Crítica: El bastardo (Bastarden)
Después de incursionar en Hollywood, Mads Mikkelsen regresa a su tierra natal para protagonizar un nuevo drama duro y oscuro, de esos que le quedan como anillo al dedo.
Después de incursionar en Hollywood, Mads Mikkelsen regresa a su tierra natal para protagonizar un nuevo drama duro y oscuro, de esos que le quedan como anillo al dedo.