9 claves de Catch a Fire, el disco de Bob Marley and The Wailers que encendió la llama

El quinto álbum de las leyendas jamaiquinas no es el que tiene más hits, pero sí el que inició su gran proyección internacional

Por  DANIEL FLORES

noviembre 20, 2023

Gentileza Universal

No es el disco de Bob Marley con más hits, pero sí el que marcó el inicio de su gran proyección internacional, a partir del nuevo vínculo con Island Records, el sello británico del empresario y productor jamaiquino Chris Blackwell. Catch a Fire, quinto trabajo en estudio de The Wailers, a partir de ahora relanzados como Bob Marley and The Wailers, se grabó en 1972 y se lanzó en 1973, es decir hace medio siglo. Hasta entonces, la música jamaiquina que llegaba a Londres y, desde allí, al resto del mundo (la Argentina, incluida), lo hacía como un producto popular, pero ciertamente exótico, algo así como world music. Catch a Fire, en cambio, se mezcló, marketeó y distribuyó con los protocolos del mercado del rock propio de los años setenta, lo que le valió otro tipo de repercusión entre el público y la crítica. Por otra parte, el nuevo protagonismo de Bob Marley precipitó las tensiones internas con los otros dos miembros del trío local que originalmente completaban Peter Tosh y Bunny Wailer.

1. Chris Blackwell 

El jamaiquino blanco Chris Blackwell hacía tiempo que quería a los Wailers en su sello, Island Records. Encontró la oportunidad en 1972, cuando la banda acababa de girar por el Reino Unido y no tenía dinero para regresar a Kingston. El productor les ofreció ayuda en concepto de adelanto por un próximo disco, que sería Catch a Fire.

2. Hombre de familia

De vuelta en Jamaica, los Wailers grabaron los tracks de su quinto LP. En esas sesiones fue clave el bajista Aston “Family Man” Barrett. “Era un genio para sacarles partido a cachivaches que cualquiera hubiera tirado a la basura”, recuerda Bunny Wailer, vocalista junto a Marley y Peter Tosh, en Tanto que contar, la gran biografía de Bob por Roger Steffens.

3. Arte original

La primera edición de Catch a Fire es un hito del diseño discográfico: tiene la forma de un encendedor Zippo e incluso un troquelado para abrirla como ese clásico dispositivo. Sin embargo, aplicado a una portada de disco, el concepto Zippo no tuvo tan buen resultado y solía romperse, además de ser demasiado caro, así que el LP pronto se relanzó con una nueva versión.

4. La hora de Bob

La tapa-Zippo de Catch a Fire se reemplazó por una más ortodoxa, que marcaría un quiebre profundo, mucho más allá del diseño gráfico. Muestra elocuente de la estrategia marketinera de Chris Blackwell, la segunda edición trajo la novedad del agregado del nombre de Bob Marley antes de la banda y un retrato solista del músico-profeta, anticipando su proyección personal, por delante de los Wailers.

5. Bush Doctor

El creciente protagonismo de Marley hacía difícil la convivencia de un trío vocal y creativo tan poderoso como el de Bob, Peter Tosh y Bunny Wailer. La sociedad se disolvería pronto (después del siguiente disco), pero, entre las siete canciones de Marley, Tosh alcanzaría a registrar en Catch a Fire dos de sus mejores tracks: “400 Years” y “Stop that Train”. Grabaría su debut solista en 1976 y moriría asesinado en 1987, en Jamaica.

6. “Stir It Up”

Catch a Fire no es el título con más hits en la discografía de Bob Marley. Es más bien una obra despojada, austera y por momentos exploratoria. Contiene, sin embargo, el luminoso “Stir It Up”, uno de los clásicos de los Wailers, el único de los nueve tracks de este LP que se recuperaría para Legend, el compilado que Island Records lanzaría en 1984 y que se convertiría en el disco de reggae más vendido de la historia y en un emblema de la popularidad de Marley en todo el mundo.

7. “Slave Driver”

Al margen de títulos más ligeros como “Stir It Up” y “Baby We’ve Got a Date”, Catch a Fire es un disco denso y cargado de la tensión social de esos días (y décadas) en Jamaica. “Slave Driver” contextualiza esa situación remontándose al pasado esclavista de la colonia británica. “Recuerdo cómo nos torturaban el alma en los barcos de esclavos. Hoy dicen que somos libres, pero nos encadenan a la pobreza”, canta Bob.

8. Trenchtown Reggae

Otro track significativo en el quinto disco de The Wailers es “Concrete Jungle”, donde Marley contrasta de algún modo sus raíces de country bwoy, en la aldea rural de Nine Mile, con “la jungla de concreto, donde la vida es más dura”, es decir la barriada de viviendas sociales en la que se había reubicado de niño en Trenchtown, Kingston. Tanto la casa natal como el government house de la capital hoy se pueden visitar.

9. Todas las voces

La formación de The Wailers en Catch a Fire es un all-stars jamaiquino. Junto al mencionado trío vocal, incluye a Aston y Carlton Barrett, en bajo y batería, e invitados como Tommy McCook (The Skatalites) en flauta y Robbie Shakespeare, en bajo. También, en coros, dos de las grandes voces femeninas de la isla: Rita Marley (pareja de Bob, en la foto) y Marcia Griffiths. Con Judy Mowatt, completarían las I-Threes.

Reescuchando Catch a Fire: el disco clave de Bob Marley and The Wailers

A modo de celebración de los 50 años de esta obra cumbre del reggae Discos Esenciales, el podcast de Rolling Stone, convocó a Néstor Ramljak, de Nonpalidece, para reescuchar Catch a Fire y entender por qué es uno de los discos más importantes de la música contemporáne.