Paula Cendejas está definiendo el futuro de la música. La española es una de las artistas más interesantes en la actualidad. Hoy, lanza TSUNAMI, un material completo y profundo, lleno de emociones con un sonido envolvente. Cendejas se enfrentó a sus miedos y vivencias en los últimos años y los convirtió en uno de los mejores materiales en lo que va del año.
En conversación con ROLLING STONE en Español, Paula habló sobre el proceso de TSUNAMI, en el que reflexionó sobre su experiencia con el aborto, la relación con sus padres, entre otras cosas. “Le he puesto todo el cariño del mundo, un año y medio de mucho y mucha cabeza. Ya que por fin sale me da penita que esa etapa se acabe porque le he cogido mucho cariño y le he puesto todo el amor del mundo. Ahora a disfrutar el proceso y pensar en lo próximo”, dice Paula.
Háblame de esta etapa creativa en la que te encuentras, has lanzado canciones personales y muy poderosas, ¿has utilizado la música como una manera de terapia?
Absolutamente, yo necesitaba ponerle palabras o materializar un poco lo que estaba sintiendo. Estaba pasando por etapas complicadas en mi vida, familiares y diferentes hitos personales entonces no podía hablar de otras cosas. Era como: “Okay, quiero hacer música, quiero hacer un proyecto. ¿Sobre qué me inspiró o en qué me enfoco para poder crear?” Al final creo que el mayor acierto que pude hacer era mirarme a mí misma, mirar dentro y decir: “Vale, ¿qué puedo sacar de aquí?” porque no estaba capacitada en ese momento psicológicamente para poder inspirarme en otras cosas. Mis preocupaciones ocupaban el 100% de mi energía, era imposible escribir de otra manera.
En ‘Tatami’ hablas de la relación con tus padres. ¿Qué tan catártico es el proceso de creación de una canción así?
Lo pasé bastante mal esos dos días porque nunca había hablado tan abiertamente de una situación que me hacía tanto daño y que formaba parte de mi vida. Le había dejado un poco aparcada con los años y me había independizado. La había dejado un poco atrás, pero sabía que estaba ahí y que en algún momento se iba a poner delante. Yo siento que la mente es muy es muy inteligente y cuando ve que tu propia cabeza no puede soportar tanto dolor, intenta esconderlo. En ese momento de mi vida yo ya necesitaba hablar de eso y me atreví. Fueron dos días muy ansiosos, acabamos la canción y yo me quedé como: “¿Qué he hecho?” No estaba segura de mí misma ni de si había hecho lo correcto, hablas de personas que no son tú entonces inevitablemente cargas con un mínimo de responsabilidad de las personas de las que estás hablando. Para mí esa sesión fue complicada hasta que pude realmente sentirme que estaba preparada (no del todo, porque nunca he sentido que estaba preparada para lanzar estas canciones), pero sí que me he lanzado. He estado decidida a hacerlo, pero este año y medio he estado preparándome mucho con mi terapeuta también para poder llegar a un punto en el que yo estuviera segura de qué era lo fundamental para mí o qué era lo que más me importaba. Ha sido un proceso muy bonito, porque ahora lo miro y gracias a eso he tomado decisiones, he ido haciendo cosas en mi vida y he madurado mucho más rápido quizás que si no lo hubiera hecho. A mí me ha venido increíble, la verdad.
¿Qué ha significado para ti mostrar este lado tan personal de manera pública?
Paradójicamente me ha supuesto sentirme más segura de mí misma. Fíjate que al final es como un acto de vulnerabilidad, estás mostrando una parte de ti que casi ningún artista muestra tampoco. Estás poniendo en la paleta cosas de las que realmente no se habla. Podría ser que me hiciera más chiquitita, pero al revés siento que era algo que necesitaba, un impulso o una energía que no fuera la que siempre estaba acostumbrada a la hora de sacar canciones. Necesitaba una motivación extra. Es curioso, pero a mí me ha fortalecido un montón, me ha hecho sentirme valiente y más adulta. Me ha hecho más fuerte y me ha enseñado mucho. Ha sido tan productivo y sanador para mí como ser humano que lo volvería a hacer una y mil veces.
Qué increíble no solo utilizar la música como terapia, sino también ir de la mano con un terapeuta, que es algo que muchos tienden a dejar de lado.
Tengo la suerte que me lo he podido permitir económicamente. La salud mental es absolutamente cara. Si no hubiera estado en terapia, no habría tenido el valor de hablar de esto. Lo valoro mucho e intento exprimir cada cada sesión que tengo. Me lo tomo muy en serio, para mí es una parte fundamental de mi día a día y mi estabilidad.
