El proyecto de nueva constitución para Chile fue rechazado el pasado domingo 4 de septiembre. El “apruebo” obtuvo apenas el 38% de los votos, contra un 62% del “rechazo”.
El plebiscito llevado a cabo este fin de semana era el paso final para actualizar la carta magna del país sudamericano, tal como se había aprobado que se hiciera en 2020 tras el estallido social de 2019.
Este resultado implica que la Constitución de 1980, redactada y adoptada durante la dictadura de Augusto Pinochet, seguirá vigente. Aunque no se descarta la redacción de un nuevo documento para sustituirla, hacerlo implicaría reiniciar el proceso que llevó al plebiscito del fin de semana.
Ante este resultado, el presidente Gabriel Boric compartió un video en sus redes sociales, comentando “Hoy, Chile ha demostrado ser exigente y confiar en la democracia. Tenemos todos y todas que estar a la altura de este mandato. Por esto, llamo de corazón a toda la ciudadanía, independientemente de la opción que cada uno haya tomado en el plebiscito de hoy, a abordar juntos y unidos la construcción del futuro”. Boric, elegido presidente en 2021, fue en su periodo como diputado una de las principales figuras de la causa por una nueva constitución.
Tres años después de las protestas más grandes en la historia de Chile desde su regreso a la democracia, el futuro constitucional del país sigue incierto.
