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Joaquin Phoenix, el dolor de una carcajada

'Guasón' es la historia cinematográfica que se ha convertido en un fenómeno. Joaquin Phoenix se encuentra debajo de la pintura y Todd Phillips lo dirige

octubre 28, 2020

Warner Bros. Pictures México

EXTRAÍDO DE RS195, OCTUBRE 2019

Definitivamente no existe en la industria del entretenimiento una personalidad que se equipare a la de Joaquin Phoenix. El protagonista de películas como Her (2013) y You Were Never Really Here (20117), entre varias cintas peculiares, es un ser único en un ámbito en donde la homogeneidad es una característica que prevalece en los círculos de actores reconocidos en Hollywood. Por lo que entrevistarlo resulta siempre toda una provocación.

Identificado como un actor que ha manifestado una escasa inclinación a mantener una relación con los medios de comunicación con el paso de los años, Phoenix se ha convertido en una de las personalidades mas enigmáticas e indescifrables del mundo de la actuación.

Sin embargo, parece que ahora su carrera dará un giro de 180 grados y es que el introvertido Phoenix es protagonista de una de las películas de el año: Guasón, la aproximación un tanto terrenal que el director Todd Phillips realiza de uno de los villanos consentidos de DC Comics.

“La verdad es que no sabía mucho respecto a este personaje. Cuando era niño leí una novela gráfica titulada Arkham Asylum y básicamente es la única referencia que tengo del Guasón de mi infancia. Vi las películas de Tim Burton que iniciaron en 1989 y después llegaron las de Nolan y por supuesto la de Heath (Ledger) pero hasta ahí llega mi conocimiento sobre este rol”, es lo primero que Joaquin Phoenix nos dice en la entrevista exclusiva realizada en un exclusivo hotel de la zona de West Hollywood, California. Antes de continuar con la conversación, Phoenix pidió que nos mudáramos de habitación pues se sentía más cómodo en una pieza continua, aunque a mi parecer todos los cuartos en ese hotel son prácticamente iguales.

“La risa del personaje fue el inicio de todo. La manera que estaba descrito el rol en el guion dictaba que su carcajada debería tener una inflexión dolorosa a la vez. Puede sonar paradójico pero así se delineaba en el libreto por lo que consideré que era el punto de interés para empezar a construir el personaje. Cuando me entrevisté con Todd (Phillips) la primera ocasión, me enseñó una serie de videos de personas riéndose. Ahí me di cuenta que la risa de este personaje era la manera que tenía para manifestarse a los demás, era un signo de comunicación significativo en su interacción social. Parte de la personalidad de este personaje ha sido sosegada y la única manera de revelarla a los demás era a través de la risa. Empecé a probar distintas carcajadas, básicamente audicionando para mí mismo”, confiesa Phoenix sobre el comienzo de lo que hoy conocemos como Guasón.

Un intérprete del método en la era digital

Joquin Phoenix es uno de los últimos histriones que nos remite a esa generación de actores quienes tuvieron su momento de auge durante los años setenta y quienes adhirieron al quehacer cinematográfico un estilo de actuación mucho más vivencial que técnico. Al Pacino y Robert De Niro son los ejemplos más puntuales de este grupo. Nos da la impresión que Phoenix busca en todo momento el carácter verdadero de las cosas. No hay lugar para el engaño incluso en una charla casual como esta. “No estaba seguro de que podía llevar acabo esta misión. Es un rol muy complicado. Y quería hacer un trabajo puntual y distinto. No es fácil encontrarlo teniendo como referencia el de otros en el pasado. No sabía si podría lograr lo demandado de una manera constante o hacerlo cuando se me solicitara. Es como ejecutar una escena sumamente emotiva en un drama cinematográfico, simplemente no estás seguro si vas a encontrar las motivaciones necesarias para ejecutarla en un momento preciso. Cuando terminas de leer un libreto surgen todas esas sensaciones acordes a la historia que se está contando pero cuando son las seis de la mañana y has llegado a tu llamado en medio del tráfico y pasas al departamento de maquillaje, es muy complicado conseguir emocionalmente lo que te has planteado como objetivo con respecto al personaje. Traté de hacer pruebas de la carcajada del Guasón en todo momento, en muchas ocasiones en circunstancias incómodas para los demás, con la finalidad de discernir si podría lograrlo cuando se me pidiera”, agrega el actor quien hasta el momento de aceptar caracterizar a este personaje habría mantenido cierta renuencia a interpretar algún personaje que emergiera de las filas de las tiras cómicas. Cuenta una leyenda urbana en Hollywood que rechazó suplir a Edward Norton como El Increíble Hulk y también la negativa a la propuesta que Marvel le hizo para dar vida a Doctor Strange.

