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Joss Stone: una profunda voz

Joss Stone deja a un lado los cóvers para presentar ‘Mind, Body & Soul’, un álbum íntimo

abril 11, 2021

EMI Music

EXTRAÍDO DE RS25, NOVIEMBRE 2004

A los 16 años hizo su debut musical con The Soul Sessions (2003) y las buenas críticas le llovieron. Ahora edita Mind, Body & Soul, una producción en la cual se involucra en cada detalle. Es una joven con una voz que tal vez no concuerdan con su edad: “No lo sé, siempre he sido una muchacha llena de sentimientos. Cuando estás cantando y lo estás sintiendo simplemente sale así.

Y las personas piensan, ‘eres muy joven, ¿cómo sucede esto? No hay forma de que hayas vivido como Aretha (Franklin)’, y yo digo que lo sé, pero a la gente se le olvida lo que significa ser adolescente, los sentimientos son enormes porque estás aprendiendo cosas nuevas y a veces te decepcionas. Estás aprendiendo a amar y a decepcionarte”.

¿Cuáles son las preguntas que más te han hecho?

Siempre me preguntan qué me sucedió: “¿Quién es ese muchacho que rompió tu corazón?, ¿cómo puedes ser tan joven?” y “¿por qué te gusta el soul?”. No entiendo esa pregunta. ¿Por qué no? o “¿qué es lo que te llamó la atención del soul?”. No me preguntarían esto si cantara pop. Le preguntan a Britney Spears “¿Por qué te gusta la música pop?”; te apuesto a que nunca la cuestionan sobre eso…

¿Crees que te harían esa pregunta si fueras negra?

No creo, y es una pena. Odio que le den mucha importancia a la imagen, y tener la imagen incorrecta para mi música, pero ¿cómo puedes tener la imagen incorrecta para tu música? No puedes ver mi voz, no puedes mirar la música, es de todos y a nadie le pertenece. Muchas personas dicen: “Estás cantando música negra”. No estoy cantando la música de nadie, estoy cantando la música del Señor, ¡Él se la dio a todo el mundo! Él le dio a todo el mundo un par de oídos así que no estoy tomando la música de nadie, estoy haciendo la mía.

¿Ya aceptaste el éxito fenomenal de The Soul Sessions?

En realidad no… Recuerdo que recibí un e-mail que decía: “has vendido más de dos millones de discos”. Yo estaba sorprendida y después me sentí malagradecida. Pero no había hecho un disco antes y no sé cuántos más deba de vender. No sé si sean demasiados o no. ¡No estoy segura!

¿Cómo sucedió el primer álbum?

La idea inicial no era que The Soul Sessions se convirtiera en mi disco. No quería que mi primer álbum fuera de puros cóvers. Estaba escribiendo mis propias cosas y a la mitad del camino, la gente decía “deberíamos hacer un EP sólo con cinco canciones, algunos cóvers”. Pero después me explicaron: “es sólo para presentar tu voz, será muy underground”. No fueron a ninguna estación de radio, lo tomaron y la gente lo empezó a comprar… ¡no sé por qué! Supongo que fue cuestión de suerte.

¿Cuál es tu momento favorito de los últimos nueve meses?

Cantarle “It’s a Man’s Man’s World” a James Brown. ¡Nunca he tenido tanto miedo en mi vida! Es una de mis canciones favoritas desde que era pequeña. Quería cantarla, pero lo pude hacer frente al hombre. Tenía tanto miedo, no quería arruinar su canción, estaba muy preocupada. Pero le gustó; lo conocí el otro día y dijo que atrapó mi beso, ¡porque le mandé un beso!

¿Cuánta presión sentiste al hacer Mind, Body & Soul?

Mucha. Porque la gente que compró The Soul Sessions me conoció. Lo escucharon y les gustó, pero les gustó mi voz y las canciones de otras personas. No soy toda yo. Una de las razones por las cuales Mind, Body & Soul tiene ese título es porque tu mente, cuerpo y alma son todas tuyas y The Soul Sessions era sólo la mitad de mí. Así que Mind, Body & Soul soy yo; escribí las canciones con otras personas, pero son mis pensamientos y palabras.

