Es el sprint final del set y el DJ, productor y músico inglés Jamie XX nos recuerda que los 90 han vuelto de manera pesadillesca no solo en el ámbito social y político: de pronto, sin preanuncio, suena aquello de “ritmoooooo, ritmo de la nocheeeee”. El tema de Mystic, que por aquí versionó The Sacados y dejó para siempre pegado a Marcelo Tinelli y su troupe fiestera de domingos a la noche en la década del 90, funciona en medio del elegante set del cerebro del grupo The XX como una suerte de anticlímax entre el público, que entre risas y recuerdos de gomazos televisados juega el juego del siga siga, que acá no ha pasado nada.
Entre el vendaval de artistas extranjeros que pasarán por Buenos Aires de aquí a fin de año, Jamie XX llegó al Complejo C Art Media con un set que combinó los tracks de su flamente álbum In Waves con los de su imprescindible debut, In Colour (2015), y más allá del chiste “latino” de “Ritmo de la noche” (lo tocó por primera vez en el Lollapalooza chileno el año pasado y sólo lo había vuelto a pasar en un concierto en Ciudad de México y en otro en Madrid) el DJ mostró que buena parte de su búsqueda por fuera de The XX consiste en combinar beats energizantes para convertirlos en mantras bailables.
El inicio y el cierre fue con lo último del productor: “Wanna”, “Treat Each Other Right” y “Still Summer” para calentar motores (casi el mismo arranque de In Waves) y “All You Children” (el tema que Jamie trabajó junto a The Avalanches), “Life” y “Baddy on the Floor” para terminar la jornada bien arriba. Y entre medio no faltó la última colaboración con sus compañeros de banda Romy y Oliver Sim, tambíen incluida en su nuevo álbum, “Waited All Night”.
Clásicos de In Colour como “Gosh” y “Obvs” se mezclaron con producciones más recientes como “KILL DEM” y “LET’S DO IT AGAIN” sin desentonar y el público, en su mayoría seguidores de The XX, agradeció la inclusión de otro track con la dulce voz de Romy, “Loud Places”, en uno de los tramos más hipnóticos, apto para el trance general. O al menos así se la vio a la plana mayor de Babasónicos (un Adrián, dos Diego y un Tuta), que llegó hasta el galpón de Villa Crespo para ver de qué se trataba. Sin despeinarse, cerca de la medianoche, Jamie XX saludó y cortó la fiesta en seco, para despabilar a todos y recordarles a los presentes que esto era un show, con principio y fin, y no una fiesta extendida in aeternum. Una pena, ya que el trance musical podría haber seguido por horas y nadie se hubiera quejado. Que se repita.