Es evidente que a Phoenix no le interesa convertirse en un superhéroe o formar parte de una redituable franquicia cinematográfica que le resuelva su situación económica. Phoenix es un actor interesado simplemente en el quehacer de la actuación.

“Es muy curioso porque lo único que Todd me solicitó todo el tiempo para poder trabajar en este proyecto es que contara con el tiempo suficiente para hacerlo. En un principio pensé que estaba exagerando sin embargo al ver la dinámica del rodaje me di cuenta que tenía toda la razón porque mucho de lo que se consiguió en la película fue durante su proceso”, declara Phoenix.

Un relato de lucimiento para un actor

Joaquin Rafael Bottom nació el 28 de octubre de 1974. Desde sus inicios como actor mostró una personalidad atípica a lo acostumbrado dentro de los círculos de adolescentes intérpretes además de manifestar un muy buen gusto a la hora de elegir sus proyectos. A pesar de provenir de una familia en donde River y Summer Phoenix eran ya célebres rostros de la generación de los años noventa, Joaquin se abrió paso en el complicado medio gracias a afortunadas intervenciones en películas como To Die For (1995), Quills (2000) y sobretodo su memorable caracterización de Commodus en la épica histórica titulada Gladiador (2000).

A lo largo de dos décadas lo hemos visto transitar en distintos géneros y madurar como uno de los intérpretes más interesantes de este tiempo actuando en trabajos autorales y complejas apuestas por lo que la audiencia está acostumbrada a esperar prácticamente todo de su parte, desde participaciones en falsos documentales como I’m Still Here (2010) o caracterizar al icónico Johnny Cash en el biopic titulado Walk The Line (2005). Sencillamente Phoenix representa el enigma actoral de su generación.

A pesar de que rumores revelaron que el personaje de Guasón fue ofrecido en un principio a Leonardo DiCaprio e incluso a Bill Skarsgård, el director Todd Phillips es quien desmiente tales aseveraciones. “Esta película no se hubiera realizado si Joaquin no hubiese aceptado protagonizarla. Es muy difícil pensar en otro actor para este personaje. Tuve la suerte de que Joaquin se haya visto atraído por el personaje”, confiesa Todd Phillips al referirse sobre el significado de la presencia de Phoenix en esta producción.

Y es que el intérprete pudo presentir que el realizador de cáusticas comedias como ¿Y qué pasó ayer? (2009) y War Dogs (2016) podría regalarnos una radiografía de personaje tan compleja como finalmente resultó Guasón. “Los superhéroes se han apoderado del mundo del cine, seamos sinceros. Es muy difícil pasar desapercibida esta situación. Lo que podemos apreciar es que parece que todo tipo de películas están destinadas a desaparecer con rapidez en la cartelera ante la presencia imperante del cine que nace a partir de los cómics, entonces me pregunté: ‘¿Cómo puedo llamar la atención ante esta circunstancia?’. Tenía ganas de hacer una película que homenajeara el cine de los años setenta con el cual yo crecí, estudios de personajes que se quedaron en mi memoria por la impresión que provocaron en su momento, precisamente ahí nació la idea de hacer una monografía de un antihéroe que proviene del universo de los superhéroes y para serte sincero, Guasón es el más cool de todos ellos”, manifiesta el realizador sobre el génesis del proyecto.

