Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente
Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente

Celebrando a la mujer en el cine con Amanda Kramer

En el día de la mujer, hablamos con la directora sobre esta extraña mezcla entre el cine de Kenneth Anger y The Rocky Horror Picture Show protagonizada por la recientemente nominada al Óscar Andrea Riseborough y el icono de los años ochenta y noventa, Demi Moore

Por  ANDRÉ DIDYME-DÔME

abril 11, 2023

Cortesía de MUBI

Amanda Kramer es una directora que se dio a conocer con Paris Window, un melodrama que cuenta la historia de una joven estadounidense que se muda a París para estudiar literatura y comienza una relación con un chico francés. Ladyworld, su segundo largometraje, es una cinta de terror psicológico sobre un grupo de chicas adolescentes que quedan atrapadas en una casa y en un cumpleaños eterno después de un terremoto. Ahora, Kramer cumple con el sueño de realizar un musical, cuyo título es Please Baby Please. el cual se presenta en MUBI.

En el día de la mujer, hablamos con la directora sobre esta extraña mezcla entre el cine de Kenneth Anger y The Rocky Horror Picture Show protagonizada por la recientemente nominada al Óscar Andrea Riseborough y el icono de los años ochenta y noventa, Demi Moore:

ROLLING STONE: Primero que todo quiero preguntarte: ¿Eres la misma Amanda Kramer de la agrupación Information Society?

AM ANDA KRAMER: No, no. Pero adoro a esa Amanda Kramer. Me encanta que me confundan, porque no soy muy diferente a ella.

ROLLING STONE: ¿Has tenido la oportunidad de conocerla?

AMANDA KRAMER: No, nunca. Pero me gustaría. Espero que nos encontremos algún día en la calle (risas).

ROLLING STONE: Bien. Ya despejada esa duda, quiero hacerte esta otra pregunta: ¿Cuál es tu musical favorito de todos los tiempos y por qué?

AMANDA KRAMER: ¡Oh! Realmente me encanta La tiendita del horror. Creo que es maravilloso. La versión para cine es absolutamente increíble. Creo que ese y la versión fílmica de Cabaret son mis musicales favoritos de todos los tiempos.

Siento que ambos poseen una gran atención al detalle y en cuanto a lo concerniente al cine, son películas muy singulares, en cuanto al modo en el que se asume el musical, más que simplemente ponerlo en escena.

Ambas cintas poseen un sentido visual muy rico y profundo, tanto así que uno cree que llegaron a ti desde tus sueños. Las dos películas se sienten como si fueran sueños, una más cercana a una pesadilla que otra, pero no voy a decir cuál (risas). Sí. Estas son mis favoritas. Las quiero muchísimo. 

ROLLING STONE: Pero ambos musicales son muy oscuros…

AMANDA KRAMER: Lo son. Existió una fase en los musicales estadounidenses de los años cincuenta y sesenta en el que eran muy ligeros, cursis y “pop”.  No me identifico realmente con ellos porque no poseen un drama inherente a ellos y yo necesito de esa cualidad oscura y cercana a las pesadillas. Creo que es algo que le da fuerza y contundencia al musical. Es una buena oposición.

Andrea Risenborough.
Cortesía de MUBI

ROLLING STONE: ¿Cuál es tu opinión de The Rocky Horror Picture Show?

AMANDA KRAMER: Me encanta. Solía ir a verla a cada rato. La veía cuando era más joven y sí, solía vestirme para la ocasión. Me encantaba hacerlo. Se sentía muy cool. Se sentía como algo que solo las personas cool solían hacer ¿sabes? No sé si esa tradición seguirá debido a la internet, pero había un tiempo en el que solías ir y buscar esas películas de culto y tenías que buscar estos eventos. Se sentían como algo muy especial.

Creo que tiene que ver con mis orígenes en el teatro. Amo esa idea de la energía en vivo y los momentos que viven, mueren se respiran. Me encantaba ver The Rocky Horror Picture Show en cines porque la gente cantaba y bailaba, se paraban de sus sillas y se vestían e interactuaban. Se sentía como si las cosas fueran más allá de la película misma, la cual, en últimas, es una serie de fotogramas congelados y atrapados en el celuloide.

Con esos eventos se generaba una cualidad teatral que hacía que la audiencia interactuara y se convirtiera en un público loco y salvaje en las noches. Es como si el cine y el teatro se volvieran uno solo. Es una especie de gran caos. La amo. ¡Sí!.

ROLLING STONE: Te pregunté por The Rocky Horror Picture Show porque creo que es el hijo (o la hija) de La tiendita del horror y Cabaret.

AMANDA KRAMER: ¡Sí! ¡Qué buen punto! Es una observación m uy astuta. ¡Tal vez es una especie de hijastra extraña y jodida!

