“Hablo por la vida, hablo por la nada/Hablo por cambiar esta, nuestra casa”, reza Fito Páez en ‘Yo vengo a ofrecer mi corazón’, una de las canciones más especiales que se ha escrito en lengua española. Ahora, a 36 años de su lanzamiento, el hit de su álbum Giros (1985) ha recibido un libro a manos del escritor Gastón García Marinozzi.
¿Quién dijo que todo está perdido? Biografía de una canción es un ensayo sobre las circunstancias que llevaron al nacimiento de este tema del músico argentino. Una historia que se teje gracias a los testimonios de otros compositores como Joan Manuel Serrat, Pablo Milanés, Eugenia León, Omara Portuondo, Liliana Herrero, Susana Baca, Sole Giménez, Wendy Guerra, Xavier Velasco y Pedro Mairal.
“Hija política de la chanson francesa, del folclore de Violeta Parra y de Mercedes Sosa, de la fuerza de Serrat, de aquella ilusión cubana, del rock de Bob Dylan o de The Beatles. También es una memoria coral de la canción y de la época”, se lee en la sinopsis del libro. Allí se extrae una cita de Serrat en la que define el himno como “parte de la banda sonora de un tiempo de ilusión y esperanza, de recuperación de sueños y libertades”.
En agosto del año pasado, Páez publicó un video en su cuenta de Instagram leyendo un fragmento de su autobiografía en el que hablaba un poco sobre ‘Yo vengo a ofrecer mi corazón’. “Había compuesto esta canción en un par de horas en el comedor que da a la calle Estomba [Buenos Aires]”, dice en el clip. “Fue una de las pocas canciones que compuse que surgieron letra y música en paralelo. Hoy ya entrado en años siento que fue un dictado. Esas palabras no correspondían con la experiencia, formaban parte de la genética humana”.
Hace unas semanas el compositor presentó Los años salvajes, el primer disco de la trilogía de álbumes en la que ha trabajado desde el inicio de la pandemia. En febrero de 2022 se lanzará la siguiente entrega, un LP instrumental grabado en compañía de la OrquestaSinfónica Nacional Checa. El tercer LP también contará con canciones inéditas, pero esta vez grabadas por Páez junto a su piano.
