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A un lado de la carretera junto a Arde Bogotá

La banda española presenta su segundo álbum de estudio y hablamos con sus cuatro integrantes durante su paso por la capital colombiana sobre salir de gira, lo que significa ser una banda en pleno 2023 y el génesis de Cowboys de la A3

Por  MARTÍN TORO

junio 5, 2023

Fotografía por Mónica Figueras

En 2017, un grupo de cuatro amigos se encontraba en un pub ubicado en Cartagena, la ciudad portuaria del sureste de España, pasando un buen rato entre ellos, cuando durante la noche surgió una discusión acerca de la vigencia del rock en español. “Toda la banda y todo lo que es el proyecto el día de hoy, nace un poco de una conversación en la que nos planteamos cómo es el rock en español hoy en día y si eso se ha desvirtuado o si puede evolucionar en otra cosa, y de ese sueño pues aquí estamos”, comenta el guitarrista Daniel Sánchez desde la ciudad de Bogotá en la que se encontraban haciendo una pequeña gira de conciertos.

En medio de este debate, Antonio García (voces), J. Mercader (batería), Daniel Sánchez (guitarra) y Pepe Esteban (bajo) decidieron tomar riendas en el asunto y crear una agrupación. Ahora solo faltaba lo más importante, música por hacer y el nombre de la banda. La primera demo que grabaron se llamó ‘Antiaéreo’, nació a partir de un audio de WhatsApp y le trabajaron hasta grabarla en el estudio del productor de la agrupación Lalo Gómez-Vizcaíno, en Murcia, España. “Era la primera demo que hacíamos y coincidió que yo vine de viaje aquí a Bogotá, Colombia, a visitar unos amigos y traje la demo. Bogotá fue el primer sitio donde la puse, la canción ya había sonado en nuestras casas, pero la primera gente que me atreví a enseñarselas fue a mis amigos y les gustó mucho. Entonces este (Bogotá) es el primer sitio donde nace el sonido de la banda y que le da el nombre a la agrupación”, dice Antonio García.

Fotografía por Mónica Figueras

‘Antiaéreo’ no solo sirvió para consolidar a la banda y darle una dirección sonora al proyecto, sino que, a su vez, se convirtió en el catalizador de la carrera musical de Arde Bogotá. Con tan solo haberla publicado en plataformas y haberla promocionado a través de redes sociales, la canción llegó a oídos de Sony Music España, quienes sin dudarlo decidieron firmar un contrato con la agrupación. “Desencadenó todo, porque una sola canción atrajo la atención de nuestra agencia y discográfica. Una sola canción nos ha llevado así lejos. Solo un tema publicado por nosotros mismos a través de una plataforma de Internet y de repente acabar en la multinacional más grande del mundo de la música, pues es todo”, comenta con bastante ánimo el guitarrista Daniel Sánchez. 

Cada uno de los integrantes trae consigo una carga pesada de influencias muy concretas, lo cual aporta mucho a la agrupación a la hora de componer y de buscar nuevos sonidos. “Siempre hemos intentado buscar referencias comunes a la hora de hacer música, también porque cuando quedamos para escribir por primera vez salió ese tema y salió así”, cuenta el baterista J. Mercader.

Esas referencias en común que dice el baterista suelen ser actos grandes de rock como los Foo Fighters y Arctic Monkeys. Estos sonidos, sumados a las influencias personales de cada uno de los integrantes, dieron a luz el primer EP de la banda, El Tiempo y la Actitud, publicado a mediados de 2020. Esta primera recopilación de canciones por parte de Arde Bogotá nació durante el confinamiento por la pandemia y toma como inspiración la serie de distintas emociones que se derivan del amor, en el que el indie y el rock clásico en español se juntan.

Para Arde Bogotá, la evolución de su sonido ha venido gracias a enfrentarse cara a cara, no solo entre ellos al momento de ensayar y presentar sus ideas, sino directamente con sus fanáticos durante sus presentaciones. “A lo mejor el público no lo siente así, pero nosotros sí. Lo que la gente nos entregaba el fin de semana, nos daba el valor de componer entre semana”, dice el vocalista. Al experimentar en vivo, la agrupación se dió cuenta de algunas curiosidades respecto a la forma de actuar del público. Se dieron cuenta de que si actuaban con más emoción no pasaba nada, de que si le subían el volumen y a la distorsión de los amplificadores tampoco pasaba nada distinto. Así que llegaron a la conclusión de que son las mismas canciones las que se encargan de proveer de energía y de emociones al público. Esto fue un alivio para Arde Bogotá, quienes se sentían un poco cohíbidos por el tabú y las “reglas” clásicas del rock. “En el fondo queríamos todos soltarnos”, agrega el guitarrista.