ROLLING STONE: Y quizás tu película es la nieta…

AMANDA KRAMER: ¡Sí! Gracias. Bueno, sería lo mejor si eso fuera verdad. Si todas estas películas pertenecieran a un mismo árbol familiar. Me sentiría muy, muy, muy afortunada. 

ROLLING STONE: Creo que es verdad.

AMANDA KRAMER: ¡Cool! Gracias.

ROLLING STONE: Martin Scorsese dijo una vez que el no sabía nada sobre las mujeres, pero que quería aprender. ¿Puedes decirme con tus propias palabras qué y quién es una mujer?

AMANDA KRAMER: Bueno, ¿sabes? Creo que personalmente, y debido al rumbo que está tomando esta conversación, podría decirte que tiene que ver con partes del cuerpo o apariencia y presentación. Lo que sé es que yo soy una mujer y siento eso con mucha fuerza. Creo que a menudo no uso maquillaje y algunas veces mi cabello es largo, otras veces es corto. Y algunas veces, siento que soy más femenina, pero otras veces siento que soy más masculina.

Creo que el modo en el que las mujeres son presentadas está totalmente en flujo. Creo que es un tema completamente personal. Desde la biología, creo que la ciencia nos diría que existen hombres y mujeres, los cuales nacen de diferentes cromosomas, pero creo que la conversación debería apartarse de la ciencia e ir más allá. ¿Cómo nos estamos presentando? ¿Cómo estamos viviendo en el mundo?

Nuestro nacimiento no nos convierte necesariamente en hombres o mujeres. Somos células, pero cómo nos convertimos en seres humanos en el mundo es realmente lo que marca esta conversación. Siento que todos necesitamos el respeto del derecho a nuestro espacio y a nuestros propios sentimientos. Pero creo que genuinamente me estoy moviendo en el mundo.    

Como mujer, quiero usar ropa de hombre y quiero usar tacones y quiero hacerlo todo y quiero vivir con una intención. Quiero vivir con intensidad y quiero sentirlo todo. Quiero representarlo todo en un solo cuerpo humano y si es posible, espero que pueda estar cerca a todas estas experiencias.  Porque los hombres que son sensibles, que lloran, que aman la moda y todas estas cosas que consideramos femeninas desde los estereotipos, son los mejores hombres del mundo. Es como si todos estuviéramos evolucionando a algo nuevo, quién sabe cómo serán los roles de género en el año 3000. ¡Dios mío!

O tal vez ya no existamos y no tengamos que afrontarlo. El futuro es incierto. Tal vez seamos unas cabezas criogénicas o seremos cuerpos flotantes en el interior de una computadora. ¿Quién sabe? 

Demi Moore.
Cortesía de MUBI

ROLLING STONE: Tal vez sea el destino, pero hoy se celebra el día de la mujer…

AMANDA KRAMER: Sí. En este momento estoy escuchando una marcha de mujeres desde mi ventana y creo que es algo muy bello.

ROLLING STONE: Aprovechando que es el día de la mujer, quisiera preguntarte ¿Quién es para ti la más grande directora de todos los tiempos y por qué

AMANDA KRAMER: Bueno. No sé si notas que tengo una gorra que dice “Días extraños”. 

ROLLING STONE: El título de la maravillosa cinta de Kathryn Bigelow.

AMANDA KRAMER: ¡Sí! Pero creo que es muy difícil decir quién es la directora más importante en la historia del cine. Hay muchas autoras maravillosas y actualmente creo que Julia Ducournau es mi realizadora favorita. Creo que ella es muy audaz. Está creando un brillante caos cinematográfico. No puedo decir quién es la mejor de todas, pero puedo asegurar firmemente que actualmente ella es la directora viva más grande.  

ROLLING STONE: Creo que es el engendro de David Cronenberg y Stanley Kubrick.

AMANDA KRAMER: ¡Absolutamente! ¡Absolutamente! Espero que haga películas por el resto de su vida. Amo su cine.

ROLLING STONE: Raw, Titane. Películas maravillosas

AMANDA KRAMER: Sí. Hermosas.

ROLLING STONE: ¿Puedes contarnos sobre los orígenes de tu película?

AMANDA KRAMER: Sí. Mi teléfono está lleno de muchas, muchas ideas que surgen de mi mente a cada momento y que se yuxtaponen en otros. Vienen de un a mor por el cine de los años cincuenta, sesenta, setenta y ochenta. Por supuesto, tienen que ver por mi amor al con el cine queer del siglo XX. Definitivamente, es un deseo de hacer una película de baile o un musical y de hacer un melodrama.