El miedo como propulsor del proyecto

Todd Phillips está consciente de que el factor miedo jugó un papel preponderante para que Phoenix aceptara intervenir en Guasón. Fue precisamente la suspicacia de saber si podría representar tan mítico personaje lo que lo llevó a finalmente aceptar el desafío.

“Jack Nicholson, Heath Ledger y Jared Leto son sólo algunos de los actores que se han sentido atraídos por este personaje y el común denominador que encontramos en ellos es que son intérpretes audaces. Para nuestra versión, requeríamos de alguien igual de valiente que los antecesores. Todos sabemos que Joaquin es un artista que se compromete al 100 por ciento en cada una de sus misiones interpretativas por lo que imaginábamos lo que conseguiríamos si él aceptaba colaborar con nosotros. Tendrías que preguntarle directamente a Joaquin qué tanta presión sintió de hacer un trabajo en medio de las referencias que dejaron los otros actores, por nuestra parte estamos más que satisfechos y conscientes del riesgo que tomó en esta producción”, agrega Phillips quien también revela que tuvo que entrevistarse en varias ocasiones con el actor con tal de ganar su confianza, finalmente Phoenix no tenía muchas referencias del trabajo de Phillips. Las credenciales del director se resumían a comedias punzantes, producciones que pertenecían al género del humor.

Guasón definitivamente es una tragedia. Sin embargo, nace a partir del humor, tal y como corresponde a estos tiempos. Tengo que hacer notar esto. Hice películas de comedia por mucho tiempo y algunas de ellas fueron muy exitosas pero todo pareciera indicar que la audiencia ha cambiado en la percepción de las mismas en este momento que estamos viviendo como sociedad. Ahora estamos en una circunstancia donde permea lo políticamente correcto. Es difícil ser gracioso hoy en día. Pareciera que todo resulta ofensivo para el público. Es aquí donde nace la idea de hacer Guasón puesto que puedo tocar en el género de la tragicomedia muchos temas que no se permiten actualmente en películas clasificadas como humorísticas exclusivamente”, fundamenta Phillips sobre las razones por las cuales emigró a lo que todo aparenta ser dramas oscuros. Por su parte, Phoenix se refiere al respecto: “Antes de aceptar interpretar al Guasón volví a ver El caballero de la noche (2008) de Christopher Nolan. Es un título cercano a mí por la participación que tiene Heath en ella. Curiosamente, cuando la revisité, me di cuenta que no recordaba nada de su actuación y es ahí donde radica la grandeza de su trabajo. El poder desaparecer una y otra vez. No ser alguien predecible. Mi aproximación a este rol contó con toda la libertad posible por parte de los productores y del mismo Todd quien en todo momento me dio total albedrío a mi entendimiento de Arthur Fleck y de su alterego”, dice contundente el actor.

Los retos enfrentados

Encontrar la corporalidad de tan psicótico rol es uno de los retos más importantes. Tanto Heath Ledger como César Romero descubrieron una manera característica para definir a el Guasón a través de su deambular y manierismos. “Tengo que darle crédito a este sensacional coreógrafo, Michael Arnold, quien estuvo para asistirme en toda la rutina física que realiza el payaso y ese baile que realizó en unas escaleras hacia el desenlace de la película. En un principio me mostré un tanto renuente a la participación de Arnold puesto pensé que yo mismo podría conseguir las rutinas dancísticas que el libreto demandaba. Sin embargo, cuando lo escuché hablar con tanta pasión sobre el objetivo de las coreografías quedé seducido por sus propuestas. Me mostró un video donde bailaba Ray Bolger como referencia a lo que buscábamos para la secuencia y por alguna razón quedé conmovido con lo que vi y dije: ‘Así es como se mueve el Guasón’. Había un dejo de arrogancia en la rutina y en la melodía misma. Caminaba con su mentón en alto. Fue realmente inspirador. Ahí comprendí que es un tipo fantástico”, agrega Phoenix al explicar la manera en la que resolvió diseñar la forma en la que se expresa corporalmente el Guasón. Esto, sin duda alguna, representará uno de los atractivos a destacar en la personificación que hace el actor pues nunca le habíamos visto realizar un trabajo tan somático como lo que veremos en Guasón.

