El Super Bowl LVIII era un evento esperado por muchos. Amantes del fútbol americano, millennials esperando oir los éxitos de Usher en el medio tiempo y hasta swifties que se preguntaban si su artista favorita alcanzaría a llegar al partido después de sus shows en Tokio. Se puede afirmar que ninguno de estos grupos fue decepcionado la noche de ayer.
El campeonato de la Liga Nacional de Fútbol (NFL) de este año vio a los Kansas City Chiefs (campeones del año pasado) y San Francisco 49ers enfrentarse nuevamente después del Super Bowl LIV.
Los fanáticos abarrotaron el Allegiant Stadium en Las Vegas desde temprano, esperando con ansias la patada inicial que fue a cargo de los Chiefs. Después de un primer cuarto con jugadas que demostraron que el mariscal de los 49ers, Brock Purdy, no se quebraría frente a Patrick Mahomes, ambos equipos seguían sin lograr alguna anotación —una prueba de sus fuertes defensas.
San Francisco trajo la primera anotación del partido con un nuevo récord cuando Jake Moody realizó un gol de campo de 55 yardas, el más largo en la historia del Super Bowl. Unas jugadas fallidas de los Chiefs después, la frustración era palpable y un enfurecido Travis Kelce puede ser visto lanzando un grito a su entrenador Andy Reid.
“Solo le decía lo mucho que lo quiero”, dijo un mucho más relajado Kelce tras el partido.
Las emociones y tensiones continuaron cuando, un pase horrible de Juan Jennings después, el corredor Christian McCaffrey logró poner una distancia de 10-0 en el marcador. Mahomes lideró una partida que culminó en un gol de campo al final de la primera mitad para poner el llevar el marcador a 10-3, el medio tiempo había llegado.
Vestido de blanco y rodeado por un grupo de bailarines, Usher tomó el escenario del estadio de Las Vegas y comenzó a interpretar una de sus canciones más conocidas, ‘Caught Up’. Con invitados especiales como Lil Jon, Ludacris, Alicia Keys, H.E.R., will.i.am y más, Usher repasó sus más grandes éxitos en 15 minutos llenos de coreografía sobre patines y nostalgia por el pop de los 2000s.
En el tercer cuarto, el gol de campo de 57 yardas de Harrison Butker redujo la ventaja de los 49ers a 10-6, poniendo fin al récord previamente establecido por Moody. Con esto, los Chiefs comenzaron a adelantarse gracias al descuido de sus contrincantes, entrando al último cuarto con un marcador de 13-10.
Tomando el liderazgo de nuevo, Mahomes empató el juego en 16-16 con menos de 6 minutos restantes. La atención se volcó sobre Moody cuando a 53 yardas, su gol de campo puso a su equipo en ventaja 19-16. Tras eso, Mahomes volvió a empatar el partido a tres segundos de acabar. Por segunda vez en su historia, el Super Bowl iría a tiempo extra.
Los 49ers comenzaron con el balón, pero fueron detenidos en la yarda nueve de los Chiefs. El gol de campo de Moody les dio una ventaja de 22-19, ciertamente no fue suficiente para detener a Mahomes y su pase a Hardman en la línea de gol. Los Chiefs vencen a los 49ers 25-22. Es la tercera victoria en el Super Bowl de los Chiefs en cinco años, ¿dinastía?
