Estrenada originalmente en 2009, Avatar fue una de las películas más aclamadas en su momento haciendo que la secuela que está por ver la luz se haya hecho esperar, creando una gran expectativa entre sus seguidores. Sin embargo, hay algo que no deja tranquilo a su director, James Cameron, y es la idea de que quizá el filme no reciba la misma tracción que logró hace poco más de una década, planteando dar un fin a la franquicia en caso de que dicha continuación no sea bien recibida por el público.
En conversaciones con diferentes medios, el cineasta ha revelado que tiene preparadas otras tres secuelas que llegarían en 2024, 2026 y 2028, respectivamente. No obstante, Cameron comenta que el proyecto podría no completarse después de su tercera entrega, la cual aparentemente ya ha terminado su rodaje junto con algunas escenas de la cuarta, si es que los espectadores no muestran suficiente apetito como para completar todas las películas.
“El mercado podría decirnos que estamos acabados en tres meses, o que podríamos estar semiacabados, es decir: ‘Vale, completemos la historia dentro de la tercera película, y no sigamos sin parar’, si simplemente no es rentable”, aclaró el director a Total Film. “Estamos en un mundo diferente ahora que cuando escribí este material, incluso. Es el golpe de la pandemia y el streaming. O, por el contrario, tal vez le recordemos a la gente lo que significa ir al teatro. Esta película definitivamente hace eso. La pregunta es: ¿a cuánta gente le importa ahora?”.
La semana pasada se dio a conocer por fin el primer tráiler oficial de Avatar: El camino del agua, que llegará a los cines del mundo este 16 diciembre. Junto a Sam Worthington, Zoe Saldana, Sigourney Weaver y Stephan Lang, a quienes vimos en la película original, otros nombres nuevos figuran dentro de los miembros del reparto, como Kate Winslet, Cliff Curtis, Edie Falco, Brendan Cowell, Michelle Yeoh, Jemaine Clement, Oona Chaplin, Vin Diesel y CJ Jones.
La película tendrá una duración de poco más de tres horas, cosa que Cameron defendió a comienzos de este año, señalando que esperaba no recibir quejas sobre su extensión, “cuando se sientan a ver [la televisión] durante ocho horas”. Y añadió: “Casi puedo escribir esta parte de la crítica. ‘La agonizantemente larga película de tres horas…’ Es como, dame un puto respiro”.
