En medio de la era digital, pareciera que los formatos físicos en los que solía distribuirse la música de tus artistas favoritos hubieran desaparecido. Las plataformas de streaming se apoderaron de los lanzamientos y empezaron a reconocer a los músicos por el número de reproducciones más que por sus copias vendidas. Sin embargo, estudios realizados por Discogs señalan que los CDs, siendo el segundo formato más vendido en el portal web, se han vuelto a popularizar entre los coleccionistas del mercado.
Aunque la llegada del CD hizo creer a muchos que era el fin del vinilo, estos se han mantenido en demanda, sufriendo varios problemas en la actualidad debido a la misma. La escasez de plantas de producción, las mismas que se desecharon hace unas décadas para dar espacio al nuevo formato, ahora es objeto de reconstrucción para satisfacer las necesidades de los coleccionistas de esta generación, que sin duda abruman a los fabricantes.
Ahora, los amantes de la música han fijado su atención al formato más compacto, ocasionado que las cifras de la venta de CDs presenten su primer aumento en casi 20 años, tal como señalan las cifras de Billboard. Sin embargo, el público no es el único responsable de perpetuar este formato, sino que artistas y discográficas también juegan un papel importante en la sobrevivencia del CD.
Teniendo en cuenta que Discogs es una base de datos de información musical que recopila información sobre discos comerciales, promocionales, incluso discos no oficiales, la plataforma ha registrado un aumento en ventas los últimos cinco años.
Desde 2017, el número de copias listadas para la venta a través de este mercado ha aumentado constantemente significando, en términos generales, un crecimiento del 465%. De esta misma manera, se resalta que el aumento más significativo en estas cifras fue el año pasado además de que la plataforma ha registrado un mayor número de CDs a la venta en más de 4,6 listados lo que va del 2022. Si estos datos se mantienen estables como se ha visto en los últimos años, es muy posible que el regreso de los discos compactos sean un hecho.
El marketplace de Discogs ha presentado un incremento de dos millones de CDs vendidos, significando el aumento del 208% de la oferta entre 2017 y 2021. El disparo se debe a varios factores desde el impulso por parte de los artistas, las discográficas, la asequibilidad e incluso el valor intrínseco de las emociones en relación con la adquisición física de la música.
A pesar de que los vinilos también han vuelto a la cima evidenciado en la increíble cifra de mil millones de dólares en regalías de ventas tan solo el año pasado, el CD sigue siendo una propuesta más económica y asequible para todo tipo de público, incluso considerando que es un formato mucho más cómodo en comparación con los vinilos. La problemática que músicos como Jack White han denunciado sobre los retrasos en la fabricación de vinilos debido a la escasez de plantas en relación a la demanda, ha llevado a que tanto los artistas como amantes de la música abracen de nuevo este formato.
Exponentes de la industria como Taylor Swift, BTS y Adele han sido los portadores de la bandera por excelencia, pues cada artista sigue apostando a la publicación de sus álbumes en CDs, inculcando esta presentación a sus seguidores pertenecientes a las generaciones más jóvenes.
Y aunque el simple hecho del valor sentimental ante la adquisición física de los álbumes de los artistas que más resuenan en la actualidad sea, por lo pronto, una de las razones más significativas que responden a la pregunta del porqué la gente “no ha dejado ir” este formato, muchos CD ofrecen una experiencia de escucha de alta fidelidad única mezclado con la tecnología que arribó tras la llegada de las plataformas de streaming.
Los CDs propiciaron al mercado sus momentos más destacados en ventas a comienzos del siglo XXI, sin embargo, la tracción que se refleja en las cifras de entonces y ahora parecen aludir a un ciclo propio del ser humano. Por lo pronto, solo queda esperar si este formato será reinventado para tomar un gran papel en la industria musical actual o quizá solo sea una tendencia más atraída por la nostalgia.
