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Gobierno de EE.UU. admite que no piensa que todos los OVNIS son hechos por el humano 

En un documento oficial, el Departamento de Defensa advirtió que las “amenazas” de este tipo van en aumento

Por  ROLLING STONE

agosto 30, 2022

Departamento de Defensa de los Estados Unidos

2020 fue un año angustiante y peculiar a la vez pues con una pandemia latente, las teorías de conspiración llegaron a su máximo esplendor. Crédulos se convencieron de que era el inicio del fin del mundo, preocupación que solo empeoró una vez el Departamento de Defensa de los Estados Unidos (DoD) reconoció como suyos algunos videos de objetos voladores no identificados.

Todo inició cuando entre 2017 y 2018 se filtró una serie de clips de la Armada estadounidense en donde se veían objetos desconocidos en el cielo que, según pilotos que han sido testigos de los avistamientos, “parecen desafiar las leyes de la física”. Dos años más tarde, la agencia del Gobierno se atribuyó tres de ellos pero en ningún momento explicó cuál podría ser el origen de los avistamientos.

“La Armada ha confirmado que los tres videos que se han difundido ampliamente son, en efecto, grabaciones hechas por pilotos del organismo”, explicó Susan Gough, portavoz del Pentágono. “La Armada siempre ha considerado los fenómenos observados en aquellos videos como no identificados”.

Gracias a la presión del Gobierno de Donald Trump, ciudadanos e incluso la organización de Tom DeLonge, To The Stars, el Pentágono publicó en 2021 un reporte sobre los Fenómenos Aéreos No Identificados (UAP por sus siglas en inglés). Allí, se detallaron 143 avistamientos que no pudieron ser explicados por la Fuerza Especial encargada de su estudio (UAPTF), pero que podrían clasificarse dentro de cinco categorías: restos aéreos, fenómenos atmosféricos naturales, programas de desarrollo del Gobierno, sistemas de adversarios extranjeros y “otros”.

A causa de las incógnitas que han sembrado las investigaciones y este tipo de “amenazas que crecen exponencialmente”, este año el DoD se propuso abrir un departamento para estudiar OVNIS llamado All-domain Anomaly Resolution Office. El AARO se encargará de examinar objetos “transmedio”, es decir, aquellos que transitan entre el aire, el espacio y bajo el agua sin explicación alguna. El problema aquí es que los resultados de los estudios que se adelanten podrían tardar meses y años.

Aun así, un anexo de la Ley de Autorización de Inteligencia para el Año Fiscal 2023 – que establece el presupuesto para las agencias de inteligencia de EE.UU.– da un abrebocas de los posibles hallazgos. En el documento, firmado el 20 de julio y conocido esta semana, se entiende que existe una distinción entre el origen “humano” o “no humano” de los OVNIS: “Los objetos temporales no atribuidos o aquellos que después de analizados hayan sido reconocidos como fabricados por el hombre, pasarán a las oficinas correspondientes y no deberán ser catalogados como fenómenos aeroespaciales o marinos no identificados”.

El artículo es poco específico pero establece que, a la hora de estudiar la naturaleza de los objetos, existe la posibilidad de que esta no sea humana. Otro punto importante es que los OVNIS –llamados UFO por sus siglas en inglés– ya no serán denominados por el Pentágono como UAP, sino como “fenómenos aeroespaciales o marinos no identificados”. Aunque sea corto, este versículo puede prestarse para diferentes interpretaciones y no se ahonda en cuáles son las demás clasificaciones que podrían existir.

Marik von Rennenkampff, un exfuncionario del DoD durante el gobierno Obama, sugirió que esta diferenciación no se pudo haber hecho “sin evidencia convincente”. “Este notable cambio en las actitudes respecto a los OVNIS está cultivando una conversación más amplia y sustanciosa sobre el fenómeno”, escribió en su columna en el diario The Hill.

“Esto implica que miembros del Comité Selecto del Senado sobre Inteligencia creen (de forma unánime y bipartidista) que algunos ovnis tienen orígenes no humanos”, continuó. “Después de todo, ¿por qué el Gobierno establecería un nuevo y poderoso departamento para investigar OVNIS “no fabricados por el hombre” si no existiesen?”. 

Entes del gobierno estadounidense, tales como el Pentágono o la Nasa, siempre han sido muy cuidadosos con el tipo de información que se comparte respecto a amenazas extraterrestres, razón por la que este nuevo documento aviva la discusión eterna sobre la existencia de vida inteligente fuera de la Tierra. ¿Want to believe?