El reconocido músico Dave Grohl, líder de Foo Fighters, compartió este martes una publicación donde anuncia que acaba de convertirse en padre de una bebé recién nacida, concebida fuera de su matrimonio. Grohl ha dicho que está “haciendo todo lo posible para recuperar la confianza” de su familia tras esta revelación.
Grohl, quien está casado con Jordyn Blum, ha sido públicamente muy explícito sobre el impacto positivo de la paternidad en su vida desde hace varios años. En 2007, en una entrevista con The Guardian, explicó que su esposa y sus hijas eran “anclas que me impiden desaparecer por completo”. También lo dijo en 2009, en una columna del formato ‘10 Preguntas’ para la revista TIME, donde el músico volvió a enfatizar en cómo ser padre había transformado su vida. En ese entonces explicó que antes hacía giras nueve meses al año, y que “ahora no me gusta estar alejado de mis hijas por más de 12 días. Ha cambiado todo lo que hago. Cuando tienes hijos, ves la vida con otros ojos. Sientes el amor de forma más profunda y tal vez eres un poco más compasivo. Es inevitable que eso se refleje en tu composición musical”.
En los años posteriores a esas declaraciones ha mantenido la imagen pública de esposo y padre responsable, y ha apoyado a Violet, una de sus hijas, en su carrera musical. Por todo esto resulta sorprendente la noticia de su nueva hija.
Más allá de este giro en la vida personal de Grohl, el caso plantea una reflexión sobre la responsabilidad y las expectativas en torno a la paternidad. A pesar de su imagen pública como un padre y esposo responsable, la noticia de su hija fuera del matrimonio muestra las complejidades y contradicciones que pueden existir en la vida familiar de figuras públicas como él, pero también de lo que implica socialmente asumir la paternidad con todo lo que conlleva.
La responsabilidad frente a la paternidad sigue siendo un tema complejo y muy desbalanceado en comparación con la maternidad. Mientras que las mujeres enfrentan el juicio y las expectativas sociales en torno a la maternidad como si fuera algo natural, la paternidad masculina todavía se percibe con diferentes estándares y consecuencias. Incluso se celebran actitudes básicas como el involucramiento activo en la crianza cuando son los hombres los que las exhiben.
Por una parte, es importante reconocer la responsabilidad que asume Grohl con su nueva bebé, pero también nos deja el sinsabor de qué tanto se presume públicamente la paternidad de los hombres, cómo se celebra algo que en las mujeres se asume como un deber y cuánto nos falta como sociedad para que haya más balance en la decisión y las consecuencias de ser madres y ser padres. Por supuesto, también es una oportunidad para reflexionar sobre la necesidad de construir masculinidades y paternidades más responsables, que no solo se alineen con un proyecto de vida deseado, sino que también estén emocionalmente vinculadas y comprometidas con el bienestar y los acuerdos de la familia elegida.