SOJA (Soldiers of Jah Army) es una de las bandas estadounidenses de reggae más reconocidas a nivel mundial. Vuelven a Buenos Aires a presentar su último disco, Beauty In The Silence (2021), el 8 de noviembre en el Estadio Obras Sanitarias.
A horas de su arribo a la Argentina, ROLLING STONE habló con su vocalista, Jacob Hemphill, sobre el poder del reggae y el presente del grupo.
Tienen un público muy fiel en Argentina ¿Con qué se van a encontrar los fans en el próximo concierto?
Han pasado años desde la última vez que estuvimos allá y estamos muy contentos de regresar, Buenos Aires fue uno de los primeros lugares a los que la banda viajó internacionalmente. Vamos a tocar un setenta por ciento de nuestras canciones más conocidas y un treinta por ciento con canciones que nos gustan mucho y que queremos compartir con la gente, en parte algunas de nuestro último disco.
Hace tres años salió su último disco, pero en 2023 también hicieron un cover de Fall Out Boy ¿Cómo fue que decidieron sumar un tema de ellos para el compilado Pop Punk Goes Reggae?
Publicamos el disco Beauty In The Silence y después grabamos Beauty in The Acoustic, que es una grabación del disco entero pero en formato acústico. De Fall Out Boy hicimos “Sugar We are going down”, en lo personal amo la banda desde siempre. Creo que la composición de la canción es muy original, remite mucho a las canciones románticas de los años ochenta, su cantante, Patrick, es uno de los mejores que he escuchado. Fue algo muy divertido.
El reggae no era un género demasiado popular o trabajado en Estados Unidos ¿Eso ha cambiado, cierto?
Sí, el reggae estadounidense es mucho más grande ahora. Cuando comenzamos había muy pocas bandas, creo que ahora el clima político del mundo ha cambiado, todo se ha vuelto más extremo. Yo vivo en Estados Unidos y estamos más divididos que nunca, hay mucha izquierda y mucha derecha. El reggae cuenta la historia de la humanidad y es algo que la gente necesita más que nunca.
De hecho ustedes son de Arlington, Virginia, un suburbio de D.C. ¿Eso ha influenciado su música?
Sí, tener D.C. a la vuelta de la esquina y saber que los líderes del “mundo libre” están acá. Uno después viaja y te das cuenta de que D.C. es un lugar muy único.
¿Qué fue lo que te atrajo del reggae como para querer hacer una banda de ese género?
Cuando era chico escuchaba rock and roll, bandas como Guns N’ Roses, después apareció el hip-hop y solo escuchaba eso. Luego llegué a este tipo, Bob Marley, y parecía que era como si esta gente increíble como Martin Luther King tuviese una banda. Era algo más grande que la música, y quería tocar eso, además de la narrativa en el reggae. Es como música folk, pero de esta pequeña isla, Jamaica. Una vez que entrás, no hay otra música parecida.
Gran parte de su discografía fue publicada en ATO, el sello de Dave Matthews ¿Cómo surgió esa amistad?
Nos cruzábamos seguido y nuestro mánager, Elliot, fue quien originalmente nos puso en contacto. Los queremos mucho a todos en esa banda.
¿Creés que se puede hablar del reggae como un género universal o que cada país tiene una lectura demasiado personal?
Creo que escuchar música es para los oyentes, no me corresponde a mí pensar como se escucha el reggae.