“Es una propuesta que no se ha escuchado en ninguna de las etapas de Odisseo”, dicen Juan Pablo López y Daniel León, sobre su próximo álbum, a Rolling Stone en Español. En marzo de 2022, la banda mexicana lanzó Generación Inmediata, su cuarto material discográfico, que resultó una vía de escape ante el encierro y un diálogo interno sobre cómo seguir adelante.
Bajo una estética sonora que se distingue por un enfoque contemporáneo del rock mexicano, Odisseo plasmó, además, una carta para las nuevas generaciones que desglosa su visión sobre la aceptación, el valor del tiempo y la esperanza. “A nivel musical, el Generación Inmediata nos dejó una enseñanza muy grande, sobre todo, una perspectiva más madura. Se nota que somos una banda que lleva 13 años juntos”, cuenta Daniel.
A lo largo de su trayectoria, el quinteto ha sonorizado cada disco gracias a la evolución de su esencia musical. Es, a través de nuevas interpretaciones creativas y una constante inquietud por la experimentación, que Odisseo logra romper con los límites impuestos en los géneros musicales. “El rock es nuestra parroquia; nos encanta. Nos consideramos una banda de rock, pero poco a poco estamos dejando atrás las etiquetas”, comparte Juan.
Recientemente, la banda estrenó Nada Para Siempre, un EP con el que reversionaron tres de sus clásicos con arreglos de mariachi y música vernácula. Para Odisseo, este material es un homenaje y una ofrenda para los que ya no están. Inspirados por la celebración mexicana del Día de Muertos, “Tu Tiempo”, incluida en Generación Inmediata, representa a los seres que ya no están; “Llama Gemela”, su último sencillo, encarna a nuestras almas afines; y “Los Imanes”, de Cambio Estacional, personifica al amor de nuestra vida.
“En México, le encontramos una belleza especial a la muerte; celebramos a nuestros seres queridos como si todavía estuvieran aquí. Nos conectamos a nivel espiritual con otra dimensión y es algo que, quizás, el mundo no entiende. No hacemos nada al azar, todo tiene un significado y eso fue lo que hicimos con este EP, es decir, hilar las ideas con la música.
Lo mejor de todo esto es que las personas le encontraron nuevos significados a las canciones. El mariachi le dio otro sentido a cada una de las palabras, sobre todo, en “Tu Tiempo”; creo que la canción ahora duele más. Esa era la meta, que las reinterpretaran. Al final, la música es libre y nos parece mágico que se genere un mensaje acorde a las circunstancias en las que se escucha. Por ejemplo, “Tu Tiempo” es para una persona que ya no está y, luego de tomar otros significados en este par de años, por fin se puede cantar por la razón correcta”, narran.
Nada Para Siempre marcó un parteaguas para Odisseo. Junto a Manú Jalil, productor de Mon Laferte y Flor de Toloache, la banda se adentró en las virtudes de la música mexicana y vernácula; mientras que en su último disco tomaron como referencia a Café Tacvba, Maná y Maldita Vecindad, para este EP se inspiraron en figuras como Juan Gabriel y Joan Sebastian. “Nos dejamos llevar por la experiencia de Manú y, de la mano de un mariachi, nos ayudó a trasladar el lenguaje del rock alternativo en arreglos que vistieron las canciones con una identidad propia”, revela Daniel.
Aún y con una amplia historia dentro del rock nacional, Odisseo nació gracias a las guitarras acústicas, letras tristes y las melodías del bolero mexicano. “Hay canciones que ya traen esa esencia, tal vez como “Nube Fantasma” o “La Tregua”, que cuentan con una instrumentación más sutil. Más bien, este fue nuestro acercamiento más notorio y atrevido. Vamos a seguir experimentando, quizás no de una manera tan explícita”, expone Juan.
Con esto en mente, la banda ya trabaja en su nuevo material discográfico, cuyas composiciones y arreglos se enfocan en la fusión de géneros musicales. “Abrimos los ojos en cuestiones creativas y de ejecución, a lo mejor, podríamos quitarnos un poquito la etiqueta de “rock”, para atrevernos a sumar canciones que van hacia otro lado. Daniel no me dejará mentir, pero en el nuevo disco hay un par de temas que podrían encajar con el Nada Para Siempre. Este material es valioso para nosotros, es una enseñanza y es lo nuevo que podrán escuchar este 2024”.
En este álbum continúan presentes los enfoques del amor y el desamor, la amistad, así como sus historias de vida, pues les resulta importante abrirse a nuevas temáticas que correspondan con el momento que viven como banda. “El siguiente paso es no bajar la vara que nosotros mismos pusimos, aunque sí buscamos arriesgarnos un poco más con la instrumentación. La meta de nuestro siguiente disco es que en cualquier lado que nos escuchen, se note que es una banda mexicana.
Que no exista duda sobre si somos argentinos, colombianos o peruanos. Cuando escuchen una canción del nuevo disco, sabrán que Odisseo es una banda mexicana y ese es el reto que tenemos como compositores. Aún no sabemos cómo lo vamos a conseguir, pero queremos tener ese sello. Queremos llevar la música del país hacia otros lados”, señala Daniel.
La esencia del nuevo rock mexicano
El rock mexicano se mantiene en constante transformación. Ante una escena que apuesta por la fusión de géneros, la colectividad y la experimentación sonora, Odisseo busca revitalizarla. “Hay que rescatar sus raíces y reinventarlas, pero siempre con una amplia perspectiva de lo que está sucediendo en el presente. Vivimos en un mundo de fusiones musicales y eso abre mucho el panorama para explorar las tendencias.
Podríamos decir que ese es el siguiente paso para la banda; queremos rescatar las texturas del rock mexicano y llevarlas hacia otro lado. Sería imprudente decir a dónde vamos, porque aún lo estamos descubriendo. El proceso artístico y creativo nos dará la respuesta a todo eso que tenemos en la cabeza”, explica Daniel.
Luego de su exitoso paso por el Vive Latino 2023 y de un memorable show en el Teatro Metropólitan, Odisseo mira hacia el futuro como una oportunidad para seguir trazando su camino en la música. Hoy, sus principales objetivos son sumarse a la próxima generación de headliners y resaltar sus raíces, a través de un sonido que ya los identifica por completo. “Estamos a punto de lograrlo. La música es una carrera de tiempo, no siempre vamos a ser los favoritos, pero si somos fieles y honestos, todo va a llegar en el momento indicado. Preferimos vivir todos los días con la música, en lugar de ser una estrella que rápidamente se apaga”, medita Juan.
“Y perdurar. Han sido 13 años muy buenos para Odisseo, pero queremos otros 15, mínimo. Buscamos ser una banda con una trayectoria larga y lo estamos cumpliendo. Hemos hecho discos que se acercan a la balada latinoamericana, otros más electrónicos y con muchas secuencias, e incluso, con instrumentación de orquesta. El nuevo disco tiene algo fresco, una propuesta que nunca ha sido parte de nuestra historia. Es la primera vez que tenemos tantos temas, pero vamos a elegir 10 u 11. Será un gran punto de partida para la nueva etapa de la banda”, concluye Daniel.
