En 2019, Avengers: Endgame se convirtió en la película más taquillera de la historia al recaudar cerca de 2,790 millones de dólares a comparación de los 2,789 millones de Avatar. Su reinado duró poco pues dos años después, el filme de James Cameron de 2009 recuperó el primer lugar tras su reestreno en salas de cine en China, pero la breve victoria de Los Vengadores fue la demostración máxima de la popularidad que las películas de superhéroes ganaron en la última década.
Cada año, los productos cinematográficos y televisivos de DC Cómics y Marvel –especialmente de esta última– recaudan miles de millones de dólares alrededor del mundo, un fenómeno que ha planteado la discusión sobre si puede considerarse como cine de verdad. Martin Scorsese respondió la pregunta hace un tiempo: “Para ser sincero, por más bien hechas que estén las películas, con actores que hacen lo mejor que pueden dadas las circunstancias, a lo único que se asemejan estas es a parques temáticos. No es el cine de seres humanos que intentan generar experiencias emocionales y psicológicas en otros”.
En su momento el director generó bastante revuelo por su opinión, tanto que llegó a convertirse en un meme, pero ciertamente no es el único que ha criticado el género. En 2017, el guionista y escritor Alan Moore dijo que el impacto de las películas de superhéroes en la cultura popular era “tremendamente vergonzoso”. Sus cuestionamientos han sido constantes, y en 2020 afirmó que no había visto ningún filme de este tipo desde Batman de Tim Burton, pues se habían convertido en una “plaga” para el cine y la cultura.
Ahora, el creador de Watchmen y V de Venganza volvió a opinar al respecto, aunque esta vez lo hizo desde otro punto de vista. En una reciente entrevista con The Guardian, recordó sus declaraciones de 2011 cuando expresó su preocupación por las repercusiones de las películas de Batman en el futuro: “Ese tipo de infantilización, esa necesidad de una realidad más simple, con frecuencia puede ser precursora del fascismo”.
Para el escritor, existe una relación entre el auge del cine de superhéroes y la llegada de Donald Trump al poder en 2016, ya que en ese momento había cientos de millones de adultos haciendo fila para ver filmes de situaciones creadas hace 50 años para entretener “niños de 12 años”. Moore responsabilizó a los medios en la década de los 80, cuando los periódicos y noticieros publicaban titulares como, “Los cómics han madurado”.
“Pienso que no, los cómics no lo han hecho”, agregó. “Hay unos cuantos números que tenían un tono más adulto a lo que se acostumbraba, pero la mayoría han tenido el mismo tono de siempre. No era que las historietas estuvieran madurando, sino que estaban respondiendo a la edad emocional de su público”. El escritor reiteró su amor por los cómics como medio, pero insistió en que la industria como tal se ha vuelto “insoportable”.
Moore, quien es uno de los escritores de historietas más influyentes, anunció su retiro del cómic en 2019 después de la publicación del cuarto volumen de League of Extraordinary Gentlemen. Sin embargo, eso no significó su despedida de la escritura en general ya que en septiembre pasado publicó Illuminations, su primera colección de cuentos repleta de ciencia ficción.