“Ser cuatro chavales y hacer una cosa que represente a los cuatro, que nos guste a los cuatro y signifique algo para los cuatro, es difícil”.


Después de la gran acogida que obtuvieron sus primeras canciones, Arde Bogotá se embarcó en la producción de su primer álbum de estudio, La Noche. “Fue un disco del cual teníamos algunas ideas desde el principio, como la canción ‘Dangerous’ y ‘Cariño’. De repente vimos que había un nexo sonoro y narrativo entre esas canciones, que eran esas cosas que ocurren cuando se esconde el sol y la forma en la que suenan”, dice Antonio García. Arde Bogotá puso todos esos conceptos sobre la mesa y comenzaron a crear canciones para una aventura nocturna. “Teníamos muy clara la idea de un muchacho que sale por la noche y empiezan a pasarle cosas hasta que por fin se besa con la persona que buscaba y todo cambia, decidimos completar los huecos entre eso y obtuvimos las 10 canciones”, agrega.

Trabajar y completar La Noche, les llevó cerca de seis o siete meses. El álbum fue producido en compañía de Lalo Gómez-Vizcaíno y retoma algunas canciones que traían atrás de su primer EP y otras que nacieron cuando el concepto del disco estaba esclarecido. “Creo que suele pasar, cuando encuentras la hebra del hilo, tiras y empieza a salir todo solo. Fue un poco así, había ya dos o tres canciones, pero dimos con la veta y todo empezó a salir, todo tenía un sentido y cuadraba”, comenta García.

La Noche terminó por bendecir a Arde Bogotá ante el público del continente europeo y americano. Gracias a este primer trabajo de estudio, Arde Bogotá logró posicionarse en el mapa musical y recibir su primer reconocimiento al ganar el premio al Mejor Álbum de Rock en los Premios de la Música de la Región de Murcia. La banda inició su primera gira, recorriendo gran parte del territorio español con más de 86 conciertos y todas las entradas agotadas.

Fotografía por Mónica Figueras

Para Arde Bogotá ser una agrupación con cuatro integrantes en pleno 2023 no es una tarea sencilla. “Cada día es más fácil para un chaval tener un ordenador en su casa y hacer música desde ahí. Ser cuatro chavales y hacer una cosa que represente a los cuatro, que nos guste y signifique algo para todos, es difícil, y creo que cada vez más, pero bueno, no por eso desaparecen las bandas”, opina el vocalista.

…Y no por eso se dejan de hacer discos y de componer nueva música. En mayo de 2023, Arde Bogotá publicó su segundo álbum de estudio titulado Cowboys de la A3. El nombre del disco proviene de una canción con el mismo nombre que básicamente le da al álbum una temática y un paisaje sonoro en el que se desenvolverán los demás temas. Para Arde Bogotá, este nuevo disco es un disco de viajes y, al igual que la canción, une sonidos del pasado con la emoción y el mensaje contemporáneo que la banda quiere transmitir. “Cuando buscamos el nombre para el disco, sentimos que no había otro que lo representara mejor que el título de esa canción”, dice García. 


“No se queden en el armario, no mueran sepultados por el polvo de que ‘si no suena así, no es rock’… Mentira cochina”.


Cowboys de la A3 fue producido y grabado en Cartagena en España, con Lalo Gómez-Vizcaíno, que es el productor del disco anterior, en su estudio. El álbum cuenta con 12 cortes con potentes baterías, profundos riffs de guitarra, líneas de bajo que le dan todo el movimiento al asunto y líricas clásicas del rock en español. Canciones como ‘Los Perros’, ‘Escorpio y Sagitario’ y ‘Flor de La Mancha’ ponen sobre la mesa el talento y espectro sonoro que cubre Arde Bogotá.

El cuarteto de españoles ha aprendido más de un par de cosas a lo largo del camino, a través de tantas horas de viajes por carretera a lo largo de España y el mundo entero. Hoy en día, “a las bandas que apenas están comenzando, les aconsejo que no se queden en el armario, que no mueran sepultados por el polvo de que ‘si no suena así no es rock’… Mentira cochina”, dice Antonio García.

Para Arde Bogotá, el secreto está en salir al mundo exterior, empaparse de otras vivencias y traducirlas a sus instrumentos. Este año, la banda seguirá conociendo y aprendiendo de lo que el mundo exterior puede ofrecer con su nueva gira por España y Europa en el que seguirán promocionando su nuevo álbum. Nadie sabe qué les espera a la vuelta de la esquina.

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