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La alegría de la nostalgia en Japanese Breakfast

La cantautora nos habló acerca de su debut como escritora, el proceso detrás de 'Jubilee' y su largo camino para encontrar la felicidad

Por  CARMEN ASCENCIO

junio 7, 2021

Cortesía

Michelle Zauner, mejor conocida bajo el nombre de su proyecto musical como solista, Japanese Breakfast, publicó su primer álbum en 2016. Psychopomp le valió el inicio de una reputación privilegiada como compositora y un año después, con la llegada de Soft Sounds From Another Planet, su base de seguidores creció exponencialmente. Sin embargo, desde entonces han pasado cuatro años, y toda una vida, para Zauner. 

Jubilee, su tercer álbum de estudio, ha permitido que Japanese Breakfast redireccione su trayectoria artística, y en esta ocasión Rolling Stone México platicó con la artista multidisciplinaria para hacer un recuento de sus últimos proyectos, entre los cuales se encuentra este material y la publicación de su primer libro, Crying in H Mart

El mundo está en llamas pero Michelle se mantiene optimista. A través de la pantalla se nota su entusiasmo, ha cumplido 32 años y en Estados Unidos ha sido inaugurado el proceso de vacunación a las personas con más de tres décadas de vida. «Es la única vez que me he alegrado de tener 30 años», bromea. Su personalidad resume el sonido de «Be Sweet», el sencillo con el que Japanese Breakfast regresó a la escena musical después de un tiempo y que le valió el reingreso a las listas de popularidad en el género alternativo.  

Aunque nada de lo anteriormente mencionado habría sido posible de no ser por cómo canalizó la negatividad de los últimos años a través de su arte. Psychopomp fue hecho al mismo tiempo tiempo que lidiaba con la enfermedad de su madre y Soft Sounds From Another Planet, el segundo álbum de Japanese Breakfast, resume el proceso de pérdida que atravesó una vez de su muerte. Crying in H Mart nace del ensayo que Zauner publicó en 2018 a través de The New Yorker, sus palabras lograron que miles de personas exigieran una continuación de las memorias de Michelle al lado de su madre y que ella encontrara la necesidad de desahogarse a través de la escritura.

«Creo que viene de un sentido de urgencia muy orgánico, simplemente sentí que debía hacerlo y no tenía expectativas en él, simplemente sentí que necesitaba algo para poner todas estas emociones que estaba sintiendo y que de alguna manera tuviera sentido todo lo que había sucedido». A pesar de esto, el libro de no ficción ha recibido buenas críticas, sobrepasando las barreras culturales de una historia acerca de la familia y gastronomía coreana que ha resonado con diversas personas.

«Soy muy abierta, muy franca, y después de que mi mamá murió me convertí en una persona muy callada y me era muy difícil comunicarme con mis amigos, sentí que al escribir era más fácil para mí describir lo que pasó», continúa. «Parte de mi quería que la gente supiera el dolor que sentí y lo que vi, lo horrible que fue, y otra parte de mi quería revivir lo hermosa que fue mi relación con mi mamá antes de que se enfermara y recordar las memorias que ya estaba olvidando. Así que, esas fueron las dos razones por las cuales quería escribir el libro».

Michelle no es ninguna desconocida en el mundo de las palabras, pues en Japanese Breakfast se encarga de expresar minuciosamente sus sentimientos, a pesar de esto, admite que el proceso fue bastante diferente. «Para empezar, hay más palabras. En un álbum escribes solo como 5 mil palabras o algo así, y en el libro fueron como 80 mil. Escribir música es usualmente un poco más colaborativo para mi, las ideas son más metafóricas, más abiertas a interpretarse y escribir Crying in H Mart fue un proceso más largo y solitario. Mucho más difícil en general, muy diferente». 

Crying in H Mart llegó en una época en la que la población asiática ha tenido que enfrentar el racismo en diferentes partes del mundo debido al origen del COVID-19, mientras su libro comparte el mensaje universal del amor en la familia, Michelle no ignora la hostilidad en el panorama. «Siento que muchas culturas asiáticas nos sentimos con suerte de estar aquí, nos mantenemos callados con lo que sea que nos dan, la nueva generación está empezando a luchar contra eso, muchos de nosotros nacimos y crecimos aquí y sentimos que no tenemos los mismos derechos que los demás».

«Se ha hablado más de ello, lo cual es bueno, porque ha pasado un largo tiempo, pero también pienso que es la consecuencia de que varios políticos y gente con plataformas estén diciendo que pasamos a ser un blanco fácil con la llegada del virus, este es el tipo de lenguaje sobre el que le hemos estado advirtiendo a la gente desde hace mucho tiempo, y aquí estamos». Michelle llegó a hablar del tema en redes sociales para expresar su descontento, pero fuera de ello, sus demás publicaciones han estado repletas de felicitaciones por el libro y por el regreso de Japanese Breakfast con Jubilee.