Ha de ser muy personal…

Lo es. Es como caminar con tu corazón en la mano, ¡y da mucho miedo!

Platícame un poco sobre el proceso de composición.

Varía, porque compongo con personas diferentes. Mi primera experiencia de escribir canciones fue con Jonathan Sorteen y Connor Reeves. Ellos me enseñaron cómo escribir sin saber nada. Todo lo que tenía que hacer era sentarme en un cuarto y observar. ¡No sabía lo que era una armonía ni lo que era un verso! Pero cuando vas a Estados Unidos, la sección B es el “puente” pero el “puente” es el octavo del medio en el Reino Unido. ¡Es muy con- fuso!, ¡sólo estoy escribiendo!

¿Cómo contribuiste al proceso de grabación?

Cuando estoy escribiendo con alguien y me siento cómoda con esa persona, le puedo decir algunos comentarios como: “no estoy segura de esto” o “haz esto un poco más de esta forma”, pero las letras y la melodía las trabajas en conjunto.

¿Cómo fue trabajar con el legendario compositor Lamont Dossier?

Fue un día extraño, estaba muy nerviosa… Hay veces que llego a una sesión para componer y todo es genial porque los conozco. Pero ese día… “¡Por Dios, es Lamont Dossier y Beau (Dossier)!”, es la persona más sorprendente que haya conocido. Tiene 24 años, tiene su propia disquera, firmó a esta muchacha que ha compuesto para muchas personas. Lamont sólo se sentó y observaba, eso me gustó de él. Verlos juntos, padre e hijo, era sorprendente para mí, porque él sólo dejaba que Beau hiciera lo suyo. Cuando estaba en esa sesión de composición, Beau dijo una letra, y es probablemente mi letra preferida de todo lo que he hecho: “I’ve never seen the word love so personified as I do with you”.

¿Es más fácil cantar letras con las que te identifiques?

Cuando la gente me da una canción, siempre intentaré algo. Si Steve Greenberg (productor ejecutivo de Mind, Body & Soul) tiene una idea sobre una canción que no estoy sintiendo, pero quiere que la haga, la intentaré. Pero si la hago y no me gusta… no puedes cantar el soul si no está en tu alma. Por eso me gusta mucho esta música, porque es honesta. Cuando la estás escuchando, sientes que persona te está diciendo algo real.

¿Sentías como si estuvieras compitiendo con The Soul Sessions?

No, porque empecé a escribir Mind, Body & Soul antes que The Soul Sessions, pero puedes pensar eso fácilmente. No es posible competir con las canciones de otras personas, tienes que encontrar tu espacio y tener confianza de estar en él, aunque no estés seguro de que funcionará. Y no estoy segura de que así sea, porque espero lo peor para nunca estar decepcionada. Y si este disco no funciona y la gente no lo siente, entonces haré otro y después otros y ¡después otro!

¿Tenías algunos sencillos en mente cuando estabas haciendo el álbum?

¡No! Cuando empecé a escribir, la gente decía: “tendrás a lo mejor tres sencillos, un par de grandes canciones que la gente amará y después habrá algunas de relleno para el disco”. Dije “¿Qué? No voy a tener canciones de relleno”, y espero que no. Odio eso. ¿Para qué necesito una canción de relleno? ¡No necesito llenar el disco con nada!, ¡es ridículo! Quiero que cada canción que esté ahí tenga que estar ahí y eso es lo mejor de mi disco.

¿Cómo describirías el sentimiento completo de Mind, Body & Soul?

Es como The Soul Sessions, como de la vieja escuela, pero está mezclado con un poco de cosas nuevas. No es algo contemporáneo, no es hip hop, o lo que sea, pero hay influencias de eso. Es una mezcla de cosas diferentes.

¿Estabas consciente de que no querías repetir exactamente The Soul Sessions?

