Bruce Dickinson acaba de anunciar su nuevo álbum, The Mandrake Project, que significará el séptimo trabajo discográfico en su carrera como solista y el primero que publique desde 2005, año en el que presentó Tyranny Of Souls. Como es costumbre, su gran colaborador Roy Z está a cargo de la producción.
“Este álbum ha sido un recorrido muy personal para mí y me siento extremadamente orgulloso de este”, expresó el músico en un comunicado. “Roy Z y yo estuvimos planeándolo, escribiéndolo y grabándolo durante años y me emociona que la gente por fin pueda escucharlo. Y me emociona incluso más el hecho de poder salir de gira con esta banda tan increíble que hemos formado para traerlo a la realidad. (…) Y respecto a lo que es The Mandrake Project en realidad… ¡todo se revelará muy pronto!”.
El LP llegará a principios de 2024, pero mientras se conocen más detalles de este nuevo lanzamiento en solitario, repasamos algunas de las facetas que ha tenido Dickinson a lo largo de su vida.
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Cantante y compositor
Es la más obvia, pero al mismo tiempo, llegar a ser el cantante de una de las bandas de metal más importantes del mundo no es cualquier cosa. Antes de convertirse en el vocalista de Iron Maiden, Dickinson ya había pasado por otras agrupaciones como Speed –donde hizo sus primeros experimentos como compositor– y Samson. Fue en 1981 cuando tomó el puesto de Paul Di’Anno en la Doncella de Acero y dos años más tarde llegó su primer LP con el grupo, The Number of the Beast. Allí permaneció hasta 1993, cuando dio un paso al costado para enfocarse en su carrera como solista, lanzando cuatro álbumes antes de regresar a Maiden en 1999.
Cervecero
En 2013, Dickinson logró un acuerdo colaborativo entre Iron Maiden y Robinsons Brewery para lanzar la cerveza Trooper. El músico estuvo involucrado en todo el desarrollo de su sabor y la bebida ha sido tan popular que continúa vendiéndose hasta el día de hoy. “Soy un fanático de toda la vida de la cerveza inglesa tradicional; Pensé que había muerto e ido al cielo cuando nos pidieron que creáramos nuestra propia cerveza”, dijo al momento del lanzamiento.
Conferencista
Además de ser músico, Bruce Dickinson es un empresario que ha incursionado en diferentes negocios, llegando a tener éxito en la mayoría de ellos. Por esta cualidad, ha sido invitado a ofrecer conferencias alrededor del mundo en las que ha hablado sobre cómo ha mantenido el equilibrio entre su trabajo como vocalista y letrista de Iron Maiden, y sus demás proyectos personales. También ha hecho giras por diferentes países para dar charlas sobre sus libros, eventos que le han permitido tener más cercanía con sus fans fuera de la adrenalina y la música estridente.
Doctor honorario en música
En 2011, el cantante fue reconocido con el doctorado honorario en música por la Universidad Reina María de Londres, institución donde había cursado una maestría en Historia. Ocho años más tarde, la Universidad de Helsinki le otorgó otro doctorado honorario, pero esta vez en filosofía por su contribución a las artes.
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Escritor
Aunque Dickinson no es el compositor principal en Iron Maiden –en su mayoría, ese trabajo recae en Steve Harris–, sí ha contribuido a la creación de diferentes canciones para la banda. Pero más allá de su responsabilidad como letrista, desde su juventud ha tenido afinidad con la escritura narrativa. En 1990 publicó su primer libro de ficción y comedia, The Adventures of Lord Iffy Boatrace, cuya secuela llegó dos años más tarde (The Missionary Position). También, en 2015 presentó su autobiografía What Does this Button Do?
Esgrimista
Otro de sus muchos pasatiempos es la esgrima, deporte que comenzó a practicar desde su preadolescencia ya que su escuela no impartía clases de rugby o boxeo, disciplinas que le llamaban más la atención. Descubrió el florete por uno de sus maestros y quedó tan fascinado con el modo de combate que continuó entrenando hasta participar en competiciones nacionales e internacionales. Ha ganado medallas en diferentes campeonatos e incluso creó una compañía de implementos de esgrima llamada Duellist.
Guionista
Uno de los terrenos que menos ha explorado Bruce Dickinson es el cine, pero estando detrás de las cámaras. En 2008, coescribió el filme de terror Chemical Wedding inspirándose en su fascinación por el género, al igual que con la obra de Aleister Crowley. La cinta fue dirigida por Julian Doyle y su trama era una combinación entre ocultismo, horror y ciencia ficción. El proyecto era de bajo presupuesto y no fue bien recibido por la crítica ni el público, pero el músico no quedó desencantado por completo, ya que en 2022 se conocieron sus planes de trabajar en un guion para una película sobre su presentación de 1994 en Sarajevo, en medio de la Guerra de Bosnia.
Historiador
Tras terminar la escuela, Dickinson se enlistó en la Armada de Inglaterra por seis meses. En poco tiempo se dio cuenta de que ese no era el camino que deseaba tomar para su vida, de modo que inició una carrera universitaria en la Universidad Reina María de Londres. Eligió Historia, pero en el fondo se trataba de una fachada para poder dedicarse a lo que más le apasionaba: la música. Fue estando allí que comenzó a participar en bandas y pese a que descuidó sus estudios, al final logró conseguir su título de historiador.
Piloto
Después de la música, quizás la aviación es el oficio por el que más se reconoce a Bruce Dickinson. Obtuvo su licencia para pilotar avión comercial en los 90 y por años fue el encargado de conducir el famoso Boeing 747 que bautizaron de cariño ‘Ed Force One’. En 2022 tuvo que decirle adiós a la profesión tras acercarse a los 65 años, la edad de jubilación de los pilotos comerciales.