Cuéntame sobre ‘Colibrí’, sé que es una canción muy emocional para ti sobre tu propia vivencia con un aborto, ¿qué ha significado para ti lanzarla y ver una respuesta tan poderosa de la gente?
‘Colibrí’ y ‘Tatami’ han sido las canciones más importantes obviamente en este EP. Decidí, no quiero decir dar voz a otras mujeres o personas que han pasado por lo mismo, pero sí hablar y representar un poco esa situación concreta en mi vida que fue eso: tomar una decisión que no es nada fácil. Este es un tema súper controversial que al final yo tampoco he querido meterme a discutir sobre esto porque es algo muy personal, muy íntimo y muy de cada una. Hay que saber muy bien el contexto, esto es muy delicado, pero yo me basé en contar mi experiencia porque yo necesitaba hacer un homenaje, un tributo, a esta situación en mi vida. Yo tenía mucho miedo de que esto pasara desapercibido en mi vida. No quería hacer como si no hubiera pasado nada y mirar para otro lado porque creo que son situaciones que la vida te está dando para que tú aprendas igual que todo lo que es complejo en la vida. Si hay algo que a mí me preocupaba era no dejar de aprender de esto. Una de las razones fue esa, una de esas consecuencias fue escribir una canción. Yo intenté enfocarlo de la manera más bella posible, porque al final no dejas de hablar de una pérdida, de una decisión que tomas que es tu responsabilidad. Siempre vas a tener eso y va a vivir contigo, va a formar parte de ti, pero intenté verlo de la manera más bella posible.
Igual que con ‘Tatami’, dije: “No sé si la sacaré”, pero al compartirla he visto la cantidad de mujeres y personas que han pasado por esto o lo han vivido de cerca. Es una pena que este duelo se silencie siempre y que parezca como que no pasa nada. Esa era mi preocupación, que yo fuera una más de esas personas a las que estas cosas le pasan y luego parece que no ha pasado porque sí ha pasado. Es una situación y una vivencia en tu vida que te va a acompañar hasta el día que te mueras y que también indirectamente en un futuro puede llegar a volver a aparecer de otra manera. He aprendido muchísimo del proceso. Obviamente esa situación para mí fue súper traumática y me marcó un antes y un después en mi vida, pero creo que eso es algo que va a vivir conmigo siempre, que no es pasajero y me parecía bonito que esta canción también fuera infinita. Con este EP he intentado ser lo más sincera conmigo misma aunque las canciones o letras no sean para gusto de todos, pero yo quedarme tranquila con que eso que he sacado es mío absolutamente. Es una parte de mí.
¿Qué te gustaría que la gente tomara de este tipo de canciones que tal vez son sobre temáticas “tabú o incómodas” en la música, pero que hablan sobre temas importantes?
A mí me gustaría que cada persona la hiciera suya. A mí me escribe mucha gente diciéndome: “Estás escribiendo mi situación con mis padres”. Me escriben hasta personas que dicen: “Tengo esta misma situación y mi hermana se llama María”, porque la canción menciona a mi hermana. Es muy especial ver cómo pones voz a situaciones de gente que está en su casa y lo está viviendo. Es verdad que cada realidad es diferente, pero si la música tiene algo bonito es que es súper universal y puede llegar a personas en la otra punta del mundo que se sientan identificadas. Como música, me gustaría contar historias de verdad y reales, intentar llegar a un punto artístico en el que realmente esté diciendo mi verdad sea como sea. No sé si de aquí a dos años seguiré hablando de mis experiencias, a lo mejor no, pero siempre encontrar la manera de ser lo más real contigo mismo y de sacar lo mejor de tí. Para mí la música es también un reto porque yo me lo tomo muy personal y como una herramienta para poder crecer personalmente. Siento que la música es también un privilegio, poder escribir y dedicarme a esto. Hay mucha gente que quiere decir cosas que no puede porque a lo mejor no escribe o tiene una vida más rutinaria y para mí es un lujo tener esa libertad entre comillas de poder escribir de lo que quieras.
TSUNAMI representa “una confesión de quién soy” y una reconstrucción tras situaciones que te “marcaron de por vida”. Has expresado que “el miedo puede ser tu cárcel o tu inspiración, tu condena o mayor motor”, de ello construiste un EP ¿Cómo fue tu proceso creativo? ¿Cómo decides utilizar el dolor para convertirlo en arte?