Sí, no podría hacerlo… espero que nunca lo haga, que nunca se me acaben las ideas. Si quisieras, escucharías The Soul Sessions. ¿Cuál es el chiste de comprar otro igual?

Danos una idea del ambiente en el que trabajaste con Lamont Dossier.

Entras a su casa y el estudio está a la derecha. Es pequeño, pero muy bueno y con una energía positiva, ¡su casa está llena de esta energía positiva! Los lugares pueden ser tan hermosos como quieras, tener velas, candelabros y ese tipo de cosas, y si las personas equivocadas están ahí antes que tú, entonces lo sientes. Pero pienso que ahí estaba la gente correcta porque tenía una energía agradable.

Háblame un poco sobre el tema “Jet Lag”.

Fue la primera canción que compuse, bueno que coescribí con Connor Reeves y Jonathan Shortan; realmente me gusta. ¡Y ha cambiado tanto! La he grabado tres o cuatro veces porque la compuse cuando tenía 14 años y mi voz ha ido cambiando, así que la grabamos, mi voz cambió, la grabamos una vez más, y eso ocurrió varias veces; después tuvimos muchas ideas diferentes. La letra que dice “Baby, don’t you know?” me encanta, habla de cómo te sientes cuando estás enamorada. Estar enamorada duele y a veces puede hacerte sentir enferma y no sabes qué te pasa. La gente pregunta: “Tenías 14 años. ¿Qué es lo que sabías?”. Confíen en mí, soy una persona muy sentimental. A la gente se le olvida cómo se siente. Muchas veces escribo sobre lo que espero que suceda. Algunas otras lo hago sobre un muchacho y qué tan perfecto es, y me lo imagino y él es mi hombre perfecto. Así que es como escribir una lista de deseos.

¿No es eso como cualquier adolescente?

Sí, soy una adolescente normal, ¡componer una canción y cantarla!

¿Deseas un novio perfecto?

¡Desde luego! Todo el mundo lo hace. Ahora tengo al novio perfecto. ¿Ves?, se cumplieron mis deseos.

Háblame de “Don’t Cha Wanna Ride”.

La mitad de esa canción fue compuesta en la casa de Desmond Child entre Betty (Wright) y yo. Compusimos un poco más después porque no pensábamos lo que haríamos con ella (incluirla en el disco). Cuando la ideamos era realmente mala. No tenía un sampleo, no tenía nada, la letra era (y canta) “‘Is there room for one more in your one man show, next to your bling bling?” ellos pusieron esa palabra, yo no cantaba bling bling en mi canción, así que después fue algo muy grande… era una canción mala. (Pero) había una vibra en ella, la forma como fluía. Cuando la canté con Betty, repasándola, y chasqueando los dedos, y era así (canta) “I was trying to protect you from, yourself ”. Tiene un ritmo que me gusta. Betty y yo estábamos en el estudio grabando otra cosa, y de repente nos encontramos cantándola y chasqueando los dedos, y Steve (Greenberg) estaba ahí sorprendido. Después él tuvo la idea de agregarle el sampleo, él había escuchado el otro demo que estaba espantoso y decía: “De ninguna manera. No voy a tener una canción en mi disco que se llame ¡la canción del ‘Bling Bling! ¿Qué diablos es eso?’”. Cambiamos la letra y tenemos (canta) “A car that fine don’t pass your way”. Me encanta, Betty es sorprendente, ¡a ella se le ocurrió eso!

Después de todo lo que te ha pasado ¿todavía te sientes de 17 años?

Realmente no. Siento como si mi cabeza no estuviera en ese lugar porque he estado trabajando mucho. Si fuera un muchacha normal de 17 años, estaría en la escuela, yendo a casa, siendo una niña. Pero si no fuera una cantante, no haría nada, ¡seríamos muy pobres!

En el corazón eres una hippie

(Ríe) ¡Gracias! ¡Lo tomaré como un cumplido!

Escucha Mind, Body & Soul:

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