Para Gonzalo Alhambra, la música ha formado parte de su vida desde que tiene memoria. “Aquí se vive muchísimo el flamenco”, cuenta el músico a ROLLING STONE en Español sobre crecer en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, “me he ido empapando de varios músicos, el flamenco se aprende mucho en la calle”. Pero Gonzalo no vislumbraba un futuro en la escena musical hasta el día que le obsequiaron una guitarra tras ingresar a la carrera de derecho.
Su pasión lo llevaría a audicionar para La Voz, momento que lo puso en el foco de atención. “Alejandro Sanz era la banda sonora de mi vida”, dice del juez que se convertiría en su coach aquella temporada. Después de haber puesto a los cuatro jueces en una reñida batalla por incluirlo en sus equipos, todo parecía estar a favor de Gonzalo, pero la pandemia de COVID-19 amenazaba con romper la burbuja. A mitad de las grabaciones, la cuarentena cambió las reglas del juego y mandó a todos a sus casas —y televisores.
Al salir de La Voz, Gonzalo enfrentaría un nuevo reto: crear su álbum debut en tres meses. Después de varios sencillos, Uno llegaría en 2022 con ritmos de flamenco, pop, bolero y hasta reggaetón. Ahora, el artista se prepara para dar comienzo a una nueva etapa de su proyecto musical, la cual fue anticipada por Lo Que Siento, su EP más reciente, funcionó como una transición a este nuevo capítulo.
Esta nueva era de Gonzalo Alhambra lo ha visto regresar a sus raíces: el flamenco pop. Para el artista, encontrar su sonido ciertamente no ha sido tarea fácil. “Ha sido duro porque no encontraba el sonido especial que quería que me caracterizara”, dice, “me gusta mucho experimentar, pero he querido volver al origen, porque al final es lo que yo siento”. El estreno y recepción de ‘DESDE QUE TÚ NO ESTÁS’, colaboración con Salistre, confirmó que finalmente lo había logrado.
‘LO DEMÁS ME SOBRA’ es el adelanto más reciente de lo que se convertirá en la segunda entrega discográfica de Gonzalo Alhambra. Luego de alcanzar el sonido que había estado persiguiendo, confiesa que la composición de sus nuevos temas ha ido fluyendo. “Lo primero que me salió fue el estribillo”, recuerda, “que es verdad que es de amor, pero quería que esta canción no fuera solo de un amor en pareja, que se pudiera asociar al amor en familia y a los amigos”. Esto mismo buscó reflejar en el video musical que acompaña el estreno. El clip encuentra al músico sentado en una mesa junto al mar, rodeado de seres queridos que revela son sus verdaderos amigos y compañeros con los que se ha criado desde pequeño.
“A mí me resulta muy complicado escribir cosas que no haya vivido”, cuenta sobre la naturaleza autobiográfica de su música, “cuando escribo canciones de algo que he vivido hay una conexión entre la canción y yo. Tiene esa alma, tiene esa verdad”. Para Gonzalo, la inspiración llega de manera espontánea, hasta en sueños: “me suele salir escribir canciones sin pretenderlo”.
Aunque los detalles de lo que será su próximo material permanecen en secreto, adelantó que el proceso creativo le ha resultado muy distinto a la creación de su debut: “Ha sido súper diferente porque el primero fue corriendo al límite de tiempo. Con este [disco] llevo mucho más tiempo trabajando, buscando el sonido que queremos. Lo estamos disfrutando”.
Esta nueva etapa trae gran ilusión para Gonzalo Alhambra. “Estoy contento porque ahora hago las canciones tal y como me gustan”, dice, “esta vez estoy haciendo totalmente lo que me sale del corazón. Con esta música no hay nada que pretenda, solo pretendo que a la gente le guste”. Este octubre, Gonzalo Alhambra continuará con su gira, llegando a la sala Sant Cugat 52, cercana a Barcelona, y a Madrid el día 23 de octubre para presentarse en la mítica sala Búho Real.