Otro de los asuntos a cuestionar a Phoenix son lassecuencias que comparte con Robert De Niro en Guasón. De hecho, se resume a sólo un par de escenas, breves pero categóricas en la trama. Finalmente, Phillips está haciendo un evidente homenaje a la cinematografía de los antihéroes solitarios que permearon en las películas de los años setenta. Es evidente que la presencia de De Niro era imperativa. “No platiqué con él mucho. La escena inicial que compartimos fue la del green room donde estoy a la espera de entrar a su programa de televisión y por coincidencia esa fue la primera ocasión en la que estaba interpretando al Guasón por lo que comprenderás no estaba pensando mucho en su presencia. Mi atención en ese momento se centraba en mi concentración, estaba muy nervioso. La verdad no tuve mucha relación con él mientras trabajábamos”, responde Phoenix en aparente cándida manera. Siempre manteniendo este aire de poca relevancia a lo que sucede a su alrededor. Por alguna razón, le creemos pues sus contestaciones son casi inmediatas, sin dar lugar al cálculo.

Sin sentencia cierta

El propósito de todos los involucrados en esta producción es que al finalizar la proyección surjan más preguntas que respuestas. Finalmente, Guasón no es una producción más que sale del universo de los cómics, se trata de una provocación disfrazada de película de entretenimiento. “Lo que espero de esta cinta es que la audiencia se vea inmersa en el mundo de Arthur y que cada uno de nosotros se haga de una opinión con respecto a este personaje. Soy de los espectadores a los que no les gusta ver tráilers, leer entrevistas o críticas con respecto a una producción antes de ver la película. Soy de los que disfrutan el crear una opinión sin estar influenciado por elementos ajenos. Creo que esta cinta en particular desafía al espectador, de esa manera está concebida. Mi apreciación hacia el personaje de Arthur es bastante compleja, no tengo un criterio en particular para él, es algo más complicado. Lo que me fascina de este rol es que no hay una escena en específico que lo defina. Incluso hay varias cosas que acontecieron en su infancia que no vemos pero que son significativos en la concepción del mismo”, afirma Phoenix.

No es casualidad que en medio de la celebración del Festival de Cine de Toronto, el título se haya llevado el codiciado León de Oro que se otorga en Venecia como Mejor película en competencia. Era de esperarse que el reconocimiento levantaría críticas e incertidumbre, sin embargo es el resultado de un experimento de género orquestado fríamente por Phillips desde un principio y en el cual Phoenix jugó un papel imprescindible para lograr el resultado. “Lo que amo de este personaje es que no existe un sólo momento en la historia para definirlo por completo. Por lo general, vemos a los villanos caer a un depósito de ácido y transformarse en enemigos de los superhéroes. Con el Guasón habría algo distinto, es un asunto mucho más complejo y fascinante. La transformación viene de la entraña y de una infancia tormentosa que finalmente encuentra la manera de emerger. Mis respuestas hacia el comportamiento del Guasón no se resumen a una sola respuesta, creo que son varias, pero quiero que el público se sienta provocado a hacerse una opinión propia con respecto a este personaje, por esto no te voy a contestar esta pregunta”, finaliza el actor.

Mira el momento en que Joaquin Phoenix recibió el premio Óscar a Mejor actor por Guasón:

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