Risas y psicoanálisis con Max Burkholder y Ted

Seth MacFarlane, conocido por ser el creador de la exitosa serie de animación Padre de Familia (Family Guy) y por su trabajo en otras divertidas e irreverentes producciones como American Dad y The Orville (esa estupenda sátira y homenaje a Viaje a las estrellas), marcó su debut como director de largometrajes con el pie derecho gracias a Ted (2012),

La premisa principal de Ted gira en torno a la amistad entre un hombre llamado John Bennett, interpretado por Mark Wahlberg, y su osito de peluche parlante, Ted, cuya voz es proporcionada por el propio Seth MacFarlane. La particularidad de Ted es que, a diferencia de los juguetes comunes, ha cobrado vida gracias a un deseo infantil hecho realidad y ha crecido junto a John hasta convertirse en un compañero adulto, aunque conserva su personalidad irreverente y bromista.

La trama de Ted y su secuela del 2015, se centra en las aventuras y desventuras de John y Ted, que incluyen situaciones cómicas, extravagantes y a menudo inapropiadas. A lo largo de la historia, Ted enfrenta desafíos típicos de un ser humano, como buscar un empleo, lidiar con relaciones amorosas y enfrentarse a la ley, lo que da lugar a situaciones hilarantes y absurdas.

Ahora llega a la televisión una serie que nos cuenta sobre la juventud de Bennett con su juguete y amigo y donde Max Burkholder reemplaza a Mark Wahlberg como la versión retorcida y políticamente incorrecta de Christopher Robin, el amigo humano de Winnie The Pooh. Estuvimos conversando con Burkholder acerca de su amistad con el osito irresponsable. 

ROLLING STONE: Hola, ¿cómo va todo?

MAX BURKHOLDER: Todo va bien, gracias.

RS: Vamos a ponernos serios por un momento. En psicoanálisis, está el concepto del objeto transicional, ese objeto como una manta o un juguete que en la infancia nos daba tranquilidad y paz, pero que para algunos adultos es difícil dejar atrás. Yo creo que Ted es uno de los mejores ejemplos de un objeto transicional. ¿Qué piensas al respecto?

MB: ¡Cien por ciento! Yo tenía uno propio cuando era niño que todavía conservo. Él está en la otra habitación. Es un pequeño caballo negro de peluche que era tan grande como yo cuando tenía tres años y que, fiel a su nombre, me ayudó a hacer la transición cuando nos mudamos de casa cuando era pequeño y eso fue muy importante para mí, pero Ted es obviamente un ejemplo supremo de llevar a alguien desde los cinco años hasta los treinta.

RS: Bueno, creo que Ted también es una historia sobre ese amigo que la mayoría de nosotros tenemos que se niega a madurar y nos arrastra consigo. ¿Qué opinas?

MB: Sí, definitivamente. Tengo esas personas en mi vida a las que quiero mucho y sé que son malas influencias para mí, pero las mantengo cerca de todos modos porque las quiero. Sí, Jackson, ¡te estoy hablando a ti! (risas). Ese es mi amigo que me convenció hace unos años de saltar desde un acantilado y lo hice y tuve una conmoción cerebral. Sí.

RS: ¡Dios mío! OK. Te diré que amo ambas películas de Ted. Las considero como unos auténticos clásicos de comedia. ¿Puedes hablarme sobre la serie? ¿Cuál es su conexión con las películas y sobre tu personaje en el equipo?

MB: Sí, la conexión de la serie con las películas es bastante directa. Simplemente está ambientada 14 o 15 años antes de la primera película de Ted. Y el personaje… sí, él es solo un chico tonto con buen corazón, pero cuya cabeza está exactamente en el lugar equivocado. No sabe lo que está haciendo, apenas sabe lo que está sucediendo en el mundo que lo rodea. Y creo que lo que vemos en la serie, especialmente en términos de su relación con el personaje de Giorgia Whigham, que interpreta a Blaire, su prima, es, ¡oh hombre!, este chico realmente tuvo una oportunidad. Había un mundo donde tal vez las cosas podrían haber resultado un poco diferentes para él. Pero debido a la influencia de Ted y a su propia falta de voluntad para madurar, termina donde lo vemos en la primera película.

RS: Entiendo perfectamente. Quiero preguntarte algo que me causa mucha curiosidad. La serie está ambientada en los años 90, ¿cómo se siente interactuar en un entorno y con unos objetos con los que no creciste?

MB: Crecí un poco con ellos ¿sabes? No soy tan joven así lo parezca (risas) Nací en el 97. Así que hubo algunos años donde teníamos un reproductor de Laser Disc, teníamos un VCR, ya sabes. Veía películas de Disney en cintas VHS una y otra vez. Así que había algunas cosas con las que estaba familiarizado desde muy joven, pero específicamente el VCR… Hay una escena en uno de los episodios posteriores donde tengo que poner una cinta en el VCR y en la primera toma, la puse al revés y al revés y casi rompo la cosa y todos se rieron de mí. Decían, ¿cómo puedes ser tan tonto?

RS: Imagino que hay muchas anécdotas muy graciosas para compartir sobre la realización de Ted. ¿Tienes alguna?

Max Burkholder: Sí, quiero decir, la gente en el set, ya sabes…había un montón de pequeños muñecos de Ted en el set que usarían para enmarcar una toma o cosas así. Así que, había una galería de fotos compartida entre todo el elenco y el equipo donde la gente simplemente colocaba un pequeño muñeco de Ted en posiciones comprometidas o lo golpeaban desde atrás, cosas así. Travesuras clásicas (risas).

RS: ¿Hablaste con Mark Wahlberg sobre tu personaje?

MB: No. No tuve la oportunidad. No me acerqué. Él no se acercó a mí. Principalmente solo vi las dos películas una y otra vez solo para entender el ritmo cómico. Tomé un poco de sus modales vocales, pero quería tener cuidado de no imitar al tipo, ya sabes, y asegurarme de que no estaba siendo un joven Mark Wahlberg. Estaba siendo John Bennett, un perdedor de 16 años.

RS: Pues bien, has colaborado con Seth MacFarlane en Padre de Familia, American Dad, y The Orville. Estoy muy interesado en el proceso de trabajo con él. ¿Cómo fue?

MB: Sí, te entiendo. Cuando comencé a hacer doblajes para sus cosas animadas, era muy joven. Así que no había realmente mucha relación allí. Solo entraba en la oficina, era lindo, decía mis líneas y me iba. Con The Orville fue un poco más cercano, pero eso fueron solo como dos semanas de rodaje. Estuve allí realmente solo una semana para ese episodio. Así que, ya sabes, tuve un poco de tiempo con él, pero definitivamente, esto es lo más cercano y lo más intensamente que he llegado a trabajar con él, y es increíble y salvaje verlo trabajar. Es un genio.

RS: Sí. Estamos de acuerdo. Finalmente, ¿vamos a tener referencias a Flash Gordon de nuevo?

MB: Sí, definitivamente (risas). Hay un poco de Flash Gordon en la serie, especialmente en el episodio piloto y, ya sabes, sin spoilers. Pero hay un poco también en el último episodio.

RS: Muchas gracias, Max. Espero que Ted la serie sea un éxito. Creo que así será.

MB: Muchas gracias a ti, André. Feliz de hablar contigo.