El fotógrafo Markus Klinko es conocido por su trabajo en la industria de la moda y la música, donde ha dejado una huella indeleble con su estilo único y su capacidad para capturar la esencia de sus modelos. Nacido en Suiza, Klinko se trasladó a Nueva York para estudiar fotografía, y desde entonces, ha sido contratado por algunas de las marcas más reconocidas y ha trabajado con artistas de renombre como David Bowie, Lady Gaga, Jay-Z, Jennifer López, Beyoncé y muchísimos más.
Este año se cumplen 20 años de la publicación de Dangerously in Love, el álbum debut de Beyoncé como solista publicado en 2003. Markus Klinko fue el fotógrafo encargado de darle una portada al álbum que marcaría para siempre el sonido del pop de la era de los 2000.
Tras haber trabajado anteriormente con Destiny’s Child, Beyoncé quedó encantada con el trabajo del fotógrafo suizo. La artista no dudó en llamarlo para que fuera él quien la retratase para la portada del disco. El día de la sesión llegó y la madre de Beyoncé, quien en ese momento se encargaba del oficio de estilista e imagen personal de su hija, solamente llevó faldas de colores planos para que Beyoncé luciera durante la sesión. A Beyoncé no le gustó mucho la idea, ya que las faldas no combinaban bien con el top de diamantes que estaba utilizando (Cher lo había usado anteriormente en forma de pantalón). El fotógrafo Markus Klinko sugirió que se utilizara una prenda de jean en vez de las faldas pero la madre de Beyoncé no había traído un pantalón de ese estilo. Así que el fotógrafo se quitó sus pantalones y se los dio a Beyoncé para que los probara. A la artista le quedaron y le gustó mucho la forma en que contrastaban las texturas. La foto se tomó y el resto es historia.
“Me enorgullece porque la gente ha dicho que ayudé a crear el estilo de los 2000. Y puede ser verdad porque traje estas imágenes supersofisticadas con retoques digitales, muchos colores y tienen un look muy especial. Era un momento en el que quería traer una estética disco pero con elementos futuristas y digitales”, dice el fotógrafo.
Su trabajo con Destiny’s Child y Beyoncé es un ejemplo perfecto de su habilidad para crear imágenes impactantes y memorables. Durante sus sesiones de fotos, Klinko trabajó con las integrantes para crear un look y una estética que reflejara su mensaje y su música. Las imágenes resultantes son una combinación de fuerza, elegancia y sensualidad, y han sido ampliamente reconocidas como algunas de las más emblemáticas de la carrera de Destiny’s Child y Beyoncé.
Para celebrar los 20 años de la publicación del álbum y de la portada, el fotógrafo Markus Klinko estará inaugurando el próximo 4 de febrero en la ciudad de Houston, Texas, su nueva exhibición titulada Icons Klinko. La exposición que se presentará en el Nicole Longnecker Gallery ofrecerá una primera mirada digital exclusiva a una próxima colección de su trabajo más reciente, que tituló The Angel Factory, una referencia y homenaje al héroe de Klinko, Andy Warhol. Estas nuevas imágenes fueron creadas junto a Erchonia, utilizando su más reciente invento, The Emerald Laser. Un nuevo aparato que revolucionará la industria de la belleza estética con el uso de potentes láseres.
La muestra también tendrá copias del trabajo que Klinko ha capturado durante las últimas tres décadas, cuando abandonó su carrera como arpista profesional por otra aún más exigente. Se exhibirán fotografías ampliamente recoocidas que tomó de David Bowie, Iman, Britney Spears, Lady Gaga, Pharrell Williams y otros.
Klinko es conocido por su estilo visualmente atractivo y vibrante que combina elementos de moda y arte. En sus sesiones de fotos, busca capturar la esencia de su sujeto y hacer que se sientan cómodos y seguros, lo que resulta en imágenes auténticas y conmovedoras. Otra de sus marcas características sucede en la etapa de postproducción donde la tecnología y la fotografía digital entran en juego. Klinko ha sido un pionero en la utilización de herramientas digitales para edición fotográfica, siendo el primero en usar herramientas como Photoshop en conjunto con su obra análoga.
Además de su trabajo con Destiny’s Child y Beyoncé, Klinko ha trabajado con una serie de otros artistas influyentes en la industria musical, incluyendo a David Bowie, Iman y Mariah Carey. Con una combinación única de habilidad técnica y una visión artística, Klinko ha sido capaz de crear una obra de arte con cada fotografía que toma, haciéndolo uno de los fotógrafos más respetados y admirados en todo el mundo.
