El domingo pasado se llevó a cabo un mitin de campaña de Donald Trump en Nueva York donde el comediante Tony Hinchcliffe hizo un comentario despectivo sobre Puerto Rico, calificando el país como una “isla flotante de basura”. El encuentro, que pretendía reunirse con todos los simpatizantes del candidato, en una ciudad en la que a menudo gana el Partido Republicano, terminó convirtiéndose en toda una polémica con posibles repercusiones en el voto latino, particularmente entre la comunidad puertorriqueña.
Las declaraciones de Hinchcliffe indignaron tanto a personalidades de la esfera política, como artistas y usuarios de internet, llevando al equipo de campaña de Trump a tomar distancia del incidente tan pronto como terminó el evento. Artistas como Bad Bunny, Ricky Martin, Jennifer Lopez, Luis Fonsi, entre otros, se pronunciaron en redes en desaprobación a estos comentarios, al mismo tiempo que hicieron público su apoyo a la contrincante de Trump, Kamala Harris.
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El actor John Leguizamo también se sumó a las críticas, quien, a través de su cuenta de Instagram, hizo un llamado a la comunidad latina, y en especial a los puertorriqueños, a votar en contra de Trump. “Voten contra Trump, es la mejor forma de hacerle daño. Lo que se dijo el otro día fue algo tan horroroso, pero sabemos que así ha sido siempre”, comentó en el clip publicado en la plataforma.
En su discurso, Leguizamo hizo referencia a un incidente anterior en el que el expresidente lanzó rollos de papel a los sobrevivientes del huracán María en Puerto Rico en 2017, un gesto que fue duramente criticado y que muchos percibieron como insensible hacia las víctimas de la tragedia. El actor también subrayó que este tipo de actitudes reflejan una falta de empatía hacia la comunidad puertorriqueña y los latinos en general.
“Los puertorriqueños son la gente más hermosa del mundo. La isla es una de las más bellas del mundo. Esto no puede quedar así. No podemos dejarlo pasar. No lo dejes pasar. Voten contra Trump, voten por Kamala. Hazle daño donde le duele, en las urnas”, concluyó.
Su mensaje apelaba directamente a los latinos en estados clave como Florida, Michigan, Pensilvania y Carolina del Norte, en los que la influencia del voto latino ha crecido en los últimos años. En estas regiones se encuentra una gran concentración de puertorriqueños, quienes han migrado en la última década debido a la crisis económica en la isla y los efectos devastadores de varios huracanes que han azotado al territorio. El impacto de este incidente va más allá de una simple controversia, ya que toca temas de gran sensibilidad para los latinos y puertorriqueños, y sus repercusiones podrían ser decisivas para la campaña de Trump.
Analistas señalan que lo ocurrido podría afectar las aspiraciones del expresidente y de los republicanos no solo para la presidencia, sino también en sus esfuerzos por controlar ambas cámaras del Congreso estadounidense. Anthony Zurcher, corresponsal de la BBC en Norteamérica, describió el evento de Trump como una oportunidad para exhibir poder político en la recta final de la campaña presidencial. Sin embargo, el equipo de Trump terminó “realizando control de daños” para mitigar el efecto del comentario de Hinchcliffe.
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En paralelo, el equipo de Kamala Harris no ha dudado en aprovechar este momento para remarcar el contraste entre ambas campañas. El mismo día en que Hinchcliffe hizo el controvertido comentario, Harris se encontraba en un restaurante puertorriqueño en Pensilvania, donde reiteró sus planes para mejorar la economía de Puerto Rico y acelerar la reconstrucción de la isla tras los estragos causados por el huracán María. Harris subrayó el compromiso de su administración con la isla y destacó cómo el gobierno de Trump se mostró reacio a brindar ayuda tras el desastre, en el que fallecieron miles de personas.
Con cerca de 5.8 millones de puertorriqueños con derecho a votar en el territorio estadounidense, la decisión de esta comunidad podría tener un peso significativo en los resultados de la contienda. Las elecciones se llevarán a cabo el próximo 5 de noviembre y esta controversia podría contribuir a fortalecer el voto demócrata entre la comunidad latina.