La luz al final del túnel

Desde Soft Sounds From Another Planet han pasado tres años, y aunque Michelle no había publicado nada bajo el nombre de Japanese Breakfast, no estuvo del todo ausente en la escena musical. El año pasado publicó un EP en colaboración con Jack Tatum de Wild Nothing, pop songs 2020. Las cuatro canciones crearon la pauta para que decidieran volver a trabajar juntos en «Be Sweet» y «Posing In Bondage», la cantante define todo el proceso como muy colaborativo. 

«Me siento lista para experimentar y buscar felicidad»

– Michelle Zauner (Japanese Breakfast)

«Quería invitar a más personas a mi mundo, más colaboradores, como había estado dando conciertos tuve la oportunidad de conocer a otras personas como Molly Germer, una increíble violinista que tocó en este álbum. Luego tuve la oportunidad de conocer a Ryan Galloway de la banda Crying, hicimos un par de canciones juntos para Japanese Breakfast, Alex G es amigo de nosotros porque él y yo salimos de gira en 2017, sabía que quería hacer música con él». 

«Cuando escribí Soft Sounds From Another Planet estaba muy nerviosa, con el primer álbum recibí comentarios positivos y di varias entrevistas, tuve la oportunidad de salir de gira por primera vez y estaba muy nerviosa de que solo fuera un accidente», continuó Japanese Breakfast. «Mi baterista, mi coproductor… los tres hicimos los arreglos de las canciones, las producimos y tocamos todos los instrumentos en el estudio. Así que estaba como ‘está bien, en mi próximo álbum como Japanese Breakfast quiero tener más confianza’, después de escribir dos discos acerca del dolor quería hacer algo que se sintiera muy alegre y muy desafiante, muy teatral». 

En efecto, si hay una palabra para describir la identidad visual que Japanese Breakfast ha presentado en sus videos musicales, y temas, sería teatral. «Tengo la fortuna de tener un colaborador como Adam Kolodny, él es el director de todos los videos musicales de Japanese Breakfast y los dos creamos un mundo genial. En cada álbum trato de superarme una y otra vez y estoy muy feliz con el resultado de estos videos».

No fue hace mucho que Japanese Breakfast hizo su debut en el programa de Jimmy Fallon, donde tuvo la oportunidad de recrear el escenario del video musical de «Be Sweet» y por supuesto, tocar «Jimmy Fallon Big!», una canción que escribió cuando uno de sus compañeros de banda quería abandonar el proyecto para unirse a otro grupo que aparentemente iba lograr presentarse en el programa del célebre conductor, esto no sucedió, pero hasta el día de hoy sigue siendo colaborador de Michelle, quien sonríe al recordar la presentación. 

«En las presentaciones tendremos una banda en vivo, estoy muy entusiasmada por trabajar con músicos de cuerda y saxofonistas, como es un álbum muy sonoro quiero transmitir eso en las tocadas en vivo», cuenta acerca de sus próximos conciertos que dará para promocionar Jubilee. Claro está que, como muchos otros artistas que habían anhelado su regreso a los escenarios, Japanese Breakfast se encuentra impaciente por tocar frente al público, pero no tiene arrepentimientos por haber esperado tanto para el lanzamiento del álbum, el cual llegó a posponerse en una ocasión. 

«Creo que es más pertinente que nunca, me alegro de que esperáramos porque es como un avance muy esperanzador y es donde estoy ahora, siento que mucha gente en el mundo siente que hay una luz al final del túnel y creo que gran parte del disco se trata de eso. Creo que con el simple hecho de ver las portadas de los álbumes de Japanese Breakfast que hay en mi habitación se siente como si hubiese recorrido un túnel muy oscuro para tener esta luz, me siento lista para experimentar y buscar felicidad, compartir felicidad con otras personas, creo que es más oportuno que salga ahora y no el año pasado».  

El mundo apenas conocerá Jubilee, pero la mente de Michelle no puede descansar y ya ha anticipado sus planes para el futuro de Japanese Breakfast, como autora y de manera personal. «Quiero que la continuación de este álbum salga más rápido, el siguiente saldrá dentro de un par de años. Tal vez adapte Crying in H Mart a un guión, es muy emocionante. Siento que he tenido muchos proyectos durante los últimos seis años, es la primera vez que no tengo demasiadas ideas aún, así que siento que debo vivir un poco más y disfrutar la vida. Estoy segura que más ideas saldrán pronto». 

Tal vez la próxima ocasión que escuchemos de Michelle Zauner sea por un nuevo libro, un álbum de Japanese Breakfast, o incluso una nominación en el mundo del cine. Aún no hay nada escrito, evidentemente, pero lo que sí es seguro es que encontrará otra forma de canalizar sus emociones y regalarnos las pequeñas notas de alegría que hay en la nostalgia y en la tristeza. 

Escucha Jubilee:

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