El leopardo de las nieves es el nombre de dos bellos libros. Uno de ellos fue escrito por Sylvain Tesson, geógrafo, periodista y escritor de viajes, que narra su encuentro en la gélida y apartada región de Changtang en el Tíbet, con el felino del título. El segundo libro fue escrito por el fotógrafo y documentalista Vincent Munier, donde describe y reflexiona sobre el mismo viaje que hizo en compañía de Tesson.
Ahora, los dos libros se convierten en una conmovedora película que utiliza al leopardo de las nieves (también conocido como irbis o panthera uncia), un animal mágico, elusivo y misterioso, para hablarnos sobre el arte de la paciencia y la promesa de lo invisible.
Junto a Tesson y Munier, se unieron al equipo de exploradores Marie Amiguet, directora de la cinta y la encargada de la fotografía del fascinante documental El valle de los lobos, dirigido por Jean-Michel Bettrand; así como el asistente de dirección Léo-Pol Jacquot. Los cuatro recorrieron por dos períodos de tres semanas, las mesetas del este del Tíbet, ubicadas a una altura que oscila entre los 4500 y 6000 metros sobre el nivel del mar, para encontrar al felino del que se sabe muy poco y se calcula que pertenece a una población de más o menos 4000 animales.
La belleza del paisaje natural y de la fauna de esta región fotografiada magistralmente por Munier y Amiguet, se engrandece gracias a la música de Warren Ellis y Nick Cave, quienes usan la poesía de Tesson como la letra de algunas de las piezas musicales incluidas en el documental.
Uno de los momentos más significativos de El leopardo de las nieves consiste en el encuentro de los realizadores con un grupo de alegres niños tibetanos que quieren aprender sobre lo que están haciendo estos extranjeros en su tierra, pero que, al mismo tiempo, les enseñan lo que significa vivir en pleno contacto con la naturaleza.
Con el perdón de aquellos que odian los spoilers, hay que decir que el grupo al final encuentra al leopardo, el cual está golpeado por la vida, pero cuyo pelaje y enorme cola con la que se protege del frío, siguen manteniendo su belleza natural. En estos tiempos de postpandemia, en los que gradualmente estamos comenzando a salir de nuestro encierro, El leopardo de las nieves es una cinta que llega a impactar de una manera profunda, haciéndonos conscientes de la necesidad de vivir a otro ritmo y de disfrutar los placeres de este mundo tan mágico, misterioso y elusivo como el felino buscado y encontrado por este romántico grupo de amantes de la naturaleza.
