En el último clip de Billie Eilish, el cual es dirigido por ella misma, la cantante explora los múltiples matices que rigen la vida de una mujer examinada, claro está, desde un lente masculino. Eilish se mueve de habitación en habitación, dentro y fuera de la nevera, en medio de un ir y venir dentro de los rincones de su habitación, en la comodidad de su cama. Sus movimientos tenues acompañados del aura apacible que caracteriza el sonido de la canción, la progresión de melodías se mezcla a la perfección con el correr de los cuadros del video dando por resultado un clip melancólico y lúgubre.
Los versos del tema denotan la voz reflexiva que habita dentro de Eilish: “Y es todo lo que pienso cuando estoy detrás del volante/ Me preocupa que así es como me voy a sentir siempre/ Pero nada dura, conozco el trato” armoniza la intérprete. ‘Male Fantasy’ se construye bajo la premisa de los estándares irreales establecidos por la industria de la pornografía y el malestar que persiste alrededor de ese tema y todo lo que lo rodea.
“Fue difícil escribirlo porque queríamos que fuera lo más revelador posible. Es difícil ser vulnerable, honesto y abierto sobre mi vida en este momento. Me resulta mucho más fácil escribir sobre mi pasado y sobre cómo me sentía antes y encontrar una nueva perspectiva sobre algo que me ha pasado, sacarme de una situación”, confesó Eilish para i-D cuando se le preguntó por esta canción, “no suelo escribir sobre lo que estoy pasando en el momento porque es difícil procesarlo. Así que también se trataba de decir cómo me sentía. Fue duro y satisfactorio, revelador y exponente y también increíblemente catártico, también”.
Finalmente, el tema recoge la idea general que edifica la columna vertebral de su disco más reciente, Happier Than Ever, el cual es una catarsis permanente sobre el significado de ser mujer, la heteronormatividad y la fantasía sexual masculina.