Wimbledon inició en 1877 y es el torneo más antiguo e icónico del tenis. El certamen dura dos semanas y es el único de su categoría que se disputa en césped natural. Además de las rigurosas reglas que envuelven cada aspecto del torneo (cada umpire tiene un libro de más de 30 páginas de reglamento), como la de solo usar prendas de vestir de color blanco, el riguroso podado de césped y el extenso entrenamiento que llevan los recogepelotas, el torneo tiene algunas otras curiosidades. Aquí te contamos algunas de ellas.
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Rufus el halcón
Wimbledon tiene a su propio halcón, de nombre Rufus, que se encarga de mantener alejadas a las palomas y otros animales. Rufus tiene su propia cuenta de Twitter que lo muestra haciendo su trabajo en las canchas.
Swooping into the weekend like ?♀️ pic.twitter.com/acZZ6S9VXV
— Rufus The Hawk (@RufusTheHawk) July 8, 2023
Todo un banquete
Wimbledon es toda una operación de catering. Al día se sirven más de 230,000 comidas y 330,000 tazas de café y té. El torneo tiene muchas tradiciones, como la de las fresas, la sangría o la cola. De fresas con crema se sirven 140,000 porciones al día. No podía faltar la champaña, de la cual se consumen casi 30,000 botellas en un día.
Los partidos pueden ser eternos
En 2010 se llevó a cabo el partido más largo del torneo. Lo disputaron el estadounidense John Isner y el francés Nicolas Mahut y duró 11 horas con 6 minutos y 23 segundos. El partido inició el 22 de junio y terminó el 24. En solo un set ha llegado a haber más de 130 juegos y más de 180 en un partido.
El laberinto
Mientras el público disfruta de los partidos, más de 1800 trabajadores pasan por debajo de ellos en el enorme sistema de túneles que existe en las instalaciones desde 1997. Hay muchos cuartos subterráneos conectados por estos túneles, desde salas de pruebas de drogas hasta vestidores. Los jugadores también utilizan estos túneles. Rafael Nadal se pegó en la cabeza en uno de ellos en 2017.
Las pelotas
Slazenger es la marca encargada de abastecer a Wimbledon desde 1902. Ellos mandan alrededor de 50,000 pelotas de tenis al torneo. Estas tienen que ser almacenadas a 20 grados en un cuarto debajo de la cancha central. Todos los días se mandan 20 paquetes de bolas a cada cancha y siempre hay alguien monitoreando por cámaras si algún encuentro necesita más. Durante los partidos, se introducen seis pelotas nuevas cada nueve juegos. En cada partido se utiliza un conjunto de pelotas diferente, nunca se repiten. Las pelotas usadas son frecuentemente vendidas a los asistentes del torneo como memorabilia.
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