A lo largo de sus diez años de trayectoria, Rawayana ha mandado un mensaje de puro hedonismo, donde la música se erige como lo único que nos ayuda a abandonar la tempestuosa realidad, sin embargo, poco a poco se gestaba en la agrupación venezolana el deseo de abrir los ojos y compartir a través de sus característicos sonidos todo la incertidumbre que supone ser parte de un lugar como lo es Latinoamérica.
Es así que después de tres producciones discográficas que nos hacían viajar entre las nubes, la agrupación ha decidido azotarnos contra el duro concreto con su nuevo álbum de estudio Cuando los acéfalos predominan, cuyo nombre es una clara referencia a la falta de dirección, de una guía, de cabezas dentro de esta caótica región.
El mensaje que Rawayana presenta en su nueva producción es tan vasto que han decidido venir hasta México para montar toda una exposición audiovisual e interactiva donde Latinoamérica funciona como un hogar completamente surreal donde un hombre sin cabeza da un recorrido a través de cada uno de sus cuartos, mismos que muestran una faceta que caracteriza a toda la región como lo es la pobreza, la corrupción, las drogas, las dictaduras, etc.
Alberto «Beto» Montenegro y Andrés «Fofo» Story platicaron con Rolling Stone México desde Un Teatro, el espacio de la colonia Condesa donde la dupla presentó esta exposición y donde nos compartieron todos los detalles detrás de esta así como de los pormenores que hay en su álbum más ambicioso hasta la fecha.
¿Cómo nace la idea de convertir su mensaje en una experiencia interactiva y audiovisual?
Fofo: Desde hace rato ya existían estas ganas de crear una experiencia inmersiva del concepto de alguno de los discos pero no había surgido el contexto correcto para lanzarnos por ese camino. Cuando explota la pandemia, resulta que ya no podemos compartir con el público, ya no tenemos acceso a las tarimas, y buscando alternativas para crear experiencias un poco más interesantes y más tangibles de los conceptos y el universo del disco, nace la idea de hacer esto. Tuvimos la suerte de juntarnos con Adolfo Bueno y Alfredo Corrella que son dos artistas increíbles que terminaron de conceptualizar todo este lugar y materializarlo basado en el arte del disco que lo diseña Joaquín Solín que es colaborador de la banda desde el primer disco.

Su música ha estado siempre cargada de un mensaje hedonista, y ahora, desarrollan todo un álbum en torno a las problemáticas latinoamericanas, ¿a qué se debe este cambio?
Beto: La música siempre tuvo ese enfoque pero hubo concepto detrás. Aún somos creyentes de que cuando uno está cerca del conflicto necesita abstraerse para encontrar esa claridad y volver a afrontarlo. La banda nace en un contexto donde la crisis política, social y económica monopolizaba la vida de los venezolanos, y aún es así, pero no ese momento, como universitarios, sentíamos que necesitábamos un escape y todo el concepto de la banda nace de la idea de crear un lugar donde tuviésemos libertad para el intercambio de ideas, para el debate, para soñar. Sucede que naturalmente después de una década y ya cuatro discos, tocaba el momento de enfrentar a todas esas situaciones que estábamos tratando de bloquear y simplemente llegar a esa etapa del ciclo donde teníamos que abordar estos temas con un poco más de profundidad.
Fofo: Siempre fuimos un proyecto que en todas las tarimas que nos juntamos hablamos de la situación y siempre fuimos muy frontales con nuestras posturas en el contexto de la situación de Venezuela. Nunca le dimos la espalda a la situación, sólo que no se reflejaba necesariamente en el grueso del repertorio, a pesar de que todos los discos tienen algunos temas que están relacionados con el conflicto social. Simplemente es la carga que uno lleva por dentro, veníamos del proceso de conocer Latinoamérica durante casi cuatro años de gira dándonos cuenta que todos tenemos los mismos problemas, simplemente estamos en etapas distintas de los ciclos.
En el manifiesto que lanzaron para anunciar la exposición y el álbum, hubo una frase que llama mucho la atención: «entiendo que para hacer lugar a la luz, meta última de nuestra búsqueda, debemos inevitablemente encarar la oscuridad». ¿Cuáles son las sombras a las que Rawayana se enfrenta en su búsqueda de luz?