¿Sabes? Creo que es una especie de collage porque estoy tratando de crear como una especie de cocido con todas mis influencias y amores intrínsecos. Es como una película hecha por un fanático del cine y del arte, acerca de los hombres y mujeres en mi vida y las relaciones que he tenido. Esa es la motivación de mis personajes, los cuales son como las personas que he conocido en mi vida.

ROLLING STONE: Jacques Demy, la pareja de Agnès Varda, amaba los musicales porque, según él, poseían un sentido de realidad ensoñador e idealizado. ¿Por qué elegiste hacer un musical?

AMANDA KRAMER: Creo que por la misma razón por la que me interesan las pesadillas. Lo que es interesante de las pesadillas es que hacen parte de nuestros sueños. Las películas son nuestros sueños. Cuando alguien dice que algo tiene una cualidad onírica y ensoñadora o dicen que algo se parece a una pesadilla, están básicamente diciendo lo mismo. Están hablando de una cualidad inefable que afecta la consciencia y que se relaciona con tu ser.  El sueño y el ver una película son estados en el que estás y al mismo tiempo no estás.

Creo que la pesadilla y el sueño son ambos mágicos y románticos, ero, al mismo tiempo, son atemorizantes y como decías, oscuros. Es como El fantasma de la ópera, que se supone es una historia de fantasmas, pero también es una historia llena de romance, magia y posee todas esas cualidades trágicas de la ópera.

El espacio liminal entre nuestra mente consciente e inconsciente es uno de los más grandes espacios para re imaginar en el cine. Es la razón por la cual la gente adora a David Lynch. Él juega con esto y lo explora. Tiene que ver con crear esas imágenes que no logras describir del todo y que se conecta con todos aquellos que han tenido un sueño o una pesadilla que recuerdan. Saben que en ese momento ese sueño o pesadilla está frente a ti. Es ese momento en el que tu rostro puede ser el rostro de alguien más y puedes estar en un lugar y en otro al mismo tiempo. Es un territorio desconocido y hacer cine no necesariamente significa terraformar. No es siempre un intento de crear realidad. Es también, eso espero, crear una surrealidad en la que jamás hayamos vivido. Es a dónde vas cuando sueñas ¿verdad? Ver películas es un sueño dentro de un sueño, dentro de un sueño.

ROLLING STONE: Eraserhead es lo más parecido a una pesadilla, pero también es un musical.

AMANDA KRAMER: ¡Sí! Si has tenido un bebé, en el momento en el que su boca se abre, llora y su rostro se torna rojo, tú lo miras y crees que es el hijo de Eraserhead. Ese es el terror de tener a este ser gritando y que tu sientes como si se tratara de un alienígena. Creo que Lynch logró mejor que nadie crear la experiencia de un bebé llorando, porque parece real y todos podemos relacionarnos con la realidad, pero hay algo más que tiene que ver con crear una pesadilla. Una criatura con la que nos podemos relacionar, pero, al mismo tiempo muy extraña. Extraña, pero cierta.  

ROLLING STONE: Antes de terminar, quisiera preguntarte acerca de las mujeres en el cine. Creo que el siglo XXI le ha dado un nuevo rostro al cine, porque las mujeres se han apoderado del séptimo arte. ¿Estás de acuerdo? 

AMANDA KRAMER: Sí. Creo que estamos en un tiempo muy afortunado porque hay muchas mujeres en el cine actualmente. Y lo que es más importante, estamos siendo reconocidas como verdaderas artistas en el medio. Algunas de nosotras no podemos dejar de ponernos la máscara e interpretar el estereotipo asignado culturalmente a la mujer, pero otras estamos siendo vistas como artistas y eso me encanta. No me malinterpretes, somos mujeres y eso es maravilloso.

¿Sabes? El espíritu femenino es diferente al masculine y creo que podemos aprender uno del otro. Amo el espíritu masculino en el cine. Por supuesto, ese espíritu ha hecho muchas de las más grandes películas en la historia del cine, pero el espíritu femenino tiene algo diferente para ofrecer y cuando tenemos la oportunidad de ver cosas y aproximarnos a ellas sin saber quién es el realizador y sentimos esa conexión, es cuando nos damos cuenta de que detrás de algunas de esas imágenes hay muchas mujeres. 

Creo que eso se está haciendo cada vez más y mejor. Y es algo muy bueno para el cine. Para mí, la inclusión tiene que ver con más ideas, más historias, más personalidades y mejores. Estoy de acuerdo con ello. Estoy muy feliz. Tengo mucha suerte de estar viviendo en estos tiempos. Tengo suerte de ser vista y de experimentar esto tan maravilloso. Gracias. Gracias.   

ROLLING STONE: Gracias a ti. Que tengas un feliz día.

CONTENIDO RELACIONADO