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‘Nomadland’: la hazaña de Chloé Zhao

En el filme, Frances McDormand hace una interpretación poderosa pero discreta, dejando el camino libre para mostrar la realidad de la comunidad nomada estadounidense

Por  ALEJANDRA PÉREZ

abril 21, 2021

Cortesía

Nomadland marca apenas el tercer largometraje de Chloé Zhao, sin embargo, no falla en mostrar las intenciones de la directora china de mostrar la realidad de ciertas personas. En su debut de 2015, Songs My Brother Taught Me, Zhao muestra la relación y vida de una familia perteneciente a la tribu Lakota, en Estados Unidos. Mientras que el filme no es un documental ni está basada en una historia real de forma específica, sí muestra la realidad de la vida de los jóvenes nativos.

Lo mismo pasa con Nomadland; arrastrada por la discreta pero poderosa interpretación de Frances McDormand, la historia del libro de Jessica Bruder del mismo nombre —que Zhao adaptó para la pantalla grande— sigue a Fern, una mujer que decide vender su casa y encaramarse en una camioneta en la que vivirá y recorrerá Estados Unidos, tomando trabajos durante un rato para poder subsistir.

Mientras que Nomadland está basada en un libro que Bruder creó documentando la vida de la cultura nomada en el país, existen algunos elementos modificados y ficticios, no obstante, el filme hace una muy buena demostración de tal subcultura, mostrando una vida que pocos llevan, y recordándonos que no por ser de una cantidad limitada significa que no existan.

Visualmente, la cinta es una delicadeza, mostrando paisajes esplendorosos y colores de Estados Unidos reflejados en la vida de la comunidad nomada del país, denotando siempre su lado humano y sus historias personales. Mientras Fern se embarca en su viaje, se encuentra con ciertos personajes que sí son parte de la comunidad en vida real, como Bob Wells, quien se describe como «gente que está cansada de vivir la carrera de ratas y una vida llena de hiperconsumismo —siempre comprando cosas en busca de la felicidad, pero nunca encontrándola. En cambio, estamos regresando a nuestras verdaderamente humanas raíces originales de nomadismo tribal. Hemos adoptado vidas de viajes y aventura, viviendo en un vehículo».

También están Linda May y Charlene Swankie, quienes otorgaron sus experiencias y conocimientos para la creación del libro, y consecuentemente, del filme. De hecho, la combinación de las vivencias de las dos mujeres son las que inspiraron la creación de Fern. Swankie, quien antes no había actuado, ahora es una actriz nominada al Premio AACTA (de la Academia Australiana de Artes del Cine y la Televisión) a la Mejor Actriz de Reparto, gracias a su conmovedora narración de lo qué ha visto y experimentado, ahora compartiendo la lista con Viola Davis, Amy Adams, Margot Robbie y más. Estos elementos dan a la película este sentido de pertenencia y cercanía del que hablaba anteriormente.

Incluso, casi podríamos confundir la obra de Zhao con un documental, si no fuera porque se sabe que Frances McDorman es una actriz tan galardonada que en su repertorio hay un Tony, dos Premios Óscar, tres BAFTA y dos Emmy, convirtiéndose en una de las pocas intérpretes en conseguir «la Triple Corona de la actuación», y en esta ocasión, con un papel que, de alguna breve y discreta manera, la convierte en el corazón de la cinta, sin ponerla por encima de las historias verdaderas que están detrás de Nomadland.

No es sorpresa que Chloé Zhao se haya convertido en la segunda mujer y la primera asiática en conseguir el Globo de Oro a Mejor Director gracias a su trabajo en Nomadland, por lo que podríamos ver, por segundo año consecutivo, a una persona asiática llevándose el Óscar por Mejor Dirección a casa; solo que esta vez, el premio sería para la directora.