El caso Vitalogic saltó a la luz pública con fuerza desde que Rodolfo Hernández ocupaba la candidatura a la presidencia en 2022. En ese momento, Hernández aseguraba que la Fiscalía no tenía pruebas y que todo se trataba de una forma de desacreditar su carrera rumbo a la Casa de Nariño. Ahora, el juez décimo penal del Circuito penal de Bucaramanga determinó lo contrario.
Y es curioso este caso porque de las pocas propuestas que se entendían del candidato que llegó a la segunda vuelta en las elecciones, la lucha contra la corrupción era su mayor bandera. De hecho, diversos sectores y políticos se subieron a lo que popularmente se llamó “la Rodolfoneta” aduciendo coincidencias con esta postura. Sergio Fajardo, Enrique Peñalosa, María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, entre otros, alegaron sentirse convocados por las banderas de la austeridad en el gasto público y la lucha contra la corrupción que esa candidatura promulgaba. Esto, a pesar de que desde 2018 Hernández tenía abierto el proceso por delitos contra la administración pública y era ampliamente conocido que la Fiscalía, la Contraloría y la Procuraduría le seguían la pista por irregularidades en la contratación.
Dentro del proceso conocido como Vitalogic, por el nombre que tenía la Unión Temporal para el manejo de residuos en Bucaramanga, la Fiscalía ya había imputado cargos a otras cinco personas por falsedad en documento privado, contratos sin requisitos legales e interés en la celebración indebida de contratos. Con los avances centrados en Hernández, se mostró que él influyó, circuló información privilegiada y favoreció a la empresa que tenía interés en ser escogida como contratista por la Empresa de Aseo de Bucaramanga. Dicha empresa tenía una relación probada con su hijo, Luis Carlos Hernández Oliveros.
Con el reciente pronunciamiento judicial, la Fiscalía ha mostrado que gracias a la “contundencia del material probatorio” de sus investigaciones, Rodolfo Hernández fue hallado responsable por el “delito de interés indebido a la celebración de contratos, en calidad de autor”, no solo como participante.
En junio de este año se conocerá la condena que recibirá Hernández, pero dada la avanzada edad (79 años) y sus problemas de salud,lo más probable es que no sea privado de la libertad.
