El actor Cillian Murphy reveló recientemente un intrigante aspecto de su relación laboral con Christopher Nolan, con quien ha trabajado en múltiples proyectos como El Origen, Dunkerque y, el más reciente, Oppenheimer. En una nueva entrevista con GQ, Murphy detalló el singular método con el Nolan entrega en secreto los guiones de sus películas.
Tras haber trabajado juntos en seis películas, Murphy compartió sus impresiones luego de haber convivido lo suficiente con el cineasta. El actor reveló que los guiones de Nolan suelen entregarse en mano, a través de miembros de su familia como su madre o su hermano. Esta práctica, según Murphy, tiene un doble propósito: preservar la confidencialidad de la historia antes de su lanzamiento y honrar una larga tradición dentro del proceso cinematográfico de Nolan.
“Siempre lo han hecho así, ¿por qué dejar de hacerlo ahora? Es un ritual que aprecio mucho. Me viene bien”, señaló.
Sin embargo, el actor comentó que Nolan hizo una excepción con su más reciente entrega, Oppenheimer. Para este proyecto, el director voló personalmente a Dublín, Irlanda, para entregar el guión en mano al propio Murphy. “Ya me había llamado y me había dicho que quería que interpretara el papel. Y yo le había dicho que sí, porque siempre le digo que sí”, declaró el actor.
Murphy también relató cómo Nolan le dejó solo en una habitación de hotel en Dublín para que leyera dicho guión de principio a fin. “No tiene teléfono ni nada. Pero supo instintivamente cuándo volver”, comentó el actor de Peaky Blinders.
Aparentemente Nolan tiene una manera de trabajar bastante peculiar, más allá de su ritual con los guiones. Durante los rodajes del director, el plató, en palabras de Murphy, se convierte en un “laboratorio privado e íntimo” en donde “no hay sillas”, porque Nolan “nunca se sienta”.
“Aunque [Nolan] trabaja a un ritmo tremendo, siempre hay lugar para la curiosidad y para descubrir cosas, y en eso debería consistir hacer arte, ¿sabes? No hay teléfonos, pero tampoco anuncios: todo el mundo lo sabe”
Oppenheimer fue todo un fenómeno en 2023. La sexta colaboración de Murphy y Nolan recibió 13 nominaciones a los Oscar y obtuvo una buena recepción de la crítica, además de lograr un gran éxito en las taquillas.
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