La cantante, compositora y productora Melanie Martinez hace dark pop con un toque satírico y emocional. En 2015 debutó con su fantástico Cry Baby, álbum conceptual sobre una joven que asesina a su secuestrador, repleto de canciones autorreflexivas como ‘Pacify Her’ y ‘Dollhouse’. A este disco le siguió K-12 en 2019 –así como una película del mismo nombre–, con el que continuó construyendo un culto de seguidores devotos que han estado pendientes de su proceso. Así, ha recorrido un largo trecho desde que fue la adolescente soñadora que incomodaba a Christina Aguilera en The Voice.
En febrero, Martinez nos preparó para su siguiente capítulo al compartir un clip de 30 segundos que mostraba el mensaje, “RIP Cry Baby”, grabado en un hongo gigante rodeado de velas dentro de un cementerio. Aquel fue el último adiós a su personaje de lolita y ahora, con su nuevo álbum Portals, la artista ha “resucitado entre los muertos”.
Ahora tiene una nueva musa: una criatura de piel rosada y cuatro ojos que se asemeja a un hada y que se ha quedado atrapada entre la Tierra y lo que hay después de la muerte. Y está utilizando ese personaje para interpretar letras más introspectivas con sonidos que la hacen salirse de su zona de confort. A nivel musical, Martinez se aleja de su pop alternativo del pasado para explorar una composición más pop-rock, experimentando con más batería y filtros de voz. “Todas las canciones de este disco están basadas en los libros de terapia de regresión de vidas pasadas que he estado leyendo por varios años”, comentó sobre el LP. “Todas están disfrazadas con temáticas terrenales que tienen doble o tripe sentido, todo con el fin de crear una frecuencia que resuene con los seres humanos en tanto habitan la Tierra”. Si de crear álbumes conceptuales interesantes se trata, no existen muchos artistas que se le asemejen.
‘Void’ abre con una atmósfera etérea antes de que la voz dulce de Martinez comience a reflexionar sobre su baja autoestima, fusionando la identidad que ha inventado para el álbum con su experiencia de la vida real. “Me juzgo a mí misma como un cura dentro de un confesionario, arrodillada sobre un rallador”, canta. ‘Light Shower’ es todo lo contrario, prefiriendo una guitarra suave sin mucha más producción. Es muy lejano a lo que se esperaría de ella ya que enseña una visión inusualmente optimista y sencilla del amor: “Es loco como toda mi ira, tristeza y arrepentimiento desaparecieron”. Para los fans que extrañan la era Cry Baby, hay canciones como ‘Spider Web’ que con su xilófono rememora sus orígenes musicales. O momentos más oscuros como ‘The Contortionist’, con efectos de sonido que literalmente suenan como huesos tronando y sintetizadores dramáticos similares a ‘Nurse’s Office’ de K-12.
Parte de la “regresión” que prometió con el LP aparece en canciones como ‘Nymphology’, ‘Moon Cycle’ y ‘Evil’, que ofrecen una nueva perspectiva de sus experiencias pasadas, específicamente su relación con Oliver Tree. El músico ha hecho referencia a ella en sus letras y ha usado una actriz parecida a Martinez en un video musical solo con el propósito de burlarse de la artista. En ‘Moon Cycle’, canta versos incómodamente crudos sobre un hombre que pide tener sexo con una mujer durante su periodo (“Nadar en sangre lo convertía en anfibio”), al tiempo que entrelaza la letra con referencias directas a la música de Tree. Y en la extraordinaria ‘Evil’, el tema de synth-rock mejora con sus versos mordaces: “Espero que nunca te recuperes, espero que te resbales con el jabón y rompas tu cabeza como un huevo. Quiero ver la yema”. Auch.
El LP termina con ‘Womb’, una metáfora a su renacer musical y de personaje, antes de que el álbum se torne en un bucle que comienza y termina con la frase: “La vida es la muerte es la vida es la muerte”. Con Portals, Martinez entrega un disco maduro e ingenioso que la vuelve a presentar como una artista que no teme comenzar desde cero, además de abordar ideas complejas. No se está escondiendo detrás de su maquillaje de SFX rosado, nos está dejando entrar a su mundo y la historia que relata es completamente transparente.
