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El renacer de Skid Row

Rachel Bolan, bajista y miembro fundador, habla sobre el álbum más reciente de la banda, la llegada del vocalista Erik Grönwall y la habilidad de sobreponerse a los cambios

Por  MELISA PARADA BORDA

enero 13, 2023

Chuck Arlund

Seis vocalistas han pasado por Skid Row a lo largo de sus casi 36 años de existencia, una cifra que parece chica pero si se tiene en cuenta que el cambio de cantante es de las decisiones más arriesgadas que una agrupación puede tomar, desde luego es un número considerable. El proceso ha sido una prueba y error constante, llegando a tener más éxito con unos que con otros, pero finalmente la banda de Rachel Bolan y Dave ‘The Snake’ Sabo parece haber encontrado la pieza que encajaba: Erik Grönwall.

“Su voz era perfecta para estas canciones que habíamos escrito y es perfecto para nosotros desde cualquier punto de vista: su energía, su talento y su rango de voz que se ajusta a las notas que hacemos”, comenta Bolan con un cuadro de David Bowie en su era de Ziggy Stardust al fondo. Antes de recibir el llamado y durante 10 años, el músico de 35 años hizo parte de H.E.A.T., un grupo sueco de hard rock que acompañó a Skid Row en una gira hace un par de años. Tras escucharlo por primera vez en un clip promocional y luego en vivo, el bajista pensó, “Este tipo tiene muy buena voz”, pero en ese entonces en su mente solo estaba la posibilidad de hacer un proyecto secundario.

Ya fuese por azar o por destino, Grönwall hizo una interpretación de ‘18 and life’ para su audición en Swedish Idol en 2009 –edición que ganó–, canción que en 2021 grabaría en mejor calidad para su canal de YouTube. Sin saberlo, aquel video sería su pase de entrada a la agrupación que concibió originalmente el tema en 1989. “Erik fue nuestra primera opción y cuando vimos su versión, realmente nos hizo pensar, ‘Este podría ser el elegido con quien nos gustaría hacer nuestra música’”, recuerda Bolan.

Cuando Skid Row despidió a Sebastian Bach en 1996 por un desacuerdo con sus compañeros –Bach había aceptado ser el acto de apertura de la gira de reunión de Kiss ese mismo año, pero el resto del grupo se negó a tocar al considerar que eran más grandes que un telonero–, se pensó que ese podría ser su fin. Luego de reformarse tres años más tarde, esta vez con el difunto Johnny Solinger en la voz y unos cambios más en la batería, la banda publicaría los LPs Thickskin (2003) y Revolutions Per Minute (2006), así como los dos EPs United World Rebellion.

Revolutions Per Minute fue un disco muy experimental. Lo sacamos de nuestro sistema, entonces no creo que volvamos a hacer uno así pero fue divertido”, cuenta entre risas, destacando que a pesar de sentirse orgulloso de los cuatro trabajos, ha considerado la posibilidad de volver a grabar algunos cortes. “Los EPs también fueron divertidos porque solo fueron unas cuantas canciones, no tuvimos que dedicarles tanto tiempo y creo que hay algunas joyas ahí”.

Una pregunta recurrente que han recibido los miembros fundadores del grupo ha sido sobre una posible reunión con Bach, pero aunque el cantante ha expresado en varias ocasiones su disposición de hacerlo bajo sus propios términos, lo cierto es que los músicos ya están cansados de que se les aborde con la misma inquietud. “No está ni siquiera en consideración, esto es Skid Row y esa conversación se ha mantenido por 23 años”, sostuvo ‘Snake’ en una reciente entrevista en el podcast We Go To 11. “Tampoco tengo deseos de hacerlo. Estamos felices con quienes somos ahora y con la forma en que sonamos”. Y así se pueden encontrar más declaraciones similares que, a fin de cuentas, se resumen en un deseo por dejar el pasado donde está para enfocarse en el ahora y en lo que vendrá.

El presente involucra a Grönwall y el álbum que publicaron en octubre pasado, The Gang’s All Here, que bajo la producción de Nick Raskulinecz (Foo Fighters, Evanescence) logró dar en el blanco. Con la mentalidad de hacer un disco que tuviera las mismas vibras ochenteras pero que tuviera la calidad musical actual, su sexto LP se siente como un nuevo comienzo, tanto así que probablemente se trate de su mejor lanzamiento musical desde los 90. Pero el camino que tuvieron que recorrer para llegar hasta este punto fue como andar por una carretera sin pavimentar.

Fue en 2017 cuando el álbum comenzó a gestarse y el cantante ZP Theart aún estaba en sus filas. Las diferencias horarias y las distancias entre los músicos hicieron que las sesiones de composición fueran difíciles de coordinar, de todas formas, se las arreglaron para escribir unos cuantos pares de temas. No obstante, al momento de entrar en el estudio de grabación, la banda cambió de disquera, de representación, de agencia de booking y hasta de vocalista. “No tenemos resentimientos, pero llegó el punto en el que notamos que no íbamos a progresar juntos”, explica el bajista sobre la salida de Theart. “Las diferencias creativas se interpusieron en el camino así que decidimos que lo mejor era despedirnos”.

En este punto, Bolan, Snake y Scotti Hill ya son unos veteranos en el cambio y ya han hecho las paces con las decisiones que han tomado, pues entre el acierto y el desatino, en últimas son las que los han dirigido hasta este punto en el que se sienten completamente a gusto. “En esta banda no hay deseos de rendirse, no encanta crear música, nos encanta tocarla en vivo”, enfatiza Bolan, que segundos antes defendió los cambios en la alineación argumentando lo que se hubiera perdido si hubiese dejado de escuchar Black Sabbath sin Ozzy Osbourne, AC/DC sin Bon Scott o Deep Purple sin Ian Gillan.

A fin de cuentas, lo verdaderamente importante es lo que está sucediendo en el momento, y el tiempo que The Gang’s All Here se tardó en llegar parece haber sido el ideal. “Mi madre siempre dice, ‘Todo pasa por alguna razón’. Si pasa es porque así tenía que ser y sino, también”, expresa. Eso sí, sostiene que no le gustaría que su siguiente material discográfico tarde tanto como es costumbre.

Los vientos están soplando a favor de Skid Row que, con Grönwall en el micrófono, pasó un 2022 repleto de conciertos en donde la respuesta del público ante su nuevo vocalista y álbum ha sido positiva. “Nunca nos rendimos ante la adversidad y nunca nos retiramos de la batalla porque hemos enfrentado las cosas que han intentado abatirnos”, afirma sin un atisbo de duda en su respuesta, pero con el anhelo de que el momentum se mantenga.

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