Pues es que a mí me ha pasado algo desde muy pequeña y es que el dolor era lo que me motivaba a vivir y hacer cosas. Vengo de una situación familiar complicada, en el colegio tampoco me iba bien, entonces mi infancia no fue de color rosa. La única motivación que tenía era intentar transformar ese dolor, esa rabia, ese no pertenecer a nada y esos sentimientos muy negativos en motor y propulsión para poder salir cuando podía de mi casa, para poder dedicarme a la música aunque tenía todo en mi contra. Yo siento que conseguí transformar eso desde muy pequeña porque no tenía otra. Es algo que me lleva acompañando mucho tiempo. La verdad es que cuando mejor compongo, cuando más inspirada estoy o más ganas tengo de escribir es cuando estoy mal [Risas]. Entonces no sé si eso es bueno o no, pero al final creo que sí salen cosas más del corazón que si fuera de otra manera. Incluso a nivel personal, yo creo que nadie cambia o nadie se plantea su vida y realidad si está a gusto. La gente cuando está feliz no está diciendo: “Ay, voy a cambiar esto que no me gusta”. No, estás disfrutando esa felicidad. Para mí era un poco, una necesidad que he tenido desde muy pequeña. Con TSUNAMI es la primera vez que de principio a fin todas esas emociones están puestas al 100% en cada canción, en cada video, cada foto y cada portada. Todo ha sido lo más real que he podido que nunca.
¿Cómo llevarás estas canciones al escenario o qué estás trabajando para el show en vivo?
La verdad es que estamos todavía perfilando el show porque no he anunciado gira aún. Vamos a hacer algunos festivales por España, pero no van a ser al 100% como me gustaría escénicamente hablando porque al final la logística de un festín no es la misma. Para mí es que la gente pueda sentir esas emociones o yo intentar ser un poco una guía para esa gente que viene a verme y que puedan llegar a sentir lo mismo que escribir en TSUNAMI, que lo vivan y que lo puedan ver. Esa es mi mayor preocupación, intentar que la gente lo sienta de verdad y pueda conectar con ello. La verdad que va a ser un show bastante minimalista porque para mí lo importante es el mensaje y lo que te estoy contando. Obviamente va a haber momentos de todo, pero es verdad que quiero centrarme mucho en que la gente pueda ver lo que te estoy contando porque te estoy contando algo que es importante y valioso fuera de que pueda haber alguna canción que sea más bailable o no, pero va a ser bastante minimalista. No quiero dejar de centrar la atención en el mensaje que para mí eso es lo importante.
¿Qué más puedes decirme sobre las otras canciones que conforman TSUNAMI? ¿Hay alguna otra temática o concepto que haya sido importante en su creación?
La verdad es que las que faltan son relacionadas con el amor, son relacionadas con la relación que tuve en TSUNAMI, tiene diferentes puntos. Fue una relación en la que sufrí mucho, pero siento que si la gente escucha también el EP van a poder entender muchas cosas. Yo creo que TSUNAMI es un buen ejercicio psicológico. Creo que si la gente realmente lo analiza puede entender muchas cosas y puede entender por qué existe ‘Tatami’, luego existe ‘Pa’ enamorar’ y luego existe ‘Omega’. Todo tiene un hilo conductor muy potente que al final no deja de ser las vivencias y lo que tú vives de pequeño te influye hasta donde no sabes que te influye. Si la gente se para pensar se puede hacer una bonita síntesis de lo que es TSUNAMI. Para mí es una representación de la vida. Te estoy hablando de mi vida, pero al final creo que es un ejemplo de la vida de muchos y yo creo que eso es lo que con lo que quiero que la gente se quede. Fuera de que las canciones sean más o menos fuertes el cómputo general creo que lo van a entender muy bien y también van a entender por qué se llama TSUNAMI, yo creo que la gente ya está obviamente pudiendo ver por qué. Quise llamarle TSUNAMI a este EP obviamente porque es un gran tsunami lo que pasó por encima mío, pero también me parecía precioso el poder ver las dos partes: el momento en el que esa ola te arrolla una y mil veces, pero luego cuando todo se queda en calma, te toca reconstruir con todo lo que has aprendido. Para mí es muy importante tomar conciencia de todo eso y utilizarlo como herramienta para una siguiente etapa. Veo la música también como etapas, entonces ahora todo lo que he aprendido lo voy a volver a poner en práctica y mejor, pero en otro proyecto.
Más allá de su lanzamiento, ¿hay algo que te emocione en el futuro o algo que estés planeando?
Pues me emocionan mucho los conciertos y me emociona mucho en general todo lo que va a salir y pasar después de TSUNAMI. Yo creo que va a ser un momento muy bonito. Estoy ya estoy notando que ha sido un antes y un después en mi carrera y en mí como persona. Entonces lo próximo que venga sé que va a llevarme mucho trabajo, pero también me motiva mucho. Soy una persona que siempre intenta superarse en cada trabajo, así que me toca trabajar duro, pero estoy expectante a ver qué sale.