“A los familiares, esposas, madres, padres, esposos, hijas, hijos que escuchen mi música y que tengan familiares dentro de las fuerzas armadas nacionales y los cuerpos policiales de Venezuela, les pido por favor que hablen con ellos”, les dice Danny Ocean, frente a la cámara, a sus más de dos millones de seguidores en Instagram. El mensaje, publicado el martes, dos días después de las elecciones que dieron como ganador a Nicolás Maduro con el 51,2% de los votos (frente a las denuncias de fraude de la oposición y el reclamo de buena parte de la comunidad local e internacional) , transmite dramatismo.
“Ellos son los únicos que pueden reducir los muertos, los heridos y la violencia que está pasando hoy en día en Venezuela. Les ruego por favor que hablen con ellos, que tomen conciencia. Somos 8 millones de venezolanos que estamos afuera. Y si esto sigue así ,va a haber una oleada mucho más grande de venezolanos saliendo de Venezuela. Y la región no está preparada para estas oleadas”, expresa el cantante. Y es el reflejo de buena parte de la comunidad musical del país, que desde que se conocieron los resultados de las elecciones del domingo, entró en un estado de violencia y confusión.
Un país en crisis, un país en pausa. “Desorden Público suspende actividades hasta nuevo aviso”, con ese titular, la longeva banda publicó un comunicado oficial en sus redes sociales.
“Sumados a la consternación—y por la seguridad, integridad y dignidad de todos quienes en Venezuela somos—hemos decidido darle pausa a nuestra agenda hasta que el clima-país lo permita. Creemos que el arte es por naturaleza un espacio de encuentro, y por ende de respeto y tolerancia. Claro que primamos el diálogo y la creatividad sobre la violencia y el odio. Pero las cosas están siendo como están siendo. Claro y raspao: sin un mínimo de conciliación y entendimiento no hay shows de Desorden Público. Y cuando los haya, como siempre, hablaremos. Seguimos atentos, y escribiendo canciones. Viva Venezuela, en libertad y en paz”.
La vocalista Laura Guevara también se expresó en redes. “He tratado de trabajar estos días, de dormir y ser funcional. Pero la verdad no he podido. Tengo a Venezuela en la mente, en el alma, en todas mis respiraciones, mis insomnios, en todo”, explicó.
“Lo que ocurre en Venezuela NO es un tema de derecha o izquierda. Lo que ocurre en Venezuela es que un pueblo decidió cambiar y los que gobiernan desde hace 25 años decidieron ignorarlo, reprimirlo y someterlo. La tierra que vió nacer al libertador tiene que explicarle al mundo que esto es un tema de derechos humanos versus muerte, tortura y pobreza como estrategia gubernamental, de democracia versus dictadura/tiranía, de libertad versus opresión, de un país que recibió a millones frente a un país que ha tenido el éxodo más grande de la historia sin que en teoría haya una guerra. Los éxodos nunca mienten. Lo único que sé en este momento es que tengo la fé intacta. A pesar de todos estos años de maltratos, abusos, de habernos visto obligados a salir de nuestro país, de aplastar nuestros sueños y calidad de vida, de haber borrado la posibilidad de desarrollarnos en nuestra tierra y convertirnos en extranjeros llenos añoranza y nostalgia por el mundo, de todas las ronchas y experiencias traumáticas que estos 25 años nos han hecho vivir siento la fe intacta, las ganas de regresar, de ver a mi país próspero, feliz y evolucionado, las ganas de reconstruirlo, de sembrarle amor por todos lados, en cada esquina y llenarlo de música. Nos han tratado de quebrar mil veces, de rompernos y romper nuestros sueños y no pueden. Venezuela merece ser libre y aunque han hecho de todo para desmoralizarnos, no lo van a lograr. ¡Que Viva Venezuela Libre! ¡Libertad y Democracia para mi gente! ¡Abajo Cadenas!”. Y añade: “ Si no sabes cómo ayudar, ayúdanos compartiendo lo que ocurre en el país, mostrándole a amigos lo que pasa, teniendo la conversación incómoda de desmontar el discurso de lucha de izquierda y derecha versus la responsabilidad que tenemos de defender los derechos humanos”.
