Seis asociaciones culturales españolas se han unido para pedirle al Gobierno y al Parlamento Europeo que adopten medidas legislativas y administrativas que minimicen los riesgos de la IA en las industrias creativas. En un manifiesto publicado esta semana se exponen preocupaciones por los vacíos legales de la Directiva (UE) 2019/790, los cuales deberían ser estudiados tras la entrada en vigencia del Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial.
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Allí se hace énfasis en las excepciones de dicha directiva emitida en 2019 –año en el que todavía no había estallado el boom de estas tecnologías– relativas a la minería de textos y datos. De acuerdo con las organizaciones, las empresas que entrenan y utilizan modelos de IA generativa se amparan en tales puntos para justificar sus acciones que, de forma directa o indirecta, perjudican la propiedad intelectual. “Estas excepciones no se crearon para que sirvieran para la extracción y uso ilegal e indiscriminado de obras sin autorización para el entrenamiento de los modelos de IA”, aseveran.
Advierten, además, que “un grave fallo en el juego de articulación creado entre la Directiva (UE) 2019/790 y el Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial” también estaría teniendo efectos dañinos en la comunidad académica. Según explican, entes de investigación pueden realizar minería de textos y datos sin solicitar autorización de los autores si el material es adquirido de forma lícita, por ejemplo, a través de documentos de acceso público, y si es utilizado con fines de “investigación científica”. No obstante, esta excepción estaría siendo aprovechada para entrenar modelos de IA con la información de dichos proyectos investigativos.
“Esto tiene como consecuencia que las empresas del sector privado se pueden aprovechar de modelos de inteligencia artificial desarrollados bajo este marco y estén entendiendo que no deben solicitar ninguna autorización ni cesión de derechos ni deben remunerar a sus autores, a pesar de la explotación comercial que realizan de ellos, porque los modelos fueron entrenados con obras en el ámbito de la investigación científica”, señalan.
Frente a tales preocupaciones, las asociaciones han solicitado al Gobierno y al Parlamento que se aprueben medidas respecto a la regulación de la Inteligencia Artificial generativa tomando a consideración una serie de principios: poner al ser humano y sus derechos como centro, proteger la libertad de expresión y el trabajo digno de las personas de la industria, y respetar los derechos de autor y de propiedad intelectual.
El manifiesto fue firmado y emitido por la Alianza Audiovisual, ACE Traductores, la Asociación de Directores de Escena de España, la Federación de Asociaciones de Ilustradores/as de España, la Federación Estatal de Asociaciones de Compañías y Empresas Profesionales de Danza, y la Unión de Correctores. También se han adherido la Asociación Colegial de Escritores, la Asociación de Autores/as Profesionales del Cómic y la Federación de Asociaciones de Guionistas Audiovisuales.
