El nombre de Alejandro Marcovich, histórico guitarrista de la famosa banda mexicana de rock Caifanes, comenzó a circular en los portales de noticias en los últimos días. El músico argentino de 63 años que se encuentra hospitalizado en la Ciudad de México debido a un cáncer de próstata, recientemente fue acusado de intentar matar a su esposa, ejercer violencia contra sus hijos y acosar a una joven de 17 años.
La periodista mexicana Lydia Cacho, especialista en problemáticas como la violencia de género, publicó una columna en el sitio web Opinión 51 en la que sostuvo que Marcovich intentó “ahorcar a su hija“ y “matar a su esposa“. Además, dijo que el guitarrista que dejó Caifanes en 2014 acosó sexualmente a una estudiante suya de música. “Cuando ella se negó, él la insultó y le dijo que miles de mujeres morían por un beso de Alejandro Marcovich“, escribió Cacho.
“Con mi padre nunca tuvimos paz, ni psicológica ni emocional“, sostuvo Bela Marcovich, hija del músico argentino, en diálogo con el diario El País. “Vivir en un ambiente así siempre fue muy tenso. Cuando era chiquita yo no me daba cuenta de algunas cosas, pero veía que mi mamá estaba tensa y triste. Ella luchó para que él estuviera mejor y lejos de ver resultados positivos, él empeoraba y ella se entristecía más“, dijo.
Quién es Alejandro Marcovich
Hermano del director de cine Carlos Marcovich, Alejandro nació el 3 de junio de 1969 en Buenos Aires. El 26 de marzo de 1976, dos días después del golpe de estado cívico-militar, se exilió con su familia en México. Tomó clases de jazz, su gran pasión, en Estados Unidos con maestros de la talla de Joe Diorio y Jim Hall. Y en 1989 se unió a Caifanes para hacerse cargo de la guitarra líder.
Marcovich había compartido grupo con dos Caifanes: el guitarrista y cantante Saúl Hernández y el baterista Alfonso André. Los tres formaban Las Insólitas Imágenes de Aurora, una de las bandas pioneras del rock mexicano. Luego de un recital de Caifanes, Marcovich le señaló a Hernández que le vendría muy bien otra guitarra al entonces cuarteto, y éste le propuso que se hiciera cargo él. Al poco tiempo, ya como quinteto, se tomaron un avión a Nueva York para ponerse bajo las órdenes de Oscar López, Gustavo Santaolalla, Cachorro López y Daniel Freiberg y grabar el segundo disco de la banda, Volumen II, más conocido como El diablito (1990).
Aunque su éxito pudo haber pasado algo desapercibo en Argentina, Caifanes es una de las bandas de rock más importantes de México. Fue una de las primeras del género en cantar en español, y también fue pionera en fusionar el estilo con elementos de la música tradicional de su país. Su contribución a la expansión del género se puede escuchar, por ejemplo, en El Silencio (1992), el tercer álbum de estudio de la banda, su obra cumbre y un buen compendio de hits que dejaron una huella profunda en la historia de la música mexicana. Marcovich figura como coautor en cinco de las 14 canciones que componen el álbum.
La banda se separó en 1995 producto de la relación cada vez más tensa entre Marcovich y Hernández. Sin embargo, en 2010 anunciaron su regreso para tocar en el festival Vive Latino de 2011, un show al que asistieron más de 70.000 personas.
Después de girar unos años más como quinteto, en 2014, un repentino comunicado oficial anunciaba que Caifanes volvía a ser un cuarteto. “La única explicación que yo quisiera entender, es que les gustó así y que suponen que así van a ser más felices. Entonces yo les deseo toda la felicidad del mundo, les deseo éxito y felicidad”, dijo luego Marcovich en una entrevista, todavía sorprendido por la decisión.
Desde su salida de la banda, continuó trabajando como productor y arreglador de diversos artistas y proyectos musicales y cinematográficos. También se dedicó a la docencia y a seguir una carrera como músico solista. En 2022, recibió un premio Éxitos de la Sociedad de Autores y Compositores de México por sus 25 años de trayectoria en la música.
La situación judicial de Alejandro Marcovich
La familia de Alejandro Marcovich le permitió a la periodista Lydia Cacho escribir sobre el caso y acceder al expediente judicial. “El informe policiaco del último arranque de violencia de Marcovich narra cómo con un palo de escoba rompió lámparas, objetos y atacó a su hija Bela, los golpes le dañaron la clavícula que, según el informe medicina legal, pudo haber sido fracturada si no la hubiesen rescatado a tiempo de los puños de su padre que amenazaba, como muchas veces, con matarla”, narró la especialista.
La Jefatura General de Policía de Investigación y el Ministerio Público implementaron el “Código Águila” para la hija, el hijo y la esposa del músico. Es decir que Marcovich tiene orden pública de alejamiento de su esposa e hijos, precisó Cacho. “Consta en expediente que ‘La evaluación de nivel de peligrosidad del acusado se encuentra en los límites mayores 22-44. Alto Riesgo de violencia feminicida’“, precisó.
Y remarcó: “Si el agresor no fuese el productor musical y guitarrista Alejandro Marcovich, ya hubiese sido detenido. Sigue libre por su fama y por el tratamiento de cáncer“.
