGBTIQ+ representa un viaje de autodescubrimiento para muchos, llena de interrogantes, reflexiones y transformaciones. No solo se explora la forma en que te relacionas con el mundo, sino que también se descubren y se abrazan las múltiples facetas de la propia identidad. Para Yadam, este proceso fue un despertar profundo que lo llevó a aceptarse y valorarse en su totalidad, incluso frente a su familia, quienes a menudo rechazaban esta idea.
Así es como a través de canciones se traducen sus pensamientos, y cada palabra y melodía fueron impulsadas por experiencias personales y emociones genuinas, sobre todo como artista queer. “No quiero ser militante, pero si mantenemos estas conversaciones, podremos avanzar”. Explica. “Por eso el tema de ser una ‘voz’ es tan especial. Quiero que las personas que me escuchen conecten a través de mis experiencias y mi música”.
Yadam ha hecho un gran esfuerzo por encontrar su estilo musical, ya que su enfoque siempre fue ser auténtico y no simplemente crear música genérica para lograr el éxito comercial. En una mezcla de géneros y diferentes fuentes de inspiración, el venezolano aterrizó en un sonido alternativo pop latino, casi como un reflejo de su diversidad personal. “Creo que hoy tengo una voz pop y estoy cantando algo muy pop, pero siempre estoy abierto a explorar. Creo que más allá de que mi música cuente historias, también es una muestra de mi evolución”.
El primer EP de Yadam, titulado Safe Place, fue lanzado durante la pandemia y exploró temas de desamor siendo esta la primera muestra de su trabajo. En particular, la canción ‘Nada es seguro’ se convirtió en un punto de inflexión para el venezolano, pues el tema se hizo un camino hasta la disquera norteamericana Nacional Records. Así fue como en 2021 el sello acogió al intérprete para empezar a trabajar en su primer álbum de estudio Belamor.
Su proyecto debut llegará en septiembre y estará colmado de canciones que cuentan un nuevo capítulo de la vida de Yadam. Así lo escuchamos con ‘Beso’, el segundo sencillo que adelanta la entrega. “No es un álbum lineal. Es más como una playlist de todas las emociones y estilos que pasan en mi cabeza y que siento que yo escucharía”, señala. “Lo hice de una manera en la que cuando la escuchas, cada vez que pases de canción, quizás no sea siempre del mismo género, pero hay un ‘mood’, una intención general”.
Para Yadam, la composición es un proceso espontáneo y visceral. Las palabras son sus “triggers” emocionales, pequeñas llaves que abren las puertas de los recuerdos y las emociones pasadas. “La inspiración puede llegar en cualquier momento”, resalta. Pero a pesar de las grandes ideas, estar en sintonía con sus emociones cuando se sienta a escribir, es el factor fundamental de cualquier canción para no ser descartada.
A pesar de ser un artista emergente, ya ha colaborado con intérpretes como Zoe Gotusso e incluso ha recibido el apoyo y asesoramiento del productor Sam Dixon, quien ha trabajado con grandes nombres de la industria como Adele y Christina Aguilera. “Es increíble estar rodeado de personas que hace dos o tres años yo veía de lejos”, señala, mientras enumera a cantantes como Tokischa, Arca, Danny Ocean, James Blake y Sam Smith como parte de su lista de colaboraciones soñada.
Pero esto es apenas el comienzo y sus primeros pasos. Con su hashtag #CryingInSpanish, define la esencia de su proyecto, permeando todos los aspectos de su trabajo, mientras conecta con todos aquellos que entienden y se identifican con su arte. Por lo pronto, Yadam sigue escribiendo con una mano en el corazón para recordarnos, una vez más, que solo “se vale vivir a través de los sentimientos”.