Beto: Más que nosotros, creo que toda la humanidad está en un momento donde nos estamos enterando de muchas cosas. Se carece de liderazgo donde nos lleven a sitios positivos, por eso el nombre de este disco, se siente que la gente que perdió la cabeza es la que predomina. La única manera que sentimos, como humanos, ciudadanos o vecinos, podemos afrontar el futuro es que debemos involucrarnos. Lo que queremos decir ahí es que la gente buena y talentosa que han tenido el privilegio de tener una educación o de estar formados de alguna manera tienen que involucrarse.

Como mencionaron anteriormente, el termino que utilizaron para titular el disco, Cuando los acéfalos predominan, hace referencia a la falta de dirección o guía en tiempos inciertos, ¿cómo han visto afectado su arte por este aparente caos que toda la vida ha regido a Latinoamérica?
Beto: Nuestro desarrollo intelectual como músicos no viene desde Trippy Caribbean, viene desde hace 10 años que empezamos la carrera. Independientemente de que si hemos tocado estos temas o no, creo que es la decisión de cuando lo estamos haciendo. Como compositor, no me había atrevido pero siempre me había parecido curioso el cómo otros artistas que yo admiro habían escrito canciones que me gustan tanto como Juan Luís Guerra y Rubén Blades que tienen su manera de plasmar un momento histórico.
Fofo: Como latinoamericanos, específicamente como venezolanos, creemos que toda esa información y esa carga que traemos por venir de donde venimos se convierte en un montón de herramientas para crear que no necesariamente tus colegas de otros sitios tienen. Es casi como una ventaja, nuestro montón de herramientas tiene un par de cosillas extra.
Hay varios artistas que participan en este álbum y ayudan a llevar a nuevos horizontes el mensaje del álbum, ¿Qué elementos aportaron para que esto pudiera llevarse a cabo?
Beto: La verdad es que estábamos con esta idea de intentar colaborar con gente que tuviéramos cerca y admiráramos mucho. Por ejemplo, de aquí de México está Fer Casillas que es una colaboradora del proyecto que nunca nos deja de sorprender, no solamente con su música sino con la producción de videoclips. Akapellah, desde un punto muy personal, es uno de los artistas más completos que tenemos en Venezuela, no sólo grabó en las tres canciones que tienen sus créditos sino que grabó coros, dio ideas para canciones, es como el gran colaborador de este proyecto. Y con Jose Luis «Cheo» Pardo, fundador de Los Amigos Invisibles, se unió a sus antiguos compañeros para cedernos un poquito de eso que tenemos años soñando que es poder colaborar con ellos. Es tan interesante porque la gente que hace las cosas bien nunca te deja de impresionar, eso es lo bonito de colaborar. Cuando nosotros presentamos estas ideas de canciones, también se sintieron identificados y decidieron participar y aportar y el resultado final es algo… Super agradecido por su talento y por colaborar con nosotros.
En una palabra, ¿cómo definirían Latinoamérica?
Fofo: Siento que la clave de Latinoamérica es la contradicción y la paradoja, entonces una sola palabra es difícil justamente por eso, porque es ambigua. El concepto de este disco yace en eso, la belleza que yace detrás del desorden. Capaz eso, la palabra es contradictorio.
Beto: A mí se me hace joven. A veces hasta infantil.
Todo este proyecto ha sido una dura crítica hacia Latinoamérica, paralelamente, qué encuentran de positivo en la región que no han visto en otro lado del mundo?
Beto: Es esta misma juventud que puede tener sus contradicciones y puede ser un desastre pero también hay una gama de oportunidades y tantas cosas que cambiar y que si un grupo de gente entiende el momento en el que estamos, y se involucra, hay infinidad de posibilidades. Geográficamente, tenemos miles de riquezas desde México hasta Argentina, no sé, hay demasiadas oportunidades.
Escucha aquí Cuando los acéfalos predominan, el más reciente álbum de Rawayana.